- De
adentro hacia afuera - La
personalidad y la ética del carácter - La
"grandeza" primaria y secundaria - El
poder de un paradigma - El
poder de un cambio de paradigma - Ver y
ser - El
paradigma basado en principios - Principios del
desarrollo y el cambio - El
modo en que vemos el problema es el problema - Un
nuevo nivel de pensamiento
INTRODUCCION
En este trabajo los
integrantes de este grupo
explicaremos a cerca de los paradigmas y
principios de
este libro titulado
"los 7 hábitos de la gente altamente efectiva", leyendo,
analizando las ideas dadas por el autor para así
transmitir esencialmente lo que nos quiere decir.
En este trabajo mencionaremos la importancia de un paradigma y
como asimilarlo, ya que muchas están acostumbradas a un
paradigma y se les hace muy difícil dejarlos y asimilar
uno nuevo.
DE ADENTRO HACIA
AFUERA
El autor nos da a entender en este primer capítulo de
paradigmas y principios, que el logro de nuestras metas en el
ámbito de los negocios,
trabajo, profesión o estudio siempre nos dejan un costo o por
llamarlo de otra forma una consecuencia en nuestra vida, y cita
varios ejemplos:
-Desde el descuido de la familia
(hijos, pareja)
-Del hogar.
-De uno mismo en su aspecto físico y
psicológico.
-El exceso de presión
(trabajos, educación de los
hijos y el mantenimiento
del hogar) que uno siente.
Justamente el autor pasa por estas circunstancias y se ve
afectado con su hijo, el cual tiene un problema de inmadurez,
falta de confianza a su persona;
él y su esposa deciden ayudar a su hijo, primero ellos
toman en cuenta sus propias conductas y aptitudes, quizás
son estas los que han hecho un mal a su hijo. Adquieren una
actitud
positiva, es decir alentando a su hijo; después de un
tiempo se
dieron cuenta que no funcionaba; y por casualidad mientras el
autor desarrolló un trabajo acerca de la percepción, se comenzó a preguntar
que la solución podría estar allí, lo
comentó con su esposa y llegaron a la conclusión de
que al estar al lado del hijo en los juegos de
beisbol se le decía en forma implícita que: "No
eres capaz alguien tiene que protegerte".
Por último comprendieron que la mejor forma de ayudar a
su hijo era cambiar sus percepciones propias.
LA PERSONALIDAD Y
LA ÉTICA DEL CARÁCTER
El autor en este capítulo realiza un estudio acerca del
éxito,
para esto recopilan libros,
artículos y ensayos que
datan desde 1776 en los Estados Unidos;
su estudio lo llevó a establecer que gran parte de la
literatura acerca
del éxito de los últimos 50 años era
superficial, es decir basados a lo que es la imagen, las
técnicas y los arreglos transitorios de
tipo social.
Y en un total contraste, los libros de los primeros 150
años especificaban, que el éxito se basaba en la
"ética
del carácter" como la integridad, humildad,
fidelidad, mesura, justicia,
comprensión, modestia, el valor,
etc.
Dando a entender que la ética del carácter
enseña que las personas solo pueden experimentar un
verdadero éxito y una felicidad duradera cuando aprendan
esos principios y los integra a su carácter
básico.
Señala también que poco después de la
Primera Guerra
Mundial la concepción de éxito pasó de
la ética del carácter a lo que podría
llamarse la "ética de la
personalidad", es decir al éxito pasó a ser una
función
más de la personalidad
de la imagen pública, de las actitudes, de
las conductas, habilidades y técnicas que hacen funcionar
los procesos de la
interacción humana. La ética de la
personalidad, en lo esencial tomó dos sendas: Una, la de
técnicas de las relaciones
públicas y humanas, y la otra, de la actitud mental
positiva (AMP).
Se puede que a medida que pasa el tiempo el éxito ha
sufrido una serie de cambios, debido a que la ética del
carácter se ha ido dejando de lado al optar
inconscientemente por la ética de la personalidad lo cual
trae consigo una felicidad somera que llegaría a ser como
una careta hipócrita que utilizamos en el transcurso y
desarrollo
personal.
LA "GRANDEZA"
PRIMARIA Y SECUNDARIA
En el tema presente el autor da entender que los elementos de
la ética de la personalidad (desarrollo de
la personalidad, habilidades de la
comunicación, estrategia de
influencia y pensamiento
positivo) son beneficiosos, inclusive a veces para lograr el
éxito. Pero son rasgos secundarios, y no
primarios.
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