Desde que Peter Drucker y Alvin Toffler llamaron la
atención sobre la importancia del conocimiento
como un recurso gestionable y fuente de
poder, se ha incrementado el número de especialistas
que comenzaron a teorizar sobre su gestión
y la relación con la
organización industrial, la gestión
tecnológica, y la gestión
estratégica.
El conocimiento es imprescindible para el desarrollo.
Muchos autores concuerdan que en la actualidad, el
conocimiento no es solo otro recurso, sino el único
que, además, refiere una categoría adicional al
recurso humano y lo convierte en el activo más importante.
En la actualidad los activos de
capital que
crean riqueza no son la tierra, ni
el trabajo
físico, ni fábricas, son los activos del
conocimiento.
Los conocimientos del hombre sobre
el mundo, al principio, estaban entrelazados con su actividad
material, eran empíricos y no llegaban a conclusiones ni a
generalizaciones teóricas de la experiencia
práctica, pero se pusieron a su servicio.
El hombre al
transformar sus herramientas
propició su crecimiento y expandió el conocimiento,
comenzó la
administración del mismo. (Almaguer. A,
2008).
Desde los años 90´s se viene discutiendo
con mucha fuerza en los
medios
académicos, científicos y empresariales, sobre una
nueva sociedad y una
nueva economía, que tienen como atributos
fundamentales: información, conocimiento y aprendizaje. De
igual forma, se habla de que muchas organizaciones
han basado su éxito
en el desarrollo intensivo de su capital
intelectual, en contraposición a la
tradicional empresa que se fundamenta en el uso
intensivo de su mano de obra, capital financiero o
tecnológico. (Castro Díaz- Balart,
2003).
La gestión del
conocimiento consiste en optimizar la utilización de
este recurso mediante la creación de las condiciones
necesarias para que los flujos de conocimiento circulen mejor. Lo
que gestionamos en realidad, pues, no es el conocimiento en
sí mismo, sino las condiciones, el entorno y todo lo que
hace posible y fomenta dos procesos
fundamentales: la creación y la transmisión de
conocimiento. (Canal, Agusti. 2003).
El motivo que originó la aparición de la
Gestión del conocimeinto ha sido la incapacidad de las
prácticas gerenciales tradicionales para administrar
eficientemente el conocimiento tácito y su
transformación a explícito. Si este no se gestiona
de alguna forma, ya sea almacenándolo, o haciéndolo
circular, o gestionando las competencias de
quienes participan en esa realidad, se corre el riesgo de perder
el principal factor diferenciador que promueve la sinergia en la
innovación o en el cambio.
Los principales
argumentos son
a) La necesidad de combinar el conocimiento
explícito, el tácito, la inteligencia
competitiva, para aumentar la velocidad en
producir cambios en las estructuras de
conocimiento, y la cantidad de respuestas efectivas que se hacen
en tiempo y
calidad a las
demandas del contexto.
b) Aumentar la conectividad del sistema,
así como crear los lenguajes facilitadores de la
circulación del conocimiento, en donde se aumenta la
comprensión del conocimiento que es necesario difundir y
compartir.
c) En esta disciplina
aparecen nuevas formas de producción del conocimiento en redes y en espacios no
tradicionales como son los lugares de trabajo, en
donde el proceso de
creación de conocimiento se da desde la experiencia que se
transforma en conocimiento y el conocimiento en experiencia como
"nuevos modelos
cognitivos basados en el trabajo de colaboración y en el
uso de
ambientes virtuales de comunicación" y dentro de un ámbito
multidisciplinario, como Historia, Economía,
Educación,
Neurociencias, Psicología, Sociología, Antropología, entre otras.
d) Otro aspecto es la necesidad de crear una
inteligencia colectiva o cerebro
organizacional, que permita incrementar el valor "de una
organización o región por medio de
la identificación, captura, evaluación, síntesis,
organización, distribución y aplicación del
capital de conocimiento en organizaciones públicas o
privadas, empresas,
instituciones,
etc." Ello implica gestionar información, inteligencia,
documentación, personal,
innovación y cambio y la organización del trabajo
dentro de una dinámica sistémica para rescatar el
conocimiento tácito y transformarlo en
explícito.
e) Garantizar la circulación del capital
intelectual social dentro de los diferentes contextos de una
determinada sociedad para fortalecer sus procesos de
desarrollo.
En definitiva la Gestión del Conocimiento (GC) se
refiere más a la capacidad de aprender y generar
conocimiento nuevo o mejorar el que existe. Por lo tanto, una de
las funciones del
Estadoes garantizar el acceso de los sectores más
excluidos al desarrollo, a través del fortalecimiento de
la capacidad de aprender de estos grupos y el
acceso al capital intelectual social, minimizando el riesgo de la
apropiación privada de conocimiento clave, y el perjuicio
que ello conlleva a los procesos democráticos y a la
gobernabilidad.
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