El arte de educar educándonos

Aclaración:

Los libros citados y/o consultados
pertenecen a una lectura realizada con anterioridad, y que
coinciden con la toma de conciencia de lo que es "ser
docente".

A modo de
introducción

Mi experiencia resulta enriquecedora y
atrayente para mí mismo, mis prácticas comenzaron
desde los primeros días de propedéutico.

Muchos saberes, conocimientos y
experiencias me fueron transmitidos desde aquel remoto hecho. Me
fueron atrayentes, porque con toda seguridad lo digo, he
aprendido cuestiones que en otro lugar no lo hubiese hecho. Y por
suerte o por decisión estoy en el mismo lugar para seguir
aprendiendo.

Ideas previas

Comenzar las prácticas del Taller
III no era tarea fácil, tampoco era una
cuestión que irradiaba mi desespero. Lo tomaba mas como un
desafío. Siempre que puedo desafiarme a mi mismo lo hago,
creo que es un mecanismo de autoayuda. Era y fue así
debido a que este Taller lo iba a recursar. Recordaba aquella
primer experiencia inconclusa, producto de ella de la
situación económica, aquel primer año
comenzaba yo a tener mi primer trabajo formal, trabajo que
influiría en mi vida de una manera poco pensada
previamente.; cuestión esta, acarreada por mi habito de
vida nocturna que me llevaron al borde del precipicio
estudiantil, ese año perdí tres materias. Historia
Argentina I, Metodología de la
Investigación Histórica y Taller III, esto
significaba la pérdida de las prácticas a un mes de
finalizarlas.

Creo al fin y al cabo que las cosas
suceden por algo. Cuando tuve la oportunidad de volver a cursar
esas tres materias me tome "revancha intelectual"; en
Metodología hice dos monografías y una de ellas la
publique, en Historia Argentina Terminé atrapado por su
contenido, por demás polémico, que hoy estoy
preparando un libro sobre su temática (cuestión de
no creer porque consideraba a la materia, la mas fea de la
carrera por su contenido). Taller era distinto, creo que pasa un
poco por las representaciones previas que se hacen de las
prácticas mismas. No lo voy a negar, creo que todo
principiante se siente nervioso ante un grupo de alumnos, y ser
conciente, también de que en el transcurso de las clases
estas siendo observado y lo que es mas evaluado por el titular de
la cátedra. La verdad creo que esos nervios fueron
paliados por la buena predisposición y el carácter
para nada mezquino del profesor titular de la cátedra y el
mismo curso, que correspondió al nivel en que se
encontraba. Un curso de no mas de 6 alumnos, entre recursantes y
cursantes, esto era el curso del 1er. año del Profesorado
de Historia del ISPI 4026 de la Ciudad de Villa Ocampo, situada
al norte de la provincia de Santa Fe. En definitiva la
mayoría del curso eran alumnos con quien yo, en las
interminables discusiones de pasillos y encuentros clandestinos
había entablado cierta reilación de amistad y en
otros casos de compañerismo. Sin duda esto
favoreció mi representación positiva del curso,
porque sabía de antemano que mis futuros alumnos eran
personas adultas donde uno como docente de práctica
podía desarrollar las clases con normalidad e incluso con
cierto grado de comodidad. Es decir nuestra representación
mutua tiene su origen en…

(…)"Ambos llevan a cabo una
selección y una categorización de las
características del otro y es sobre esta base sobre la que
empezarán a construir la representación
mutua."(…)[1]

Esto puede estar relacionado con lo que
dice la profesora Alejandra Morzan en su libro "Saberes y Sabores
de la práctica docente":

(…)"La práctica
docente como trayecto de formación que identifica como
ámbito formativo no sólo el de la formación
inicial y la instancias de perfeccionamiento, sino también
la propia biografía escolar y los procesos de
socialización"(…)[2]

Es decir, el cúmulo de conocimientos
que había adquirido en el transcurso de mi
formación me habilitaba, en cierto sentido, a realizar mis
primeras prácticas, pero esa formación
teórico – práctica, fue acompañada
durante esos años de una construcción socializadora
del saber (relaciones escolares, intercambios de ideas, etc.). En
otras palabras mis alumnos eran mis pares.

Impresión inicial
y posterior

Grande fue mi sorpresa, y esto con toda
humildad, al darme cuenta de que mis conocimientos no eran nulos
como creía, que me había preparado bien para ello y
que estaba en condiciones (mínimas) de dar una clase
frente a un curso.

Con el correr de los días me
sentía mas seguro de mí mismo, y esta seguridad no
se daba por mi ego, era solo una cuestión de observar el
zig- zag de las clases.

Todo podría decirse que marchaba
bien, todo hasta que me toco la última clase, esta clase
tenía como contenido conceptual "La evolución de la
historia como ciencia"