- Resumen
- La
Pedagogía y su objeto de estudio - Regularidades y principios de la
dirección del proceso pedagógico en la
educación a distancia - Relación entre el conocimiento acerca de
la realidad social y la influencia consciente y organizada
sobre los estudiantes - Relación entre objetivo, desarrollo del
proceso y el logro de actitudes, aptitudes y capacidades
creadoras en los estudiantes - Relación entre la comunicación
pedagógica, el uso de las TIC y la
participación activa del estudiante - Relación entre estilo de
dirección, influencia conjunta de los
profesores/tutores y fuerzas educativas - Relación entre el diagnóstico, la
conducción del proceso por parte de los
profesores/tutores y la autoactividad - Principio de la unidad del carácter
científico e ideológico del proceso
pedagógico de educación a
distancia - Principio de la vinculación de la
educación con la vida, el medio social y el
trabajo - Principio del carácter colectivo e
individual de la educación de la personalidad y el
respeto a ésta - Principio de la unidad de lo instructivo, lo
educativo y lo desarrollador - Principio de la unidad de lo cognitivo y lo
afectivo - Principio de la unidad entre la actividad, la
comunicación y la personalidad - Bibliografía
Resumen
El presente trabajo tiene como propósito
acercarnos a las regularidades y principios de la
dirección del proceso pedagógico de
educación a distancia, tomando como base importante
formulaciones teóricas realizadas por investigadores
cubanas en el campo de la pedagogía.
La
Pedagogía y su objeto de estudio
Definición de proceso pedagógico de
educación a distancia y dirección del proceso
pedagógico de educación a distancia.
El interés del autor no es adentrarse en la
conocida discusión del carácter de ciencia que
posee o no la Pedagogía, ya que asume de base los
postulados de investigadores cubanos del Instituto Central de
Ciencias Pedagógicas (ICCP) quienes han
expresado:
"La Pedagogía es una ciencia que aborda el
fenómeno educativo, pero que a diferencia de otras que
analizan la educación desde diferentes aristas, tiene
la particularidad de tenerla como su único objeto de
estudio. Cuando, se habla de la educación como objeto
de estudio de la Pedagogía no lo hacemos en su sentido
amplio, sino en uno más específico y
determinado" (López Hurtado, J. y otros.
2005:2).
En esta definición y como producto de profundas
investigaciones en el campo educativo cubano por parte de esta
institución, se determina explícitamente el
carácter de ciencia que indudablemente posee la
Pedagogía. Esta aunque mantiene estrecha relación
con otras ciencias, "posee su propio objeto de estudio su sistema
categorial, sus principios y regularidades que constituyen
teorías con un nivel de conocimiento y desarrollo
suficiente" (López Hurtado, J. y otros. 2005:2) para
hacerla independiente en el marco de las ciencias de la
educación.
La educación es el centro de atención de
esta ciencia, pero como se ha manifestado en la
definición, no la aborda en toda su expresión sino
más bien en aquella que resulta estructurada, organizada y
dirigida dentro o fuera de una institución. De esta forma
"puede considerarse como objeto de estudio de la
Pedagogía, el descubrimiento de las regularidades, el
establecimiento de principios que permiten de forma consciente
estructurar, organizar y dirigir, ya sea en un marco
institucional, escolar o extraescolar, el proceso educativo
especialmente hacia el logro de un objetivo determinado – la
apropiación por cada hombre de la herencia
histórico-cultural acumulada por la humanidad que le ha
precedido" (López Hurtado, J. y otros. 2005:2).
La educación, en interés de la
Pedagogía, es un proceso que conlleva a la profunda
reflexión y pensamiento de quienes la conciben, la
estructuran, la organizan y la dirigen, partiendo del
conocimiento científico, la observación y los
resultados que se obtienen en estudios teóricos y aquellos
que son de naturaleza práctica ya sea dentro o fuera de la
escuela. Con ello se persiguen metas bien definidas que
están en correspondencia con las necesidades sociales y
políticas de la clase dominante, lo que para Cuba
representa la formación de un hombre capaz de entender su
pasado y su riqueza cultural para interpretar el presente en el
que vive y de la misma manera proyectarse hacia el futuro desde
una actitud creadora y trasformadora de la realidad social y la
suya propia, en plena interacción con sus
semejantes:
"Definimos la educación – en el contexto
escolarizado – y en correspondencia con el objeto de estudio
de la pedagogía – como un sistema de influencias
conscientemente organizado, dirigido y sistematizado sobre la
base de una concepción pedagógica determinada,
cuyo objetivo más general es la formación
multilateral y armónica del educando cuyo
núcleo esencial debe estar en la formación de
los valores morales, para que se integre a la sociedad en que
vive y contribuya a su desarrollo y perfeccionamiento"
(López Hurtado, J. y otros. 2003:53).
La educación a la que se hace referencia en estos
planteamientos se concreta en el proceso
pedagógico[1]quien a su vez constituye una
de las categorías fundamentales de la
Pedagogía.
Investigadores del ICCP y el MINED aseguran que el
proceso pedagógico "incluye los procesos de
enseñanza y educación, organizados en su conjunto y
dirigidos a la formación de la personalidad, en este
proceso se establecen relaciones sociales activas entre los
pedagogos y los educandos y su influencia recíproca
subordinada al logro de los objetivos planteados por la sociedad"
(citado por González Soca, A. María.
2002:165).
Mientras el Dr. J. Chávez plantea que "es un
momento integrador de todas las influencias educativas y abarca
las diferentes esferas del desarrollo del educando: cognitivo,
afectivo, volitivo, físico y aunque en algunos momentos
esté dirigido con mayor énfasis a una esfera en
particular, o a un componente especifico de ésta, en mayor
o menor medida también están implicadas las esferas
restantes" (Chávez Rodríguez, J.
2007:14).
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