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Fundamentación conceptual del sistema de gestión ambiental en el sector empresarial




Enviado por yiselm



Partes: 1, 2

  1. Resumen
  2. Introducción
  3. Definición de Gestión Ambiental
  4. Marco legal de la gestión ambiental
  5. Definición y caracterización de la Gestión Ambiental Empresarial
  6. Tratamiento Jurídico del Sistema de Gestión Ambiental Empresarial
  7. Aplicación de la gestión medioambiental
  8. Normas técnicas que regulan el Sistema de Gestión Ambiental Empresarial. Procedimiento para establecer el Sistema de Gestión Ambiental Empresarial, fases, etapas y requisitos
  9. Etapas del sistema de gestión ambiental empresarial
  10. Conclusiones
  11. Bibliografía

Resumen

se aborda desde la perspectiva conceptual el sistema de gestión ambiental, la normativa técnica, y la dimensión jurídica de este sistema, así como su aplicación en Cuba.

Palabras Claves: gestión ambiental, empresa, medio ambiente

Introducción

Los hombres nacemos y desarrollamos toda nuestra existencia, inmersos en un sistema de relaciones biológicas, sociales, económicas y emocionales, que inciden en la formación de los valores que determinan nuestra proyección ante la naturaleza y la sociedad. Esta relación es bidireccional, como especies e individuos, somos el resultado del medio ambiente, pero a su vez nuestra acción sobre el mismo, determina su salud y en última instancia la nuestra.

En las sociedades capitalistas industrializadas se ha entendido el desarrollo como un crecimiento lineal divorciado de factores naturales y se han desarrollado de una forma u otra, viendo en la naturaleza un almacén inagotable, de donde se podría extraer todo lo necesario para el logro de su desarrollo económico y hacia el cual se podía lanzar a su vez, todo lo desechazable de la actividad humana. [1]

La preocupación de las ciencias – las exactas, las naturales y las sociales- por estudiar y resolver el grave dilema que enfrenta hoy día la humanidad en cuanto a la salvaguarda del entorno socio-natural, obliga a abordar seriamente este tema no solo en lo multidisciplinario sino también en lo transdiciplinario. Por ello, todo estudio que implique la conservación de la diversidad biológica, debe realizarse convocando a las ciencias que más implicadas estén con el tema específico de que se trate, por lo que no es de extrañar que con temas sociológicos, jurídicos o políticos se conjuguen a su vez aspectos geográficos, geológicos, químicos y/o biológicos; y es que en cuanto a lo que a conservación de la diversidad biológica se refiere, amén de las leyes de la naturaleza – nacimiento, desarrollo y muerte– o de los eventos generados por su evolución – las glaciaciones, por ejemplo – la fuerza que más lo ha impactado negativamente ha sido la humana. [2]

En toda la historia de la humanidad, hubo hombres capaces de comprender el lugar de la especie humana dentro de la naturaleza y el carácter dialéctico y multilateral de la relación hombre-naturaleza. Sin embargo, los intereses económicos ahogaron y en el mejor de los casos, hicieron olvidar al hombre que su existencia es el resultado de un largo proceso de evolución de la materia, que se mueve en un círculo eterno que se cierra en períodos de tiempo independientes de la medida del año terrestre, obviándose el hecho que el hombre es parte indisoluble e interdependiente de la diversidad biológica. [3]

La actitud de las empresas hacia el medio ambiente ha cambiado radicalmente en los últimos años. Hasta hace apenas unas décadas, la mayoría de las empresas presentaban una actitud totalmente defensiva hacia el medio ambiente. Este era visto básicamente como una amenaza, como algo impuesto por la legislación, que únicamente suponía una desviación de las tareas principales de la empresa y le generaba unos mayores costos, reduciendo su rentabilidad. Esta visión negativa del medio ambiente fue la predominante durante mucho tiempo y aún se mantiene en algunos sectores y empresas. Sin embargo, poco a poco y como consecuencia de la transformación que ha vivido la sociedad en su conjunto, cada vez las empresas se han dado cuenta que el medio ambiente lo puede ser algo positivo, ya que se puede convertir en una fuente de oportunidades de desarrollo de nuevos mercados, productos y procesos productivos.

Este cambio en la actitud de las empresas hacia el medio ambiente ha dado lugar a una modificación en el diseño de las estrategias empresariales, convirtiéndose en un elemento relevante de la definición de estas. Ello es debido a que la integración del medio ambiente en la estrategia de la empresa le pude permitir obtener una ventaja competitiva sobre sus competidores, bien a través de la reducción de costos o la diferenciación, que podría derivar en una mayor rentabilidad.[4]

La ISO 14004:2004 menciona que una organización debería implementar un Sistema de Gestión Ambiental eficaz para ayudar a proteger la salud humana y el ambiente de los potenciales impactos de sus actividades, productos o servicios y para ayudar en el mantenimiento y la mejora de la calidad ambiental., expresa que el tener un Sistema de Gestión Ambiental puede ayudar a una organización a dar confianza a sus partes interesadas de que existe un compromiso de la dirección para cumplir lo establecido en su política, objetivos y metas, que se ha puesto énfasis en la prevención antes que en la acción correctiva.[5]

Una organización, cuyo sistema de gestión incorpore un Sistema de Gestión Ambiental tiene un marco que le permite equilibrar e integrar los intereses económicos y ambientales y que puede obtener ventajas competitivas significativas.

Por eso, en la ley marco cubana para todas las actividades ambientales y el uso racional de los recursos naturales, La Ley 81(Ley de Medio Ambiente), aprobada por la Asamblea Nacional del Poder Popular en julio de 1997 expresa en su articulado que la gestión ambiental es integral y transectorial y en ella participan de modo coordinado, los órganos y organismos estatales, otras entidades e instituciones, la sociedad࠹ los ciudadanos en general.[6]

El presente trabajo persigue analizar los basamentos teóricos conceptuales que conforman el Sistema de Gestión Ambiental, y la posición del ordenamiento ambiental cubano en cuanto a este tema.

Los métodos del nivel teórico empleados son el exegético-analítico, jurídico descriptivo, análisis y síntesis, histórico lógico, y del nivel empírico la consulta cualitativa a expertos

Se estudió y analizó la doctrina de referencia al tema de investigación y se llevó a cabo un detallado análisis y recopilación de los documentos y normativas legales internacionales y nacionales que regulan la Gestión Ambiental Empresarial y su incidencia en la protección del medio ambiente.

DESARROLLO:

Definición de Gestión Ambiental

La gestión ambiental nace en los años 70 del siglo XX, en sentido estricto, como reorientación de parte del pensamiento ambiental (eco desarrollo y desarrollo sostenible) y como instrumento de diagnóstico y planificación (planes, programas y proyectos) para la resolución de los problemas ambientales, cada vez más agudos en los países industrializados.

Por gestión entendemos, primero, un proceso que comprende determinadas funciones y actividades organizativas que los gestores deben llevar a cabo con el fin de lograr los objetivos y metas deseadas. El proceso de gestión se considera integrado, por regla general, por las funciones de planificar, ejecutar y controlar. La planificación determina qué resultados ha de lograr la organización (pública, privada o cívica). La función de planificar representa el núcleo de la gestión. Planificar implica realizar actividades a lo largo del tiempo cuyo resultado es la fijación de objetivos, planes, programas y proyectos que se requieren para el logro de los objetivos. La función de ejecución, como su nombre indica, es realizar lo planificado según cronograma de programas y proyectos y flujograma de inversiones en el tiempo. La función de control comprueba sí se han logrado o no los resultados previstos.[7]

La integración del medio ambiente a las estrategias empresariales puede realizarse de forma reactiva siguiendo las exigencias marcadas por la legislación vigente o de forma proactiva, adoptando voluntariamente medidas que contribuyan a reducir el impacto sobre el entorno natural.[8]

Las acciones propuestas para iniciar, ejecutar y terminar el proceso de Gestión Ambiental, comprenden etapas o fases estrechamente ligadas entre sí, las cuales deben adaptarse a las particularidades de cada escenario. Dichas fases, son:

  • Preparación, sensibilización y planificación.

  • Ejecución: realización de los programas y proyectos definidos en los planes.

  • Seguimiento, control y evaluación.

  • Regulación y retroalimentación.

Emilio Latorre escribe que "La Gestión Ambiental puede considerarse como una tarea que comprende la evaluación, planificación, puesta en marcha, ejecución y evaluación del conjunto de acciones físicas, financieras, reglamentarias, institucionales, de participación, concertación, investigación y educación, con el fin de mejorar la calidad ambiental objeto de acción (entorno territorial de la empresa, proyecto de infraestructura, territorio de su jurisdicción)". Y a partir de esta definición, señala el papel del gestor ambiental, así: "Él… gestor ambiental se ocupa no sólo de los recursos naturales (agua, aire, suelos), residuos (sólidos o líquidos), erosión, sino que se ocupa de la calidad ambiental del territorio en su conjunto y de la gestión ambiental que se hace por parte de los distintos actores para mejorar o disminuir esa calidad ambiental. [9]

Otra forma de concebir la gestión es a partir del impacto ambiental que genera un programa o proyecto de infraestructura, productivo o social. El impacto ambiental, es en este caso, el aspecto fundamental y sobre el cual se centra la atención de la gestión. "La identificación, evaluación, prevención, mitigación o compensación, constituye el objeto de la gestión ambiental"

Se define además el sistema de gestión ambiental: Aquella parte del sistema de gestión global que incluye la estructura organizativa, las actividades de planificación, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos, los procesos y los recursos para desarrollar, implementar, realizar, revisar y mantener la política ambiental.[10]

Las presiones son derivadas de la interacción sociedad-naturaleza, las cuales pueden ser naturales o socioculturales. Estas últimas pueden ser, a su vez, directas (cuando se producen como consecuencia de las actividades productivas, ocasionando una presión sobre los recursos naturales y el ambiente) o indirectas (como consecuencia de las políticas que guían el comportamiento general de la sociedad, como la política demográfica, las políticas sectoriales, los cambios tecnológicos y la política económica).

El estado en que se encuentran los recursos y el ambiente, es el segundo elemento a evaluar o diagnosticar. El "estado" se debe, fundamentalmente, a las presiones que los humanos y sus actividades antrópicas generan sobre el ambiente y la naturaleza. Las presiones llevan a un estado determinado del ambiente (social, físico-químico, biológico), así como a un estado de los ecosistemas.

La respuesta es el proceso de gestión propiamente dicho, que se gesta o promueve en aras de resolver los problemas ambientales creados o inducidos, esta se relaciona con las políticas, planes, programas y proyectos que la sociedad genera frente a las presiones sobre el ambiente, con el propósito de mejorar el estado del mismo. la respuesta o acciones son ejecutadas por medio de la gestión ambiental (pública, empresarial o ciudadana), en cualquier ámbito jurisdiccional (urbano, rural, regional, nacional e internacional). Los indicadores de respuesta describen los esfuerzos de gestión realizados por la sociedad o por las autoridades ambientales para eliminar, reducir, mitigar o controlar la presión sobre los recursos naturales y el ambiente. Esta es la forma según la que la OCDE viene impulsando la relación causa-efecto-solución (presión-estado respuesta) como modelo de ámbito mundial con relativo éxito gracias a su simpleza y facilidad de uso. Ahora, José Serrano nos dice que "Por Gestión Ambiental entenderemos… toda intervención que busque la adecuación en las relaciones entre sociedad y su entorno natural, con independencia de los programas concretos que utilice para ello y por lo tanto, con independencia de que los instrumentos gestores pertenezcan a la economía, a la política, a la ciencia, al derecho o a la administración ambiental"

En suma, gestión es sinónimo de intervención planificada
del Estado, los empresarios, la sociedad civil, los gestores o ambientalistas
y especialistas, en aras de la resolución de un conflicto ambiental generado
por el hombre y frente al cual se deben disponer una serie de actividades y
recursos (humanos, técnicos y financieros). Resolver el problema es,
bajo lo enunciado hasta acá, diagnosticarlo correctamente, conocer la
causa del mismo, sus efectos y posibles soluciones (técnicas y/o culturales).
Y dicha intervención debe resolver tres preguntas que configuran el proceso
de gestión que estamos tratando de definir.

  • ¿Qué y quién está afectando el ambiente?

  • ¿Cuál es el estado actual del ambiente y los recursos naturales, en relación con el pasado mediato o inmediato?

  • ¿Qué estamos haciendo y/o gestionando para mitigar o resolver los problemas ambientales generados por las actividades antrópicas?

  • ¿Cómo y cuándo resolver los problemas

De acuerdo con la práctica político-administrativa de las autoridades ambientales y de las entidades territoriales, se divide la Gestión Pública Ambiental en: Puramente Ambiental o de Repercusión Ambiental. "Si bien existe una gestión cuyo objeto es únicamente lo ambiental, el resto de la gestión del Estado puede tener, en ocasiones, repercusiones ambientales que tienden al logro del desarrollo sostenible, pero no por ello puede decirse que es ambiental o que es responsabilidad de las instituciones encargadas de llevar a cabo la gestión ambiental"

Esta clasificación es importante, en la medida en que dentro del Estado los distintos entes gubernamentales, territoriales o no, llevan a cabo acciones en pro del ambiente, así no sean los directamente responsables de la Gestión Ambiental, propiamente dicha.

A partir de esta subdivisión, que esclarece el papel de cada ente público, se pueden clasificar tres tipos de Gestión Ambiental, así:

  • 1. Gestión Ambiental Casual. Integrada por todas aquellas políticas, acciones y programas que no tienen un objetivo ambiental, pero que ejercen una incidencia en la protección del medio ambiente y los recursos naturales (aire, agua, suelo, flora y fauna)

  • 2. Gestión Ambiental Sectorial. Conformada por todas las políticas, planes, programas y acciones tendientes a la protección de algunos elementos ambientales o recursos naturales renovables.

  • 3. Gestión Ambiental Propiamente Dicha. Integrada por todas las políticas, acciones, planes y programas que conciben el medio ambiente como un todo, organizado a la manera de un sistema (enfoque sistémico).

Adicionalmente Leonel Vega contribuye a la clasificación, ya no sólo de la Gestión Pública, sino también de la Gestión Empresarial, a partir de un enfoque administrativo. Existen tres tipos de Gestión Ambiental, que son:

  • 1. Gestión Ambiental Incidental. Se ejecutan acciones aisladas, pero la mayoría de las veces obedecen a solucionar problemas particulares y fuera de todo contexto estratégico. Se ejecutan programas y proyectos, pero no se planifica, ni se controlan las ejecuciones. La gestión incidental interpreta el deterioro ambiental como un fenómeno aislado, fortuito e inevitable, causado por un comportamiento dañino en el curso normal de las actividades humanas. Este tipo de Gestión Ambiental predominó hasta mediados del siglo XX.

2- Gestión Ambiental Operacional. Se planifica y se ejecutan programas y proyectos ambientales, pero no existe control. No se da el monitoreo, seguimiento y evaluación de lo planificado y ejecutado. "Las funciones de planificación y ejecución presentan una marcada incoherencia y desarticulación mutua, ya que la planificación se realiza únicamente para cumplir con la reglamentación (normativa) vigente y los planes se constituyen en libros-documentos⠳in ninguna ingerencia sobre la ejecución y ésta, se realiza la mayoría de las veces de manera incidental (aislada), sin tener en cuenta los planes". Este tipo de gestión es la imperante en la actualidad, caracterizada por instrumentos de comando-control (leyes, regulaciones, licencias ambientales, declaraciones de impacto, impuestos), donde el objetivo de la política ambiental es rectificar el comportamiento sin alterar los acuerdos económicos, culturales o institucionales actuales. Se privilegian los efectos, más no las causas. Se gestiona para minimizar el efecto.

3- Gestión Ambiental Sistémica. Coexisten simultáneamente la planificación, la ejecución y el control. Se caracteriza por ser previsiva en la planificación; eficiente en la ejecución, eficaz en el control. "Lo que resuelve los problemas (ambientales) es el proceso continuo de diseñar, ejecutar, evaluar, corregir y volver a diseñar y a ejecutar.[11]

Marco legal de la gestión ambiental

La gestión ambiental surge en un proceso evolutivo, que deriva de la creciente toma de conciencia en torno a la problemática ambiental a nivel global y de los países. Como en otros temas de las agendas ambientales, su origen se ubica en torno a la Conferencia de Estocolmo sobre el Medio Humano (1972), a partir de la cual tiene lugar "…un proceso de institucionalización de la gestión ambiental, o de cambios donde existía este tipo de gestión, que trajo consigo importantes modificaciones en las políticas públicas y en los propios sistemas jurídicos.[12]

Las modificaciones en los sistemas jurídicos consistieron en la creación de normas que tenían claramente el propósito de proteger el medio ambiente y promover el desarrollo sostenible. Este tipo de normas es lo que comúnmente se conoce como "derecho ambiental".

La Ley del Medio Ambiente se refiere a la gestión ambiental en su Artículo 8, como el "conjunto de actividades, mecanismos, acciones e instrumentos, dirigidos a garantizar la administración y uso racional de los recursos naturales mediante la conservación, mejoramiento, rehabilitación y monitoreo del medio ambiente, y el control de la actividad del hombre en esta esfera" y agrega que "La gestión ambiental aplica la política ambiental establecida mediante un enfoque multidisciplinario, teniendo en cuenta el acervo cultural, la experiencia nacional acumulada y la participación ciudadana" [13]

Esta definición abarca todos los esfuerzos y acciones que dentro de una organización deben realizarse en cada uno de sus procesos, para materializar la política ambiental, en el marco de la planificación, la implementación y el control ambiental. Las actividades dentro del ámbito en cuestión deben planificarse desde un punto de vista estratégico, con un plan de seguimiento y evaluación, encaminado a mantener la mejora continua del medioambiente.

En el caso cubano se destacan los resultados alcanzados en la temática ambiental, evidentes desde 1959, fundamentalmente en las esferas de la salud, educación y deportes, que elevaron las condiciones ambientales y la calidad de vida de la población. También se pueden señalar como resultados positivos: el incremento de las áreas boscosas nacionales, la implementación del sistema nacional de áreas protegidas, el trabajo de ordenamiento territorial y evaluación ambiental de las inversiones más importantes, la introducción de resultados científicos para la solución de muchos problemas del medio ambiente; el proceso de educación ambiental en todas las vías posibles y el fortalecimiento de la gestión ambiental. Todos estos logros se sustentan en una legislación ambiental amplia y abarcadora de todos los aspectos ambientales más importantes.

No obstante, es criterio de este autor que aun con los logros obtenidos, subsisten dificultades dadas fundamentalmente por: el insuficiente compromiso y educación ambiental en los distintos niveles organizacionales, que redunda en una endeble gestión ambiental institucional; la limitada aplicación de la legislación vigente en el campo de las contravenciones; insuficiente introducción de la dimensión ambiental en las estrategias empresariales y el limitado acompañamiento de la ciencia y tecnología en la solución de los problemas ambientales.

Es preciso reconocer que sobre algunas de estas insatisfacciones gravita la escasez de recursos materiales y financieros, influenciados por el bloqueo económico en que se encuentra el país por parte de Estados Unidos de América.

La gestión ambiental dentro de las organizaciones ha sido un lento aprender- haciendo, que adquirió una dinámica distinta a partir de la Cumbre de la Tierra, con un punto significativo con la promulgación de la Ley 81 Del Medio Ambiente (Asamblea Nacional del Poder Popular, 1997) donde se define esta y se establecen los instrumentos que permiten llevarla a vías de hecho.[14]

En el Decreto Ley No 252 de fecha 7 de agosto de 2007.sobre la Continuidad y el fortalecimiento del Sistema de Dirección y Gestión Empresarial Cubano en el Artículo 3 Incisos: e), y) incluye entre los principios del Perfeccionamiento Empresarial los siguientes:

e) las entidades que aplican el sistema responden a los intereses de la sociedad, generando productos y servicios en función de sus necesidades en cantidad y calidad, financian sus gastos con sus ingresos de forma eficiente, creando un excedente que aportan a la sociedad. El ahorro generado en la gestión de la empresa debe ser aportado prioritariamente al Estado; y) las entidades deben ser ejemplo del cumplimiento y conocimiento de la legalidad socialista y trabajarán permanentemente por enfrentar las ilegalidades y manifestaciones de corrupción, así como con las causas y condiciones que la provocan. [15]

La implementación y consolidación de este Decreto Ley 252 fue reglamentada por el Decreto 281 de fecha 16 de Agosto de 2007, el cual en su Capítulo VII del Sistema De Gestión Ambiental en los artículos 466 y 484 respectivamente regula:

La incorporación de la gestión ambiental en los procesos productivos y de servicios, de las empresas que aplican el Sistema de Dirección y Gestión, tiene el propósito de prevenir, reducir y finalmente eliminar los impactos negativos que estos procesos causan al medio ambiente, asegurando la protección y preservación de los recursos naturales sobre los cuales se sustenta la producción de bienes y servicios. Es una necesidad social insoslayable de las empresas proteger el ambiente.

Artículo 466: Una gestión ambiental planificada y correctamente organizada contribuye a lograr avances importantes en la conservación del medio ambiente. El cumplimiento de la legislación ambiental vigente, la introducción de la educación ambiental, así como el enfoque de una producción más limpia que garantice la aplicación continua de una estrategia preventiva, integrada a los procesos, producciones y servicios, con vistas a incrementar la eficiencia y reducir los riesgos para los seres humanos y el ambiente son aspectos estos en los que debe sustentarse la actividad de la empresa, siendo consecuente con la estrategia ambiental nacional y los principios del desarrollo sostenible. Artículo 484: La empresa que aplica el Sistema de Dirección y Gestión para considerar adecuada su gestión ambiental debe cumplir con los siguientes requisitos:

  • Elaborar la Política Ambiental de la empresa.

  • Elaborar el diagnóstico ambiental de la empresa.

  • Elaborar objetivos estratégicos ambientales y metas a cumplir para su correcto cumplimiento, derivado del cumplimiento de las acciones preventivas o correctivas, así como de las modificaciones al sistema si se requiere, con vista a la mejora continua.

  • Elaborar el programa de gestión ambiental. Evaluación de su cumplimiento. Medidas preventivas y correctivas a aplicar.

  • Capacitar al menos una vez al año a sus directivos y trabajadores en la legislación ambiental vigente (incluyendo las normas) asociada a su actividad, producción o servicio.

  • Identificar la legislación ambiental vigente para su actividad.

  • Cumplir la legislación vigente, demostrado por los resultados alcanzados en las inspecciones ambientales recibidas y la no comisión de contravenciones ambientales, así como, las auditorias internas al sistema y revisiones realizadas por la dirección de la empresa.

  • Cumplir con las normativas cubanas obligatorias en materia medio ambiental, dándole seguimiento a partir de un sistema de monitoreo que la empresa establecerá de acuerdo a las características de su actividad.

  • Aplicar los principios de "producción más limpia y consumo sustentable".

  • Cumplir o reducir los gastos planificados para el desarrollo ambiental (inversión, mantenimiento, rehabilitación).

  • Reducir los gastos e incrementar los ingresos obtenidos por la efectividad de las medidas aplicadas.

  • Certificar el cumplimiento de las normas medio ambientales a través de las NC ISO 14001: 2004.[16]

En el ordenamiento jurídico cubano, las disposiciones normativas que regulan la conservación, la protección, el mejoramiento y la transformación del medio ambiente, se caracterizan por tener diferentes rangos, los cuales abarcan desde leyes, hasta normas técnicas y por poseer una dispersión originada en la facultad legislativa que le está otorgada a cada uno de los organismos de la Administración Central del Estado, que son a su vez rectores de recursos naturales específicos.

La resolución 135 del año 2004 Sobre el Sistema Nacional de Reconocimiento Ambiental el cual constituye un instrumento de la gestión ambiental establecido por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente con la finalidad de estimular y reconocer el trabajo de aquellas organizaciones y entidades de producción, servicios, educación y de ciencia y técnica, que se han esforzado por mejorar su desempeño ambiental y han asumido compromisos y prácticas amigables con el medio ambiente y el cual tiene como objetivos:[17]

  • 1. Incentivar la mejora continua del desempeño productivo y ambiental de las entidades involucradas y de esta manera contribuir a la solución de los principales problemas ambientales del país.

  • 2. Favorecer el cumplimiento de los objetivos económico-sociales de las entidades involucradas sobre bases sustentables.

  • 3. Contribuir a mejorar la imagen de las empresas cubanas y de los productos o servicios que comercializan.

  • 4. Promover el cumplimiento de la legislación ambiental y las normas técnicas vigentes como requisito básico para alcanzar metas superiores.

  • 5. Facilitar la participación de todas aquellas organizaciones que deseen contribuir al logro de mejoras sustanciales en la conservación del medio ambiente.[18]

La Resolución No. 136 /2009 del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente. REGLAMENTO PARA EL MANEJO INTEGRAL DE DESECHOS PELIGROSOS la cual tiene como objetivo, establecer las disposiciones que contribuyen a asegurar el manejo integral de los desechos peligrosos en el país, mediante la prevención de su generación en las fuentes de origen y el manejo seguro de los mismos a lo largo de su ciclo de vida, con el fin de minimizar los riesgos a la salud humana y al medio ambiente en el proceso productivo, sus flujos de materiales e identificación de los puntos en que se generan desechos peligrosos.[19]

Los Instrumentos de la gestión ambiental, están relacionados en la Ley 81 de Medio ambiente de 1997, así establece en el Artículo 18 que "La política ambiental cubana se ejecuta mediante una adecuada gestión que utiliza los instrumentos siguientes:

a) La Estrategia Ambiental Nacional, el Programa Nacional de Medio Ambiente y Desarrollo y los demás programas, planes y proyectos de desarrollo económico y social.

b) La presente Ley, su legislación complementaria y demás regulaciones legales destinadas a proteger el medio ambiente., señalando que cada instrumento tiene su definición y un amplio tratamiento regulatorio en disposiciones especiales.[20]

Definición y caracterización de la Gestión Ambiental Empresarial

Leonel Vega define Gestión Ambiental Empresarial como aquella parte de la gestión empresarial que se ocupa de los temas relacionados con el ambiente, contribuyendo a su conservación y comprende las responsabilidades, las funciones (planificación, ejecución y control), la estructura organizativa, los procesos, los procedimientos, las prácticas y los recursos para determinar y llevar a cabo la política ambiental que cualquier empresa agrícola, minera, industrial o comercial requiere.[21]

Emilio Latorre escribe que "La Gestión Ambiental puede considerarse como una tarea que comprende la evaluación, planificación, puesta en marcha, ejecución y evaluación del conjunto de acciones físicas, financieras, reglamentarias, institucionales, de participación, concertación, investigación y educación, con el fin de mejorar la calidad ambiental objeto de acción (entorno territorial de la empresa, proyecto de infraestructura, territorio de su jurisdicción).[22]

Las políticas empresariales, las cuales Conesa (1997) las define como "aquellas que se refieren a la declaración de objetivos y principios hecha por la empresa, que expone el compromiso adoptado para mejorar su actuación con respecto al medio ambiente".

La política empresarial es propia de cada empresa, atiende a su naturaleza, al tipo de actividad que desarrolla, a sus procesos productivos y al entorno medioambiental, pero todo ello dentro de la política ambiental del estado y la sociedad en general. La política medioambiental de la empresa debe ser detallada, estableciendo acciones para el futuro y conteniendo la información necesaria para que la dirección y los trabajadores puedan determinar con claridad sus áreas de autoridad y responsabilidad.[23]

Desde una óptica empresarial, la normatividad de estandarización universal ISO, puesta en marcha en 1996 con el nombre de "Norma ISO 14001", define Gestión Ambiental de una organización (SGMA, según siglas utilizadas en español) como "la parte del sistema general de gestión que incluye la estructura organizativa, la planificación de las actividades, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos, los procesos y los recursos para desarrollar, implantar, llevar a efecto, revisar y mantener al día la política ambiental".

La ISO 14000 (Gestión de la calidad ambiental) aplica, como también lo hace la Norma ISO 9000 (Política de la Calidad), la filosofía del método DEMING: Planificar-Realizar-Controlar- Revisar, como herramienta de mejora continua. La planificación se hace cargo de la identificación de los aspectos ambientales e impactos asociados, del establecimiento de la política ambiental de la organización, de establecer los objetivos y metas y de elaborar el programa de gestión ambiental. La ejecución del Plan (realizar) requiere la elaboración del manual de gestión y de emprender los proyectos formulados en la política, en el plan ambiental y en el programa de gestión ambiental. El control o comprobación se realiza a partir de auditorias ambientales (se detectan las deficiencias de la política y del programa ambiental implementado y se hacen las recomendaciones y correcciones necesarias) y por último, la revisión incluye el examen del Sistema de Gestión Medio ambiental, SGMA, en su conjunto y la elaboración de los informes de Gestión.[24]

Por ello la ISO 14001 de 1996 "[25]especifica requisitos para certificación y autoevaluación de un SGMA de una organización, siendo su objetivo final apoyar la protección ambiental y la prevención de la contaminación, en equilibrio con las necesidades socioeconómicas". Debemos anotar que un SGMA, de acuerdo con la filosofía de las normas ISO, debe estar preparado para prevenir impactos ambientales negativos más que detectar y reparar los efectos causados sobre el ambiente. Se deben atacar las causas, no los efectos. Las soluciones son de comienzo y no de fin de tubo.[26]

A mediados de los años 90, como consecuencia de los beneficios de la aplicación del enfoque sistémico en la gestión empresarial moderna, se afianza entre la comunidad internacional el reconocimiento al paralelismo y analogía existente entre la gestión de la calidad (Normas ISO 9000) y la gestión ambiental (ISO 14000.[27]

Conesa (1997) expone que a pesar de que cada sistema de gestión ambiental es diferente según la estructura y entidad de la actividad en cuestión y del centro de producción, existen tres características fundamentales de estos:

1) Completo: debe cubrir las actividades que se realizan en la empresa. Deben evitarse lagunas.

2) Comprensivo: todos los implicados deben conocer y comprender claramente su papel, sus responsabilidades.

3) Abierto: el proceso de mejora es continuo, con lo que el sistema debe permitir cambios sobre la marcha siempre que se detecten irregularidades, lagunas o disfunciones.[28]

Respecto a la Gestión ambiental empresarial existe la definición de empresa y medio ambiente, la cual refiere a que el progresivo crecimiento de las ciudades, el desarrollo de la industrialización, y en definitiva la civilización actual, provocan sobre el entorno natural una serie de procesos negativos encaminados hacia un deterioro y desequilibrio ecológico que, de no tomar las debidas medidas a tiempo puede resultar irreversible. La industrialización es un factor decisivo que actúa sobre el medio físico: las emisiones contaminantes a la atmósfera, los vertidos a ríos y mares, la producción de residuos, etc., conllevan unas consecuencias sobre el medio ambiente que deben contemplarse para minimizar su efecto negativo sobre el mismo.

La identificación de los aspectos medioambientales y la evaluación de los efectos asociados a una actividad empresarial o industrial, es fundamental para conocer el impacto medioambiental que generan las actividades, productos o servicios, y poder establecer unos objetivos y metas medioambientales.

Los Aspectos Medioambientales son los elementos o características de una actividad, producto o servicio susceptibles de interactuar con el medio ambiente. Por otra parte, el Impacto Medioambiental es la transformación o cambio que se produce en el medio a causa de un aspecto medioambiental. [29]

Tratamiento Jurídico del Sistema de Gestión Ambiental Empresarial

ISO 14000 es el nombre genérico del conjunto de normas ambientales creadas por la TC 207 de la ISO (Intenational Organization for Standarization).

ISO 14000 es una serie de estándares internacionales, que especifica los requerimientos para preparar y valorar un sistema de gestión que asegure que su empresa mantiene la protección ambiental y la prevención de la contaminación en equilibrio con las necesidades socio-económicas. Dentro de las diversas normas publicadas, la ISO 14000, norma de Sistemas de Gestión Ambiental, es la más conocida y la única que se puede certificar. De esta forma, la certificación del suplemento 14001 es la evidencia que las Empresas poseen un Sistema de Gestión Ambiental (SGA) implementado, pudiendo mostrar a través de ella su compromiso con el medio ambiente.

Las normas de la serie ISO 14000 permiten que cualquier organización industrial o de servicios, de cualquier sector, pueda tener control sobre el impacto de sus actividades en el ambiente. El enfoque genérico de sistemas – exitosamente iniciado por las ISO 9000 de Gestión de la Calidad – permite una evaluación precisa y una comparación de las medidas tomadas por las organizaciones para encarar su responsabilidad con relación al ambiente. Como el criterio para la elaboración de normas internacionales está basado en el consenso internacional de los distintos interesados – la industria, el gobierno y los especialistas ambientales – las normas ayudarán a prevenir, que requerimientos nacionales divergentes se conviertan en barreras técnicas al comercio, mientras que permitirá a quiénes las pongan en práctica demostrar el cumplimiento de las metas ambientales. Las normas ISO 1400 son normas de carácter voluntario pues su implementación no es obligatoria para ninguna organización, a menos que por intereses del Estado y de las máximas autoridades ambientales del país, sea conveniente llevar a cabo este proceso en una organización específica, según lo establecido en el Decreto-Ley No. 182 de Normalización y Calidad y sus disposiciones complementarias.[30] Estas no tienen obligación legal, no establecen metas cuantitativas en cuanto a niveles de emisiones o métodos específicos que midan dichos niveles y basados en la auditoria de los sistemas de gestión medioambiental; las normas se centran en la organización y proveen los procedimientos, requisitos y pautas para que la organización pueda implantar y mantener un sistema de gestión ambiental

La norma ISO 14001; proporciona las especificaciones y los requerimientos que permiten a la organización desarrollar e implementar la política y objetivos sobre los aspectos ambientales significativos; contiene los elementos que deben ser llevados a cabo para que la organización pueda certificar su sistema de gestión ambiental.

Es importante señalar que la última versión de esta norma es la ISO 14001:2004, la cual remplazó a la versión anterior ISO 14001:1996, además esta norma es compatible con la norma ISO 9001 sistemas de gestión de calidad.

En cuanto al contenido de la norma ISO 14001 contempla los requisitos del sistema de gestión ambiental y en su estructura menciona en primer lugar los requisitos generales; después la política ambiental; planificación; implementación y operación; verificación y revisión por la dirección; finalmente en los anexos contiene la orientación del uso de dicha norma, así como la correspondencia entre las normas ISO 14001 e ISO 9001.

La NC-ISO 14001, Sistemas de Gestión Ambiental. Especificación y directrices para su uso, fue una de las primeras normas de la serie NC-ISO 14000 en ser concluida. Proporciona una estructura total para la gestión ambiental en cualquier organización y la integra a su sistema de gestión global.

La NC-ISO 14001 es una norma de requisitos. Contiene un conjunto de requerimientos para definir la operación de los SGA. Puesto que dichos requisitos son flexibles y expresados de forma general para que puedan ser aplicados a cualquier tipo y tamaño de organización, la NC-ISO 14001 no puede proporcionar una guía específica para un sector dado. Por esta norma se certifican los SGA.[31]

Esta Norma Internacional especifica los requisitos para un sistema de gestión ambiental que le permita a una organización desarrollar e implementar una política y unos objetivos que tengan en cuenta los requisitos legales para que sea aplicable a todos los tipos y tamaños de organizaciones y para ajustarse a diversas condiciones geográficas, culturales y sociales.[32]

Aplicación de la gestión medioambiental

Esta Norma Internacional requiere que la organización:[33]

a) establezca una política ambiental apropiada;

b) identifique los aspectos ambientales que surjan de las actividades, productos y servicios, pasados, existentes

o planificados de la organización, y determine los impactos ambientales significativos;

c) identifique los requisitos legales aplicables y otros requisitos que la organización suscriba;

d) identifique las prioridades y establezca los objetivos y metas ambientales apropiados;

e) establezca una estructura y uno o varios programas para implementar la política y alcanzar los objetivos y metas;

f) facilite la planificación, el control, el seguimiento, las acciones correctivas y preventivas, las actividades de auditoría y revisión, para asegurarse de que la política se cumple y que el sistema de gestión ambiental sigue siendo apropiado; y

g) tenga capacidad de adaptación a circunstancias cambiantes.

Una organización sin un sistema de gestión ambiental debería inicialmente establecer su posición actual con relación al medio ambiente, por medio de una evaluación. El propósito de esta evaluación debería ser considerar todos los aspectos ambientales de la organización como base para establecer el sistema de gestión ambiental.

La evaluación debería cubrir cuatro áreas clave:

? la identificación de los aspectos ambientales, incluidos aquellos asociados con la operación en condiciones normales, condiciones anormales incluyendo arranque y parada, y situaciones de emergencia y accidentes;

? la identificación de requisitos legales aplicables y otros requisitos que la organización suscriba;

? un examen de todas las prácticas y procedimientos de gestión ambiental existentes, incluidos los asociados con las actividades de compras y contratación; y ? una evaluación de las situaciones previas de emergencia y accidentes previos.

El proceso de diseño e implantación de un sistema de gestión ambiental según la norma ISO14001, se puede estructurar en las siguientes cuatro fases (Granero, 2007):[34]

Fase 1, compromiso ambiental y planificación del proceso: habrá que determinar las funciones de las personas que estarán involucradas en la implantación del sistema de gestión ambiental, ya que este es un punto clave para el éxito del proceso. Es recomendable formar un equipo de trabajo integrado por personal de distintas áreas de la empresa, que junto con la asesoría externa de una empresa especializada, de ser necesario, dirija la implantación del sistema.

Partes: 1, 2

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