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Depresión y suicidio



Partes: 1, 2

  1. Depresión
  2. De
    príncipe a mendigo
  3. Sintomatología de la
    depresión
  4. Terapéutica
    conductual
  5. Pérdida de control
  6. Distorsiones cognitivas
  7. Distimia
  8. Suicido
  9. Síntomas
  10. Qué hemos de hacer
  11. Los
    mitos
  12. Atención
    básica
  13. Pérdida por suicidio
  14. Qué hace a las personas propensas al
    suicidio depresivo
  15. Consecuencias
  16. Bibliografía

Sed como una lámpara para vosotros
mismos. Sed vuestro propio sostén. Asíos a la
verdad que existe en vosotros como si fuera la única
lámpara. (Buda)

El primer elemento que diferencia a la existencia humana
de la animal es de carácter negativo; y es la ausencia
relativa de una regulación en el proceso de
adaptación al mundo exterior.

El hombre es el único animal para quien su propia
existencia constituye un problema que debe resolver y del cual no
puede evadirse.

Si la vida del hombre la determina la razón; como
consecuencia lógica ha de enfrentar las sobre exigencias
de orden adaptativo desde la misma; y ha de saber además
que estas exigencias las mas de las veces son consecuencia de sus
propias decisiones y del impacto que desea causar. El hombre ha
de tener en cuenta lo que hace y decide; no hay forma de que este
organismo descanse en naturaleza es imposible; lo que si es
posible es saber que el orgullo y la vanidad siempre salen mas
caros que el hambre y la sed.

El estar vivo es un concepto dinámico no
estático.

Depresión

Enfermedad mental cuyas características son: una
modificación profunda del estado timico (del animo), un
cambio de humor en el sentido de la tristeza, el sufrimiento
moral y la disminución de la actividad psico-motriz
(cansancio, perdida del apetito, insomnio, descenso del deseo
sexual) a si como una reducción de la actividad
social.

Depresión crónica o distimia
(perturbación de tipo depresivo): se caracteriza por tener
una duración de dos o más años, de comienzo
temprano, de escasa gravedad y de curso persistente o
intermitente. Las mujeres son dos o tres veces más
propensas a sufrirla.

Depresión mayor: depresión cuyos
síntomas predominantes son tristeza la mayor parte del
día, disminución acusada del interés o de la
capacidad para el placer en casi todas las actividades,
trastornos del sueño y del apatito, alteraciones
psicomotoras, perdida de energía, sentimientos de culpa,
falta de concentración y pensamientos de muerte y
suicidio. Estos síntomas llevan a un deterioro de las
áreas de actividad como la social, la laboral, etc. Cuando
alterna con algún episodio maniaco se incluye en el
trastorno bipolar; el cual es el trastorno más doloroso de
todos.

De
príncipe a mendigo

La mayoría de las personas hemos sufrimos de
tristeza y otros han sufrido de depresiones en algún
momento; podemos sufrir episodios de sobre exigencias emocionales
adaptativos sin que esto signifique episodios
catastróficos que nos obliguen en un momento dado a tomar
decisiones drásticas, o lo que es peor, atentar contra lo
único y verdaderamente valioso la vida misma, las
depresiones son sobre exigencias muy fuertes, debemos tomarlas en
serio; hay que pedir ayuda o asesoría de personas
entrenada para tal fin.

Las depresiones en muchos casos son estados emocionales
alterados y catastróficos.

Hay varios grados de depresión: pueden ser desde
un problema leve, una noticia, un cambio en los hábitos de
vida, una quiebre financiera, un hecho catastrófico
(secuestro, violación, casos de guerra, desplazamiento
forzoso, etc.), una enfermedad o un diagnostico que pueda
amenazar la vida propia o de seres queridos, en fin…

Los detonantes pueden ser variados; sin embargo los
problemas económicos figuran entre los detonantes
más comunes debido en parte a que en la sociedad actual el
éxito personal se convirtió en un imperativo moral,
hoy día parece ser que es más importante el tener
que el ser, nos olvidamos de vivir con decoro y esto es en paz
interior; que es aquella parte de nosotros que nos hace
saludables equilibrados esto no quiere decir que no tengamos
exigencias claro que las tenemos pero les debemos dar solo la
importancia que merecen; nunca debemos olvidar que a nadie
entierran con dinero, con muebles ni carros y muchas veces nos
vamos desnuditos esa es la realidad; nos pasamos la vida
acumulando cosas para dejar las cuales muchas veces terminan en
el bote de la basura.

La depresión es curable existe tratamiento y la
mayoría de las veces el tratamiento puede ser la
diferencia entre la vida y la muerte; les puedo asegurar que el
tratamiento, cambia la vida por completo, a veces, es pura
cuestión de definir cosas, Ej., definir prioridades, un
proyecto de vida realizable objetivo no mágico y lo
más importante es saber si contamos con los elementos para
acceder a la vida que queremos, debemos modificar conductas y
también a veces solo se necesita cambiar de escenarios,
cambiar el modus vivendi, en fin…, eso lo descubres con tu
terapeuta; solo recuerda, antes de tomar decisiones
drástica pide ayuda y si la palabra ayuda te parece
odiosa; entonces pide asesoría profesional
terapéutica.

Desde la terapéutica se está entendiendo
mejor la depresión; la mayoría de los casos serios
de depresión se deben a un desequilibrio en las sustancias
químicas o un desbalance químico en el
cerebro.

Hay variadas causa de desequilibrio o detonantes a
saber: solo citare algunas, reconozco que las diferentes formas
de entender al ser humano da como es apenas lógico; otras
variables muy respetables a tener en cuenta.

(1) Perdida de un ser querido o de algo que se estime
mucho, en este punto entran los duelos y las pérdidas no
solo de personas u objetos valiosos, recuerde lo que para usted
es basura para otro puede ser un tesoro, en estos casos no
podemos hacer señalamientos de ningún orden; la
virtualidad también supone una sobre exigencia esto puede
aumentar el malestar emocional de la persona con depresión
sobretodo en las perdidas o en los duelos.

(2) Tensión crónica o un evento que cause
mucha tensión y que exija una acomodación
permanente.

(3) Enfermedad grave o diagnostico que comprometa la
salud de por vida, es decir, tratamiento permanente que
necesariamente no corresponde con un diagnostico
terminal.

(4) Reacción a mededicamentos que pueden suponer
sobre exigencias emocionales adaptativas (euforia, disforia) las
cuales acusan o suponen una descompensación
cerebral.

(5) Alcoholismo o abuso de otras sustancias
psicoactivas, demencia u otros problemas de la salud
mental.

(6) La falta de luz solar puede causarles a algunas
personas depresión, los rayos del sol nos atraviesan de
lado a lado; facilitan todos los procesos del organismo y el
equilibrio químico del cerebro.

(7) También hay un componente hereditario, se
corre un mayor riesgo de padecer de desequilibrios
químicos en el cerebro por predisposición
genética; por fortuna, hay tratamientos y medicamentos
efectivos al alcance de todos, recuerde no tome riesgos, tome
medicamentos recetados es decir con formula medica.

(8) Factores económicos, en este punto citare una
afirmación que puede reñir con algunos colegas y es
la siguiente; al componente económico sé le da hoy
día una trascendencia sin igual y esto detona una gran
mayoría de neurosis; las personas se sienten muy exigidas
económicamente y esto en parte se debe a los compromisos
que adquieren y que les supone un gran estrés a la hora de
enfrentarlos; la solución a estos aspectos, esta en las
manos de las mismas personas; sin embargo la presión
social a la que se ven sometidos los extra limita y los obliga a
disparatar; como es el caso de la opulencia y la muy fea forma o
manía (ahí entran las manías) de aparentar
un bienestar económico que no se tiene o posee; solo por
el gusto de ser otra persona literalmente.

(9) Factores psicosociales, aceptación,
reconocimiento, auto estima, sentido de pertenencia,
minusvalía psicológica, conceptos de calidad de
vida, miedo al rechazo y muchos otros aspectos subjetivos
fáciles de desenmarañar.

(10) La alimentación, un desbalance en la
alimentación supone una descompensación
química del cerebro; esto lo hacen las personas con el fin
de alcanzar el ideal de belleza que la sociedad ha determinado y
claro que consiguen cuerpos magros a costa de una gran
inversión en salud física y mental. Esto ultimo se
me presta para un cuento trillado (alguien gasto toda su salud
consiguiendo dinero y luego; gasto todo su dinero consiguiendo
salud; y no lo logro, los efectos habían sido
desastrosos)

La sensación de sentirse triste, decaído
emocionalmente y perder el interés en las cosas que antes
disfrutaba es lo que se llama depresión; la
depresión es una enfermedad y no es solo una
sensación de tristeza o de desánimo, esta
enfermedad progresa cada día afectando los pensamientos,
los sentimientos, la salud física y la forma de
comportarse.

La depresión no es culpa de la persona que la
padece, (pero si es su responsabilidad enfrentarla)

Tampoco es una debilidad de la personalidad (ni es
gadejo; termino coloquial colombiano) es una enfermedad
médica que es muy frecuente y puede afectar a cualquier
persona en cualquier edad y latitud.

Todos hemos experimentado estados de ánimo que
implican tristeza o alegría en algún momento de
nuestras vidas. La tristeza recurrente la podemos llamar
depresión; la pérdida de un trabajo o la muerte de
un ser amado pueden dar como resultado una depresión sin
consecuencias severas; pero en otros casos si puede ser una
experiencia mucho muy exigente, esto es debido en parte a que
somos completamente diferentes; en consecuencia no podemos
minimizar los efectos que se dan en las distintas personas, no
podemos esperar los mismos resultados en todos.

La depresión es una de las condiciones
diagnosticas más comunes hoy día; sin que esto
represente males mayores por trastornos. La depresión no
tiene nada que ver con posición socio-económica,
con logros educativos o cualidades personales; puede afligir a
ricos y pobres por igual, a personas exitosas o personas
fracasadas, a los muy educados o a los analfabetos; todos podemos
padecer depresión basta para eso una descomposición
cerebral que comprometa nuestra solvencia emocional.

Sin importar la región del mundo, la raza, la
etnicidad y clase social; las mujeres tienen casi el doble de
probabilidad de sufrir depresión y tienden a aumentar sus
estados de ánimo depresivos; en cambio los hombres
encuentran el medio de reducir los efectos nocivos.

El problema central de la depresión en el mundo
contemporáneo se fundamenta en la extensión
creciente del fenómeno; principalmente en las ultimas
décadas donde hemos reconocido que la depresión es
el síntoma universal de la psicopatología y la
clínica psiquiátrica; sin embargo, no podemos
llamar a esta era la era de la depresión porque
también tendríamos que incluir (el estrés y
la ansiedad) la era actual es la era denominada; la era del
desequilibrio (psico-social)

La depresión es un síntoma muy frecuente
relacionado con la forma de vida que llevamos e incluye, nuestras
relaciones familiares (problemas con la pareja o los hijos),
también la (soledad) siendo esta un factor fundamental en
los desequilibrios emocionales; empobreciendo el poder de
respuesta cognitiva-emocional, igualmente en el ámbito
académico (problemas en la escuela o universidad),
además del laboral (la falta de empleo, la
remuneración insuficiente, los problemas con el jefe, los
problemas de fe, el facilismo, etc.,) y todos los procesos que
nos mantienen en constante adaptación.

Hoy no podemos presumir de ser inteligentes, ser lo
verdaderamente es el reto; la acomodación permanente a el
medio supone unas destrezas y habilidades extraordinarias que
solo el ser humano actual puede superar, de ahí se derivan
todas las exigencias que enfrentamos emocionalmente, si no nos
enfrentamos adecuadamente a las sobre exigencias pueden estas
llegar incluso a convertirse en un trastorno psicótico
donde el individuo se queda completamente incapacitado para
actuar en forma normal en su vida de relación
psico-afectiva y psico social.

Las personas deprimidas se consideran desgraciadas,
frustradas, humilladas, rechazadas o castigadas, miran el futuro
sin esperanza, sin fe ni alegría, la depresión es
un estado catastrófico, ruinoso, humillante, desafortunado
e indeseable que debe ser visto con respeto, con reconocimiento y
prudencia; la depresión es volver a la nada, la mejor
analogía que se me puede ocurrir es que; la
depresión es pasar de príncipe a mendigo en un
corto tiempo.

La persona deprimida tiene:

Una idea muy negativa de sí misma, tiene una
marcada tendencia a considerarse como deficiente, inadecuada e
inútil y atribuye sus experiencias desagradables a un
defecto físico, moral, mental, familiar, genético;
tiende a rechazarse a sí misma, se ve fea, mal
intencionada e incluso cruel, cree ciegamente que los
demás la rechazan en todo momento, es un
(psico-moustrito)

Tiene una perspectiva negativa del mundo, se siente
derrotada socialmente, considera que el mundo le hace enormes
exigencias y además le pone obstáculos que
interfieren con el logro de sus metas o ideales.

Tiene una idea negativa del mañana, el futuro es
amenazador y gira en torno de expectativas absolutamente
negativas. El deprimido presiente que sus problemas y
experiencias continuarán indefinidamente y que se le
amontonarán otros muchos problemas y no dispone de los
elementos para hacerles frente, tienden a exagerar sus
experiencias por mínimas que sean y las convierte en
episodios de catástrofe, malinterpreta acontecimientos sin
importancia y los toman como fracasos.

Exageran o generalizan excesivamente cualquier
situación por más sencilla que sea, predicen un
futuro amenazador, la visión que tienen de mañana
es absolutamente oscura no hoy posibilidad de un cambio
favorecedor, la persona deprimida, pierde el concepto de
esperanza y anula toda posibilidad de cambio favorable, el
deprimido esta mas en el lado oscuro de la mente que en el lado
luminoso, la depresión es un estado catastrófico,
pero por fortuna es un estado superable, la persona experimenta
el fondo del dolor; pero se fortalece cuando la supera; toda
depresión es susceptible de ser tratada y
superada.

La persona depresiva debe sumar recursos emocionales
para hacerle frente a la cotidianidad y mucho mas a los
problemas; no debe exagerarlos no debe permitir que se le
conviertan en psico-tóxicos; las exigencias son
importantes son necesarias además son
inevitables.

Sintomatología de la
depresión

(1) Perdida del interés en las cosas que antes
disfrutaba hacer o solía hacer.

(2) Tristeza, decaimiento emocional, decaimiento
psicosocial, es decir, sus relaciones se empobrecen a tal punto
que elimina por completo la posibilidad de disfrute y de
relacionarse.

(3) Se siente sin energía, cansada o al contrario
se siente inquieta y sin poder lograr un estado de tranquilidad;
también accede con facilidad, a estados de ansiedad
delirante.

(4) Siente que no vale nada, se siente culpable, se
siente amenazado.

(5) Siente que le aumenta o disminuye el apetito, esto
se convierte en obsesión terminando así siendo
extremadamente delgados u obesos. La preocupación por la
figura la utilizan como mecanismo evasor de la
realidad.

(6) Tienen ideas o pensamientos sobre la muerte o el
suicidio, contemplan la posibilidad de terminar con su
sufrimiento moral; algunas lo concretan.

(7) La persona deprimida no puede concentrarse, no puede
pensar, no puede recordar o no puede tomar decisiones apropiadas,
la depresión anula el poder de decisión y
compromete seriamente el poder de libre
elección.

(8) La persona deprimida, no puede dormir o duerme poco
o demasiado, la depresión altera de forma notable los
hábitos cotidianos.

Sintomatología no menos importantes:

(1) Dolores de cabeza, cefaleas, dolores nauseosos,
mitos, mareos, etc.

(2) Malestar general en todo el cuerpo, principalmente
dolores, pueden ser musculares, abdominales, de hueso, espalda,
hombros, rodilla, etc.

(3) Algunos problemas relacionados con la
digestión o problemas gástricos.

(4) Desinterés sexual o inapetencia, no hay
posibilidad de motivación.

(5) El pesimismo en una constante en la persona
deprimida.

(6) La persona deprimida se siente ansiosa o preocupada,
no hay posibilidad de paz interior la sobre exigencia emocional
negativa no lo permite.

Tengamos en cuente que el estrés de
mutación permanente al que nos vemos enfrentados hoy
día; también, ti ene una cuota bien importante en
las depresiones.

En la cultura occidental se tiene en cuenta el papel de
los eventos estresantes y los recursos de que disponen las
personas para hacer frente a las sobre exigencias afectivas,
psicosocial y emocionales.

El estrés en la psicoterapéutica y en la
depresión en particular; ha supuesto de manera
inconfundible que es uno de los factores más importantes a
considerar en las depresiones debido en parte a que el
estrés detona tres factores.

Los factores a considerar son: (1) diátesis (2)
estrés (3) recursos o apoyos sociales. Diátesis: se
refiere al hecho de que debido a condiciones genéticas o
constitucionales, ciertos individuos pueden tener una
predisposición o fragilidad para desarrollar la
depresión. Estrés: puede actuar como un
desencadenante para activar esta predisposición. Recursos:
cuando los individuos carecen de recursos para adaptarse a la
depresión no pueden transformar las experiencias en
apariencia catastróficas en algo cotidiano y de
fácil manejo. La depresión es a la
psicoterapéutica lo que la gripe es a la
medicina.

El reto psicoterapéutico consiste en cambiar la
disposición negativa de la persona, si esto se logra; la
persona pasara a tomar la vida de una forma más real, mas
objetiva y mas positiva logrando así; un cambio en su
conducta tanto para sí misma como para su entorno; siendo
este persona, situación, acontecimiento o sobre
exigencia.

La psicoterapéutica personalizada y la toma de
medicamentos recetados se hace necesarios en la mayoría de
los casos, es un trabajo en con junto entre medico y
psicoterapeuta, sin desconocer otros profesionales como los de la
alimentación o la nutrición según sea el
caso.

Cuando se ha pasado por varios episodios depresivos y se
tiene conocimiento suficiente para pensar que son
orgánicos, entonces sabemos que; existe medicación
que previene con distinta eficacia según los casos, la
aparición de futuros episodios depresivos.

La automedicación en un riesgo que no se debe
tomar, un medicamento puede ser óptimo para una persona y
destructivo para otra.

Una forma de vida adecuada junto con una
alimentación saludable; pueden hacernos más
resistentes a la depresión y también a otras sobre
exigencias emocionales y psicosociales.

Cada persona ha de encontrar la forma en que desea
existir; cada uno ha de justificar su presencia en el mundo como
le parezca, pero debe ser razonable los deseos delirantes han de
ser de entera responsabilidad, no de otros; quizá lo
más conveniente sería clarificar las metas o
definir los objetivos y lograr un equilibrio entre ellos, algunas
depresiones se dan por indefiniciones y por sueños
mágicos o irrealizables, tenemos que considerar los
diversos aspectos de nuestra vida y considerar las obvias
limitaciones que nos asisten; en ese orden ha de entenderse que
hay cosas que no se podrán tener jamás,
también se ha de entender que casi siempre; no somos lo
que quisiéramos ser, somos lo que podemos ser y punto, si
nuestro objetivo es meramente económico; hemos de entender
que tenemos que sacrificar gran parte de nuestra vida y
además; debemos estar dispuesto a toda suerte de
sacrificios y renuncias, tu eliges, en fin…, es mejor ser
pobre en democracia que rico en tiranía; en este caso la
democracia es la salud; la tiranía es la enfermedad, mas
claro no se puede.

Las formas de abordaje de la depresión son
diversas según los casos; si estamos ante un episodio
agudo de depresión o ante una fase de deterioro emocional
agudo es indicada la hospitalización y por supuesto la
medicación controlada; si estamos ante episodios
recurrentes de tristezas, agobio, sufrimiento moral y
desazón, en algunos de estos casos son suficientes las
intervenciones terapéuticas en consulta y no han de
revestir mayor compromiso o mayor movilización de
recursos.

El tratamiento con medicación en la
mayoría de los casos es adecuado, debido a que calma un
sufrimiento desafortunado e innecesario y lo que trata hoy la
psicoterapéutica es precisamente; hacer menos dolorosa la
existencia.

La toxicidad emocional en las depresiones se da por la
importancia que se le asigna a los eventos que motivan el
desajuste; los cuales pueden ser constantes en el desarrollo y
mantenimiento del estado emocional más o menos
permanente.

Mediante el razonamiento, la comunicación, la
disposición, el desciframiento, la comprensión, la
simulación, el aprendizaje y la modificación
conductual se pueden prevenir futuros episodios depresivos. La
depresión va más allá de la voluntad de la
persona; la persona depresiva hace cosas que la lastiman y
lesionan también el entorno familiar, social y
laboral.

La persona deprimida no esta imaginando enfermedades o
inventando desajustes emocionales, no hay que esperar que salga
inmediatamente de la depresión con oraciones o con
maldiciones; con tratamiento presentará mejoría en
un plazo de una a dos semanas, el tiempo de recuperación
en este tipo de patología es lento; hay que esperar que
los medicamentos (si hubiere necesidad) y la psicoterapia hagan
su efecto.

En el tratamiento de la depresión es posible la
atención psicoanalítica no obstante debo reconocer;
es un poco mas lento, con la terapéutica de corte
humanista se logran grandes cambios a corto plazo; pero cuando
hablamos de modificaciones conductuales y reforzamiento; la ideal
es la conductual, claro que la psicoterapia de corte
ecléctico; vendría a dar resultados también
duraderos en el tiempo, muy importantes y favorecedores. Lo
importante en el tratamiento de las depresiones es que los
efectos de esta se mantengan en el tiempo; y sumen recursos de
afrontamiento permanente.

Terapéutica
conductual

La depresión se debe a una baja proporción
del reforzamiento positivo seguido de respuestas
específicas, bien porque existen pocos acontecimientos
gratificantes en el ambiente de la persona y porque ésta
no suele tener o no recuerda respuestas gratificantes, no dispone
de variedad en el conocimiento afectivo, no tiene los suficientes
recursos sociales y familiares para hacer frente a las
crisis.

Los síntomas cognitivos expresados en la
depresión, son consecuencia de la ausencia de respuestas
de refuerzo propios, la persona o no dispone de ellos o no los
encuentra en su haber cognitivo, este tipo de terapia se dirige a
identificar en el individuo los potenciales de reforzamiento
hallados estos en el ambiente personal y conjuntamente terapeuta
y paciente desarrollan métodos para aumentar la
disponibilidad de recursos y métodos de reforzamiento que
le permitan hacer frente a las crisis sin que estas signifique
una gran inversión de orden emocional.

Pérdida de
control

La indefensión es aprendida: la persona se siente
absolutamente vulnerable, se deprime cuando cree que su conducta
tiene poca o ninguna influencia sobre el resultado de los
acontecimientos, es decir, no tiene ningún control sobre
los resultados, en la terapéutica se tienen en cuenta las
modificaciones de los hechos ambientales detonantes de la
depresión, se tienen en cuenta la reevaluación de
las metas y las normas para que se vuelva más realista y
reducir así la posibilidad del fracaso, hay que resaltar y
promover la variedad de habilidades sociales y comunicacionales
relevantes, aumentando el repertorio de actividades generales de
modo que existan más variedad y oportunidades de lograr
resultados auténticos y positivos para llegar a
estrategias de autocontrol eficaz y adulto.

También se modifican los atributos poco realistas
de los intentos que se convierten en fracasos, resaltando las
circunstancias que impiden el resultado deseado o positivo, se
modifican atributos poco realistas del éxito resaltando
las cualidades personales relevantes (fomento o reforzamiento de
la autoestima), es importante apelar a la coherencia; hay cosas
que por simples razones psicosociales no lograre jamás, en
cambio hay otras y son muchas; para las cuales doy el ancho y el
largo.

Distorsiones
cognitivas

Todo estado depresivo tiene su origen en distorsiones
cognitivas basadas en todo un conjunto de pensamientos negativos
constantes o repetitivos, (visión de sí mismo
negativa, circunstancias reales o imaginarias, futuro oscuro,
visión de túnel, minusvalía, amenazas
potenciales, baja tolerancia a la frustración, etc.) No
hay posibilidad de modificar estas distorsiones cognitivas si no
hay una persona entrenada y que además observe desde
afuera del individuo los acontecimientos que se
señalan.

Esta modalidad terapéutica se dirige a la
identificación de los pensamientos automáticos que
subyacen o siguen a la percepción de una dificultad,
generando pensamientos y figuras alternativas que promuevan una
nueva conducta adulta y aceptable (no depresiva ni punitiva) de
índole más realista y adaptable, poniendo a prueba
la credibilidad de estas alternativas y modificando las conductas
inadaptadas que caracterizan los pensamientos automáticos
que conducen a las respuestas depresivas.

Toda distorsión cognitiva es agresiva y nociva
para la salud individual y la salud social, si aprendemos a
decirle no a las distorsiones cognitivas; también
aprendemos a librarnos de las exigencias depresivas.

La depresión se divide en (dos)
categorías.

Trastorno depresivo mayor:

Este se caracteriza por la presencia de uno o más
episodios depresivos mayores, el episodio depresivo mayor abarca
la siguiente sintomatología o más
síntomas:

(1) Estado de ánimo depresivo la mayor parte del
día.

(2) Disminución importante del interés o
de la capacidad para el placer (disfrutar la vida) en todas o
casi todas las actividades.

(3) Pérdida importante de peso (sin haber
realizado dieta) o aumento significativo de peso, o
disminución o aumento del apetito diario.

(4) Insomnio o hipersomnia (sueño durante el
día)

(5) Agitación o retardo psicomotor.

(6) Fatiga o pérdida de la
energía.

(7) Sentimientos de inutilidad o culpabilidad excesiva o
inapropiada.

(8) Disminución de la autoestima y de la
confianza en sí mismo.

(9) Disminución de la capacidad para pensar y
tomar decisiones o concentrarse.

(10) Visión pesimista o catastrófica del
futuro.

(11) Pensamientos repetitivos de muerte, ideas de
suicidio recurrente sin un plan específico o una tentativa
de suicidio o un plan específico para suicidarse, estos
síntomas persisten por lo menos dos semanas en cada
episodio y producen un malestar altamente significativo que
altera la vida familiar, social, laboral y otras áreas
importantes de la actividad de la persona.

Cuando estos episodios depresivos mayores se repiten,
suele haber por lo menos un intervalo libre de síntomas de
alrededor de dos meses entre uno y otro episodio; el hecho de
desaparecer los síntomas no es indicativo de que el
malestar desapareció, es el momento de pedir
asesoría para enfrentar las nuevas crisis, no hay que
descuidar estos malestares porque pueden ser
repetitivos.

El soporte afectivo es vital en los momentos de crisis;
sobre todo en los casos severos especialmente cuando existen
ideaciones suicidas, se recomienda que la persona sea atendida en
un hospital y posiblemente deba ser internada.

En los momentos de crisis severa no es viable la
terapéutica debido a que la persona es
prácticamente resistente a las señales; es decir,
no es posible ayudarlos a salir de la crisis y necesita otros
procedimientos debido en parte a que el sufrimiento moral es
demasiado intenso y bloquea la racionalidad.

Distimia

La distimia presenta síntomas parecidos a la
depresión mayor, pero se diferencia por las siguientes
circunstancias:

(1) Tipo de evolución: el estado de ánimo
depresivo es crónico (no presenta intervalos libres de
síntomas o mejorías significativas) y dura por lo
menos (2) años.

(2) Severidad de los síntomas: los
síntomas suelen ser leves o moderados, sin una
alteración significativa de las relaciones familiares,
sociales y laborales del individuo. La distimia también se
conoce como (neurosis depresiva)

El tratamiento de la distimia o de la (neurosis
depresiva) es fundamentalmente psicoterapéutico, aunque
cuando el trastorno dificulta la vida de relación de la
persona con su familia, con el rendimiento laboral o el
rendimiento académico, los medicamentos antidepresivos
pueden llegar a ser de gran ayuda para que el individuo recupere
a corto plazo un nivel de bienestar que no lo incapacite para
desempeñarse en su vida afectiva, social y
laboral.

En los niños el trastorno distímico;
parece presentarse por igual en niños y niñas y
provoca frecuentemente un deterioro en el rendimiento escolar y
en la interacción social. Este trastorno es más
frecuente entre los familiares biológicos de primer
grado.

La depresión en estos casos ha sido duramente
cuestionada, pero los casos de atención y solicitud de
cita psico-pedriatica va aumentando considerablemente; por lo
tanto cualquier cambio conductual como el aislamiento puede ser
indicativo de depresión.

La depresión en los niños responde a la
intervención psicoterapéutica y también
responde al tratamiento farmacológico con resultados
favorables. En toda depresión hay factores
psicológicos y químicos de ahí; que la
combinación terapéutica sea más eficaz y en
muchos casos es la modalidad recomendada a seguir.

La persona con episodios de depresión no debe
aislarse; debe buscar ayuda y darle la importancia que requiere
de no ser así; esta condenada al sufrimiento emocional
constante y permanente, la depresión tanbien detona la
soledad patológica y el aislamiento igualmente; es
producto de esta condición.

No responsabilice a los demás por sus
infortunios; los demás no tiene porque cargar culpas
ajenas, hágase responsable y modifique su conducta; la
ayuda existe y esta a su disposición, solo búsquela
con genuino interés se trata de su salud.

Suicido

Acto por el cual una persona se auto inflige la muerte,
también en este caso el suicidio se denomina
autolisis.

Puede darse en individuos psíquicamente sanos
como consecuencia de una situación límite. El
suicidio se produce a menudo en conexión con un estado
psicótico o psicopático.

La mayoría de los suicidios tienen lugar durante
una crisis depresiva severa; el suicida siente dolor emocional y
sufrimiento moral que se le hace insoportable, se siente
exasperado, piensa que nada cambiará ni ahora ni en el
futuro, se siente completamente solo y lo peor que no cuenta con
el apoyo de alguien y como consecuencia; la única salida a
su sufrimiento es la muerte.

En un estado depresivo severo las personas no quieren
dejar de vivir; lo que verdaderamente quieren es dejar de sufrir,
eso ha de ser claro; (el suicidio no es una elección es
una opción; la única disponible en una
situación limite) pero el estado mental depresivo impide
pensar en soluciones viables y decorosas como corresponde a un
miembro de la especie; todos los pensamientos están
centrados en los aspectos negativos; además, no se tiene
la capacidad para optar por los aspectos positivos y tampoco se
ve en esos episodios la gran variedad de alternativas de
solución que existen.

A lo largo de nuestra vida aprendemos diversas formas de
solucionar problemas; es claro que algunas personas tienen
más recursos de afrontamiento que otras, pero esto es algo
que se aprende en el curso del tratamiento terapéutico; la
finalidad de los tratamiento psicoterapéuticos; es
hacernos mas autónomos y desarrollar habilidades de
afrontamiento para futuras sobre exigencias siendo estas del
carácter que fueren.

La depresión se puede tratar por medio de
psicoterapia y medicación antidepresiva; los problemas se
pueden solucionar o resolver solo tenemos que sumar recursos
hallados estos en la terapéutica; el problema que yo veo
es que las personas, al tener episodios depresivos
esporádicos consideran que no son importantes y como
consecuencia los ignoran; luego cuando se presenta una nueva
crisis siendo esta mas severa debido en parte a que la
depresión; suma recursos negativos; y si no se cuenta con
los suficientes recursos de afrontamiento se toman decisiones
drásticas y muchas veces se concretan los
suicidios.

Síntomas

Tristeza persistente, desesperación, impotencia,
sensación de falta de valía, pesimismo, culpa,
fatiga o pérdida de interés en actividades
ordinarias, incluido el sexo, falta de entusiasmo,
alteración en los patrones de sueño y
alimentación, irritabilidad, se enfada fácilmente
por pequeñas cosas que antes no le molestaban, ansiedad y
ataques de pánico, dificultad para concentrarse o para
recordar o tomar decisiones, pensamientos, planes o intentos de
suicidio, síntomas físicos persistentes o dolor que
no responde a ningún tratamiento, aislamiento e
incapacidad o falta de interés en las
comunicaciones.

Los signos pueden ser conscientes e inconscientes, son
muchas veces un pedido de auxilio o ayuda de una persona que no
puede expresar lo mal que se siente (no puede poner en palabras
la sobre exigencia por la que esta pasando) La presencia de estos
signos no indica necesariamente que desea suicidarse; no obstante
conviene estar alerta.

Los mensajes como: (todos estaría mejor sin
mí, no importa; no estaré aquí mucho tiempo
más, a nadie le importo, lo sentirás cuando
esté muerto, etc.) los comentarios de este corte hay que
tenerlos muy en cuenta y no considerarlos sólo palabras;
en algunos casos corresponden con ideas fijas y premeditadas.
Cuanto mayor es la depresión mayor es el riesgo de
suicidio; una gran mayoría de personas no comunican su
insatisfacción emocional y son estas las que nos dan
sorpresas.

Qué hemos
de hacer

Lo primero es preguntarle al potencial suicida si quiere
suicidarse; hay que romper el mito de que por preguntarle a
alguien si ha pensado en suicidarse se le va a dar la idea de
hacerlo, eso no es cierto; los pensamientos suicidas se viven en
un gran aislamiento y soledad; la mayoría de las personas
no se atreven a hablar del suicidio debido al tabú que
existe a su alrededor y prefiere hacerlo sin chistar.

En el fondo esta persona agradecerá el
interés y también agradecerá que se le de la
oportunidad de hablar libremente. Recuerde; tener a alguien que
escuche con genuino interés puede ayudar mucho; en una
gran cantidad de ocasiones la escucha atenta y respetuosa;
elimina los deseos de suicidio, en fin…

Riesgo:

Hay algunas circunstancias que aumentan la probabilidad
de que una persona se suicide o haga una intentona y son estas:
historia familiar de suicidio, tengamos en cuenta que los hombres
se suicidan más que las mujeres en una proporción
de tres o cuatro hombres por cada mujer, intentos anteriores de
suicidio, depresión recurrente, abuso de sustancias,
decline en el nivel socioeconómico, muerte de un ser
querido, pérdida de un empleo, pérdida de una
relación importante, abuso físico, emocional,
sexual o social y otras circunstancia no menos importante; pero
estas pueden ser de importancia solo para la persona deprimida;
de ahi, la importancia de escuchar con respeto no hay que ser
punitivo ni muchomenos restarle importancia a lo que esta persona
tiene por importante.

Los
mitos

(1) La gente que habla de suicidarse en realidad nunca
lo hacen (NO) la mayoría de las personas que comete
suicidio o lo intenta; ha avisado directa o
indirectamente.

(2) El que intenta suicidarse está loco (NO) el
dolor emocional y el sufrimiento moral extremos no es
necesariamente un signo de enfermedad mental.

(3) Cuando una persona ha decidido suicidarse nada ni
nadie puede impedírselo (NO) la mayoría de las
personas no quieren morir; sólo quieren librarse del dolor
emocional y del sufrimiento moral; pueden estas personas tener
sentimientos entre mezclados de vida y muerte hasta el
último instante.

(4) Superar una crisis suicida significa que ya no
existe riesgo de suicidio (NO) si bien la persona empieza a
sentirse mejor; los pensamientos suicidas pueden persistir
durante un tiempo o volver a aparecer en determinados momentos;
estos son recurrentes.

(5) Una persona con algún grado de importancia y
además bella nunca se suicida (NO) casos hemos visto, las
sobre exigencias emocionales se presentan en todas las
personas.

Atención
básica

Pregúntele (ya se sabe que no hay riesgo en
preguntar) si tiene intención de hacerlo o sólo lo
ha pensado; si tiene un plan elaborado y cuándo lo
llevaría a cabo (ahora mismo, mañana, la otra
semana, después de…en fin) la mayoría de las
veces no hay riesgo inminente de suicidio; pero si es así,
no dude en llamar por ayuda si sabe donde, o avise a la
policía; es lo menos que se puede hacer.

Atienda atentamente lo que la persona quiere decir sin
actitud punitiva; no minimice los problemas o requerimientos de
la persona; intente ponerse en su lugar y trate de entender lo
que puede estar sintiendo, para esta persona los problemas son
tan graves que prefiere morir antes que seguir
soportándolos.

No culpabilice a la persona diciendo; le harás un
daño enorme a tu familia y además a todas las
personas que te ama; eso solo suma recursos negativos como la
culpa y la negación.

No minimice el sentir de esta persona; no le diga cosas
como (eso no es nada) ni trate de poner ejemplos
catastróficos de otros; deje que la persona llore o haga
pataleta, apóyela es en estos momentos limite cuando se
necesita de la genuinidad de los afectos y la comprensión,
dígale que lo que le sucede tiene tratamiento y que
tampoco es lo peor del mundo, que no esta sola o solo y que puede
contar con todo el apoyo necesario, si encuentra resistencia a
una invitación a tratamiento dígale; que no pierde
nada con intentarlo, que para todo hay un tiempo; que hay un
tiempo para nacer y también para morir y que este no es el
momento (lo importante es que posponga el suicidio y busque ayuda
o mientras esta llega) los pensamientos y deseos de suicidio por
fortuna son temporales; una persona con deseos o ideaciones de
suicidio debe ver a un especialista lo mas pronto
posible.

Afrontamiento:

Los suicidios ocurren durante los primeros tres
episodios depresivos; después la persona puede darse
cuenta de que los pensamientos suicidas son siempre transitorios
y se pueden enfrentar. Cuando aprenden por experiencia propia;
que estos episodios de sobre exigencia terminan pasando, la
probabilidad de llegar a concretar el suicidio disminuye
notablemente; incluso algunas personas desarrolla nuevas
actitudes referente a la vida y a las sobre
exigencias.

Las personas que han sufrido de estos episodios luego de
haberse estabilizado deben hacer una lista con las cinco o mas
personas a las que podrían recurrir en caso de un nuevo
episodio.

Reconocer los síntomas que pueden llevar a una
crisis suicida nuevamente; es sinónimo de crecimiento
emocional luego Indican que es el momento para quererse y
cuidarse no para anularse

Pérdida
por suicidio

No es extraño que aparezcan variedad de
sentimientos; entre ellos culpa, resentimiento, temor a que el
hecho se repita, confusión, arrepentimientos y
preocupación por problemas no resueltos; hay toda una
variedad de sentimientos que afloran en estos casos incluso es
recomendable asistir al especialista para aliviar un poco la
carga tencional.

Algunas personas se sienten culpables pensando que
más pudieron hacer a la hora de ayudar o se
recriminarán por no haberse dado cuenta a tiempo;
desafortunadamente no siempre puede impedirse el suicidio; todos
estamos limitados sencillamente ya que no podemos controlar
totalmente la conducta de otras personas y mucho menos sus
intenciones de manera permanente.

El suicidio de una persona significativa nunca se supera
por completo; se tiene que aprender a vivir con eso y punto; es
así de duro. No es necesario demostrar el amor llorando la
perdida toda la vida; puede esta persona permanecer con nosotros
a través del recuerdo grato y de los momentos felices que
han de ser muchos, en fin…, si se tiene el deseo de hablar
del suicidio hay que hacerlo expresar los sentimientos es sano;
si se reprimen, pueden hacerse muy pesados.

La pregunta común tras un suicidio es como
informo a los demás miembros de la familia y sobretodo a
los niños; la respuesta es simple: la verdad es lo
más importante, ignorar los hechos no hará que
estos desaparezcan. Los niños son muy vulnerables; pueden
pensar que la persona que se suicidó no los quería
y se sienten abandonados, se sienten culpables del suicidio,
sobre todo si en algún momento de enfado desearon la
muerte de esa persona.

Qué hace a
las personas propensas al suicidio depresivo

(1) Las mismas cualidades que incita a una persona al
perfeccionismo; puede llevarla igualmente a la
autodestrucción.

Partes: 1, 2

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