- Colombia precolombina
- Colombia colonial
- Diversidad cultural y natural en
Colombia - Santos
abre educación superior pública al capital
privado - El uso
del concepto de gobernanza o/y gobernabilidad en
Colombia - La
Guerrilla Colombiana - Conclusiones
- Referencias
La historia de la cultura colombiana es muy
amplia y llena de una riqueza en todas sus áreas y
especialidades. Desde la época de la conquista, cuando los
primeros aborígenes convivieron entre sus costumbres,
ritos y conocimientos naturales, la cultura hizo parte de los
indios en aquel entonces. Si bien, guardaban ciertas proporciones
de cómo adaptar sus símbolos, adoraciones
mitológicas y religiosas (Sol, la luna, las estrellas, los
signos, dibujos, entre otros), acoplaron su ritmo de vida a su
propia cultura. En efecto, es en los siglos XIV-XV y XVI, que al
llegar los conquistadores españoles acompañados de
europeos cultos y amantes de la cultura del viejo continente, se
mostraron muy interesados en conocer e investigar la cultura
indígena y por supuesto, cada una de las tribus de aquel
entonces.
Posteriormente en la Colonia, se incrementa
ese interés de los europeos que fueron entregando poco a
poco sus conocimientos a los habitantes, pueblerinos y en
particular a quienes nacidos en América y en particular en
la Nueva Granada, se encargaron de estudiar y profundizar el
arte, la cultura, la pintura, la literatura y demás en las
respectivas regiones.
Por ejemplo en la literatura sobresalieron
los cronistas de indias (Juan de Castellanos), quien
profundizó en cada una de expediciones de los
conquistadores. De hecho los conocimientos venidos de Europa,
enriquecieron aún más a los colonos los cuales
aprendieron a ver a otros mundos mediante los libros y
enseñanzas venidas de diferentes partes.
La independencia es la época que
marca el inicio de una nueva forma de pensar en la Colombia de
ese entonces (1700 -1810). Hubo varios personajes que se
dedicaron desde muy temprana edad a cultivar varios
géneros culturales ( Antonio Nariño, Camilo Torres,
Francisco José de Caldas, Antonio Galán , Manuela
Beltrán , Policarpa Salabarrieta, entre otros), que como
la historia lo registra, fueron los próceres de la
independencia de Colombia.
Ellos estaban dotados de conocimientos
literarios, abogados, artes, etc, quienes inspirados por todo
aquel mundo cultural europeo propició un nuevo pensamiento
en la parte cultural. De otra parte, es a partir de la
época de la República hasta 1999 (1835 a 1999), que
Colombia registra una ola de valores y expresiones culturales en
todo sentido. Personajes de la talla de José Hilario
López, Tomas Cipriano de Mosquera, Rafael
Núñez, Antonio Caro, Rufino José cuervo,
Porfirio Barba Jacob, Juan Lozano, Tomas Carrasquilla, Baldomero
Sanín Cano, Jorge Eliécer Gaitán,
Germán Arciniégas, Gabriel García
Márquez (Premio Nobel de Literatura), Álvaro Mutis,
Alejandro Obregón, Fernando Botero, Omar Rayo, Enrique
Grau, y Marta Senn, entre otros, son los cientos de colombianos
que han enmarcado con lujo de detalles y dejado el nombre de
Colombia muy en alto en el ámbito internacional en cada
una de sus especialidades en la cultura nacional.
Colombia
precolombina
Más de doce culturas habitaron el
territorio colombiano antes de la Conquista y dejaron testimonio
del elevado nivel de desarrollo que alcanzaron. Ciudades y
caminos de piedra, estatuas, urnas funerarias y refinadas piezas
de oro y cerámica forman parte de la herencia que hoy nos
permite conocer su forma de vida y creencias.
Los Muiscas, asentados en el altiplano cundiboyacense,
eran un pueblo de agricultores. Fueron excelentes orfebres y
alfareros y dejaron invaluables tesoros. El mito de El Dorado,
que inspiró la conquista del interior del continente, tuvo
su origen en la ceremonia de investidura del nuevo cacique que,
cubierto de oro, se dirigía en una balsa hacia el centro
de la laguna de Guatavita acompañado de sus
sacerdotes.
La alfarería y orfebrería también
se destacan en las culturas Quimbaya, Sinú, Tayrona y
Calima. Sus obras se pueden apreciar en el Museo del Oro del
Banco de la República, el Museo Arqueológico Casa
del Marqués de San Jorge y el Museo Nacional, en
Bogotá; el Museo de la Cultura Quimbaya en Armenia; el
Museo de la Cultura Tayrona en Santa Marta y el Museo de la
Cultura Sinú en Cartagena. En galerías
especializadas se pueden adquirir réplicas elaboradas con
las mismas técnicas que utilizaron los grupos
indígenas.
Barrio La Candelaria, Bogotá
/Fot. trevino
Colombia
colonial
Hacia la tercera década del siglo XVI,
comenzó la fundación de ciudades. Se
distribuyó la tierra entre los conquistadores, se
organizó la explotación de las minas de sal, oro y
esmeraldas y se implantó el cristianismo. Con la llegada
de los españoles y el arribo de los africanos,
traídos en calidad de esclavos, se afianzó el
mestizaje.
A pocas horas de Cartagena de Indias se encuentra
Mompox, puerto sobre el río Magdalena que se
convirtió en centro del comercio y villa señorial.
Su arquitectura produjo obras destacables como la Iglesia de
Santa Bárbara o el Colegio Pinillos.
La capital del Virreinato se estableció en
Bogotá, sede del gobierno español y de la alta
jerarquía eclesiástica. En el barrio de La
Candelaria y sus alrededores se conservan casonas y templos que
guardan sus tesoros. Muchas de estas construcciones se han
convertido en museos donde se pueden apreciar las manifestaciones
artísticas y culturales de nuestros ancestros.
Popayán y Tunja conservan barrios coloniales
llenos de encanto: sus iglesias guardan retablos barrocos
forrados en laminilla de oro y en sus calles estrechas, plazuelas
tranquilas y residencias señoriales se siente que el
tiempo no ha transcurrido.
Por toda Colombia hay pueblos y ciudades que guardan
invaluables tesoros arquitectónicos.
La posición estratégica de Cartagena de
Indias, principal mercado de esclavos de Suramérica, hizo
que la ciudad fuera codiciada por corsarios ingleses que con
regularidad intentaban tomarla. Se construyeron fortalezas que la
convirtieron en el puerto mejor protegido de América. En
su recinto amurallado se conserva el centro histórico, con
importantes construcciones civiles y religiosas, tesoros por los
que fue declarada Patrimonio Histórico de la
Humanidad.
Honda tuvo una gran importancia por ser punto intermedio
en el ascenso de viajeros y de carga hacia Bogotá durante
la Colonia y hasta el siglo XIX y aún conserva su hermosa
arquitectura y sus empinadas callejuelas.
Por toda la geografía colombiana, hay pueblos y
ciudades dispersos que recuerdan la importancia de las
fundaciones del período colonial y guardan invaluables
tesoros arquitectónicos, como Pamplona en Norte de
Santander, Girón y Barichara en Santander, Villa de Leyva
en Boyacá y Santa Fe de Antioquia, cerca de
Medellín. En los lugares que fueron escenario de la lucha
por la emancipación de España se encuentran
reliquias que conmemoran las guerras de independencia.
La mezcla de razas ha aportado al país y al mundo
expresiones culturales de gran valor en los campos de la
música, las artes plásticas y las letras, como lo
atestiguan escritores y artistas cuya obra se puede admirar en
los museos, galerías, bibliotecas y espacios
públicos del país.
Los Chibchas o Muiscas Son un grupo indígena de | |
Cuando los españoles | |
Organización Social:En el | Zipa y Zaque |
Nariguera Muisca | La base de la sociedad chibcha era |
Economía de los Una de las actividades importantes | |
Desarrollaron una industria de Explotaron minas de sal, | |
OrfebreríaLa | Figura elaborada por los |
Balza Muisca, hallada en | Leyenda del El DoradoCuando |
Una vez en el medio de la laguna, | |
Diosa de la Luna | Religión:Los Chibchas |
La leyenda de | Bauché |
En su diestra traía un |
Diversidad cultural y
natural en Colombia
Parque Arqueológico de San
Agustín
En Colombia, la diversidad cultural y natural
está expresada por sus regiones, en donde persisten las
herencias de los indígenas y ancestros europeos y
también los rasgos particulares que han construido la
historia de este país.
Diversidad cultural
Una gran variedad de culturas habitó el
territorio colombiano antes de la llegada de los
españoles, algunas tan avanzadas y sofisticadas como las
que crearon las estatuas de San Agustín en el Huila, las
tumbas de Tierradentro en el Cauca, o la Ciudad Perdida (Buritaca
2000) en la Sierra Nevada de Santa Marta.
Colombia es un lugar privilegiado por su naturaleza y
cultura.
En la actualidad, Colombia es el hogar de más de
87 pueblos indígenas que emplean 64 lenguas nativas
pertenecientes a 22 familias lingüísticas.
Además, habitan varios millones de afrocolombianos;
más de 30 millones de mestizos; 12 mil gitanos y
núcleos de inmigrantes en diferentes regiones. En el
archipiélago de San Andrés y Providencia la
población, en su mayoría, habla
inglés.
Diversidad natural
Colombia es un lugar privilegiado por su riqueza
ecológica, alberga una gran diversidad de ambientes
naturales propicios para desarrollar actividades
turísticas y recreativas al aire libre.
Algunos datos de interés sobre la diversidad
natural en Colombia:
Ave Dacnis
Colombia es uno de los 12 países con mayor
biodiversidad en el mundo, en términos de
biología y ecosistemas.Las montañas de la Sierra Nevada de Santa
Marta se encuentran muy cerca del océano y pueden
alcanzar alturas que superan los 5.300 metros.Colombia tiene el mayor número de especies
por unidad de área en el planeta. Por ejemplo, habitan
más de 1.800 especies de aves en territorio
colombiano, número mayor que el total de aves que
residen entre Norteamérica y Europa.Colombia es el país que alberga la mayor
variedad de mariposas y ranas en el mundo.Colombia tiene una inmensa variedad de
orquídeas, existen al menos 3.000 especies en su
territorio.Colombia cuenta con la mayor variedad de
árboles de palma en el mundo.Colombia es líder mundial en la
producción de esmeraldas.
Santos presenta proyectos para promover y
defender a la cultura
Santos presenta proyectos para
promover y defender a la cultura
(Foto: Colprensa/ VANGUARDIA
LIBERAL)
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos
presentó cuatro proyectos de ley encaminados a la
promoción y la defensa de la cultura colombiana, y que
fueron radicados este mismo jueves ante el Congreso.
Se trata de cuatro iniciativas para
fomentar la actividad cinematográfica, formalizar la
industria de espectáculos públicos, readquirir el
patrimonio arqueológico y regular el patrimonio
sumergido.Santos hizo la presentación en un acto especial
en la Casa de Nariño en Bogotá, sede del
Ejecutivo."Con tanta riqueza cultural a nuestro alrededor,
nuestro deber, nuestra obligación, no sólo con el
país, sino con el mundo, es promover y defender esas
expresiones culturales, generando espacios para que dejen su
huella en las generaciones presentes y futuras", dijo Santos.El
primer proyecto tiene que ver con la formalización del
espectáculo público en las artes escénicas,
para reducir la carga tributaria y los trámites
burocráticos que desestimulan los eventos
artísticos, explicó el mandatario.El segundo es un
proyecto de fomento "para que nuestro cine siga creciendo en su
proyección nacional e internacional, y para que Colombia
sea locación de grandes películas del mundo",
explicó Santos.Un tercer proyecto de ley es el de
patrimonio cultural sumergido, que establece una especie de
guía para definir qué es patrimonio
arqueológico y qué no, "de manera que sea clara la
línea entre lo que se puede ceder a particulares y lo que
no es negociable", indicó el presidente
colombiano.Finalmente, el Gobierno presentó un proyecto
que tiene que ver con los mecanismos para recuperar el patrimonio
arqueológico que está en manos de
particulares."Esta iniciativa contempla una opción para
que las piezas que estén en manos de particulares sean
transferidas a la Nación o a entidades territoriales,
científicas, universitarias o culturales que financien
investigaciones sobre el origen del patrimonio
arqueológico", puntualizó Santos.La Ministra de
Cultura, Mariana Garcés Córdoba, radicó las
iniciativas en el Legislativo."Los cuatro proyectos tienen un
objetivo común legislar sobre algunas áreas del
sector cultural para hacer que la cultura se transforme, cada vez
más, en un bien asequible y generoso para todos los
colombianos", explicó Garcés.
Santos abre
educación superior pública al capital
privado
Por: Elespectador.com
El proyecto contempla crear instituciones con
ánimo de lucro, de manera que estas aporten recursos para
los fondos de becas y de crédito que benefician a los
más pobres.
Al presentar en la Casa de Nariño el proyecto de
reforma a la Ley 30 de Educación, el presidente Juan
Manuel Santos explicó los cuatro pilares en que se basa
esta iniciativa: promover la calidad y la investigación;
aumentar los recursos para la educación superior,
incluyendo el capital privado; tener una educación
pertinente en lo regional y competitiva en lo internacional, y
garantizar una gestión educativa basada en el buen
gobierno.
Promover calidad
El primer pilar de esta iniciativa es promover una
educación en Colombia de mayor calidad, planteando
incentivos a la buena calidad y a los procesos de
acreditación, así como al fomento de
investigación e innovación.
"Precisamente, el 10 por ciento de las regalías,
según la reforma que está en trámite en el
Congreso, será invertido en programas regionales de
ciencia y tecnología", subrayó el Jefe de
Estado.
Por esta razón el mandatario hizo un llamado a
los rectores, para que empiecen a pensar en el diseño de
proyectos de ciencia y tecnología, que impacten en el
desarrollo regional.
Aumentar recursos
El presidente Santos aseguró que el segundo
objetivo de esta reforma es generar condiciones para que
más colombianos se gradúen de la educación
superior.
Reconoció que para cumplir con este objetivo,
se requieren recursos financieros, para lo cual se debe
ampliar la fuente de este presupuesto y no limitarlos al
presupuesto público.
"Los recursos públicos son limitados y debemos
ser muy ingeniosos para ampliar las fuentes de recursos del
sector. Prevemos mantener la base presupuestal de las
Instituciones de Educación Superior públicas,
adicionando un aumento porcentual escalonado, dirigido a mejorar
la calidad, la formación docente, la investigación
y el aumento de cobertura con énfasis regional",
explicó.
Anunció que además de la base
presupuestal y del ajuste natural por cuenta de la
inflación, "el Estado otorgará un 1 por ciento
adicional en 2012, un 2 por ciento en 2013, y un 3 por ciento
entre 2014 y 2019, premiando resultados y buenos indicadores de
desempeño".
Indicó que también se prevé la
inyección de aportes de alianzas publico-privadas a la
educación superior pública, para que genere
más competitividad.
"La educación pública, si quiere ser
competitiva, no puede negarse la posibilidad de tener fuentes de
inversión privada. Y eso, que quede claro, no significa
privatizar, sino invertir. Desde ya quiero evitar malos
entendidos. Lo que estamos proponiendo busca, simple y
llanamente, que el sector privado se meta la mano al bolsillo en
beneficio de la educación superior pública, y en
alianza con ella, sin que eso represente un sólo peso de
costo adicional para el estudiante. ¡Todo lo contrario! Los
beneficios de las alianzas mejorarán la calidad de la
formación y la investigación",
enfatizó.
Santos indicó que además se propone crear
Instituciones de Educación Superior con ánimo de
lucro, de manera que estas instituciones aporten recursos para
los fondos de becas y de crédito que benefician a los
más pobres.
"A las instituciones de educación superior se les
ha exigido que sean sin ánimo de lucro, lo que ha limitado
las posibilidades de inversión privada en ellas. Por eso
proponemos crear Instituciones de Educación Superior con
ánimo de lucro", explicó.
En este sentido puso a Brasil como un ejemplo de
cómo esta fórmula multiplica la cobertura.
Allí en 12 años pasaron de 1"800.000 estudiantes a
casi 6 millones, teniendo un 75 por ciento de instituciones con
ánimo de lucro. "Estas instituciones, además,
aportan recursos para los fondos de becas y de crédito que
benefician a los más pobres", agregó.
El mandatario dijo que de acuerdo con la propuesta, el
esfuerzo conjunto entre el Estado y el sector privado
podría significar unos 2,4 billones de pesos adicionales
para el sector en los próximos 3 años.
"Esos recursos serían suficientes para que
pasemos de alrededor de 1"600.000 estudiantes que hoy
están en procesos de formación de educación
superior a 2"200.000 estudiantes, recibiendo educación
superior pertinente y de calidad, en el 2014. ¡Un aumento
del 37 por ciento!", informó.
Explicó que, además, el proyecto de ley
también fortalece al Icetex, para brindar más
oportunidades de estudio a todos los colombianos, mediante
sistemas de becas-créditos, entre otras
estrategias.
Una educación acorde con la realidad regional e
internacional
El tercer pilar de esta ley es adecuar el Sistema de
Educación Superior con la realidad nacional y armonizarlo
con las tendencias regionales e internacionales. Aseguró
que de esta manera la educación superior será
útil y pertinente para las regiones del país y
además cumplirá con estándares
internacionales.
Explicó que se crearán los comités
departamentales de Educación Superior, con la
participación de las Secretarias de Educación como
instancias de coordinación a nivel regional.
"Después de todo, las regiones son las que pueden
determinar el tipo de capital humano que requieren y demandan",
aseguró.
En el plano de la internacionalización, la
propuesta facilita la movilidad de estudiantes, profesores e
investigadores, así como su participación en redes
académicas. "También promueve la
internacionalización del currículo y de nuestro
sistema de calidad, para que nuestros profesionales tengan las
puertas abiertas en muchos otros países", dijo.
Buen Gobierno
El proyecto de reforma contempla un capítulo
específico de Transparencia y Buen Gobierno, que busca
promover criterios de gobernabilidad que combinen la
autonomía institucional y la responsabilidad
pública.
"También se exige la rendición de cuentas,
para que la sociedad y el Estado reciban información veraz
y oportuna de los recursos recibidos por las instituciones, tanto
del Estado como de la sociedad en general, y las metas alcanzadas
con ellos", puntualizó el presidente.
El uso del concepto
de gobernanza o/y gobernabilidad en Colombia
La gobernanza involucra entonces un espectro amplio de
cuestiones. De un lado se presenta como un nuevo motor de la
regulación política, social y económica del
nivel local al nivel global y una herramienta de
renovación del espacio político y de los
fundamentos democráticos de nuestras sociedades. De otro
lado, suele por su percepción neoliberal reducirse a la
cuestión de la gestión técnica de los
recursos públicos y en este sentido abre la puerta a una
cierta privatización del campo público y de la
decisión política, con lo que finalmente puede
terminar justificando las reformas neoliberales en el
ámbito político, económico y social. Sin
embargo, más allá de las varias interpretaciones
ideológicas de la gobernanza y del esfuerzo por darle una
definición común, la gobernanza tiene el
mérito de ser un concepto amplio que permite una multitud
de aplicaciones.
En Colombia, este debate tiene su expresión no
sólo en la terminología pero también en la
manera con la cual esta interpretado y usado el concepto de
gobernanza. En efecto, observamos de un lado un analisis
constante del concepto de gobernanza por parte de las ciencias
sociales, es decir un uso teorico de la gobernanza por los
acádemicos y investigadores. De otro lado, el Estado, las
organizaciones internacionales y las organizaciones sociales en
Colombia aplican el concepto de gobernanza de manera distinta. En
este sentido, la presente ficha quiere estudiar la
aparición, el uso y la interpretación del concepto
de gobernanza por los actores mencionados.
Mostrarémos en primer lugar que uso
teórico del concepto de gobernanza está empleado en
Colombia por las ciencias sociales, los academicos. En segundo
lugar, propondremos una caracterización de los distintos
usos y aplicaciones de la gobernanza según el tipo de
actor en el contexto especifico de Colombia.
1. Terminología y uso teórico de la
gobernanza en Colombia
En primer lugar, es necesario precisar que en
América Latina y en Colombia en particular se usa casi
siempre el término de gobernabilidad y no el de
gobernanza. En efecto, en la bibliografía especializada,
académica, o inclusive en la prensa nacional de los
últimos diez años, cuando se trata de analizar el
funcionamiento de las instituciones estatales, la cuestión
de la participación ciudadana o la reforma del Estado se
hace únicamente referencia al concepto de gobernabilidad2.
Parece en efecto que el término de gobernanza no fue
realmente apropiado por los centros de investigación
latinoamericanos tal como lo fue por ejemplo por las
instituciones internacionales, por institutos norteamericanos o
europeos. Esto no significa que no se hayan hecho algunos
estudios sobre el tema pero que la terminología se
adoptó a una lógica determinada por las
instituciones internacionales y a las reglas del juego mundial
traduciendo en „gobernabilidad" la capacidad para un Estado
de responder a los requisitos y criterios de „buena
gobernabilidad". En el caso colombiano, el Estado en su
desarrollo está sometido a las reglas impuestas por
instituciones internacionales como el Banco Mundial por lo cual
el concepto de gobernabilidad se reduce entonces a unas normas
puramente técnicas relativas a la eficiencia del
Estado.
Esta opción terminológica no reduce el
concepto de gobernabilidad a una sola definición sino que
encontramos bajo la apelación a gobernanza distintas
tendencias o comprensiones de la misma. En Colombia la
gobernabilidad constituiría entonces una noción
evolutiva con varias referencias teóricas y aplicaciones,
pero que se usa cada vez que se trata de analizar el modo y la
acción de gobernar. Finalmente, háblese de
gobernabilidad o de gobernanza, no es el término usado lo
que prima sino sus distintas connotaciones y acepciones. Usaremos
en lo que viene el término gobernabilidad porque en
Colombia, la mayoria de agencias de Estado, actores sociales y
academicos usan este termino.
Por lo anterior, es importante estudiar las distintas
connotaciones de la gobernabilidad en Colombia. Hasta mediados de
los años ochenta, en América Latina y en Colombia,
la gobernabilidad tiene una connotación negativa Es decir,
se habla de gobernabilidad en terminos negativos, para
caracterizar una mala situacion. En efecto, las crisis
económicas y sociales, la declinación del Estado de
bienestar, el agotamiento de modelos, la violencia, la
corrupción, el descrédito de los partidos
políticos y la incapacidad de las agencias estatales para
responder a las demandas sociales son factores que demuestran una
cierta ausencia de gobernabilidad. En los estudios academicos, en
la prensa cuando los periodistas quieren referirse a un
disfuncionamiento del Estado, o en los informes de las
instituciones internacionales analisando la situación
politica colombiana, se hace entonces mucho más referencia
a la crisis de gobernabilidad o a la ingobernabilidad que a la
gobernabilidad en sí. Sin embargo, en el principio de los
años noventa, las discusiones sobre este concepto
abandonan dicha connotación negativa y privilegian la
consolidación democrática y la redefinición
del papel del Estado. Más que partir de valoraciones
negativas, lo que se busca es mejorar la gobernabilidad y
proponer elementos para obtener "sociedades gobernables" llegando
a una connotación más positiva que quiere
relacionar el sistema democrático con el mejoramiento de
las condiciones de vida de los ciudadanos. Se trata en este
sentido de considerar no sólo la calidad de la
gestión pública: eficiencia, eficacia y
transparencia pública, sino también de evaluar la
capacidad de los gobiernos de actuar según los principios
democráticos. Esta connotación positiva de la
gobernabilidad le da un nuevo carácter.
Ahora bien, es importante estudiar más
allá de la terminología escogida como los distintos
actores de la sociedad colombiana usan el concepto de gobernanza
y con que intereses.
2. Caracterización del uso de la gobernanza
por distintos actores en Colombia
Más que de presentar una lista exhaustiva de los
distintos actores de la sociedad colombiana que aplican el
concepto de gobernabilidad, se quiere aqui poner enfásis
sobre tres tipos de actores que fueron escogidos por el modo de
uso que hacen de este concepto. Describirimos entonces en primer
lugar, el marco juridico y político en el cual el conjunto
de los actores colombianos se refieren a la gobernabilidad. En
segundo lugar distinguiremos de un lado, el uso técnico
que hacen organisaciones nacionales o internacionales y de otro
lado el uso politico de otra organisaciones de la sociedad civil
colombiana.
a) La Constitución de 1991: el marco de
referencia de la gobernabilidad en Colombia
Es importante recordar que a finales de la década
de los ochenta, el Estado colombiano puso en marcha una serie de
reformas político-administrativas con las cuales
quería remediar los problemas históricos de
ineficiencia, falta de presencia en el territorio nacional y
falta de legitimidad política. Esas reformas, entre las
que se destaca la descentralización en 1986 y la
elección popular de alcaldes en 1988, fueron luego
fortalecidas con la redacción de una Nueva
Constitución Política en el año de 1991. Los
principales rasgos de aquella constitución tienen que ver
precisamente con la redefinición de las relaciones entre
los ciudadanos y el Estado y por consiguiente con un cierto
mejoramiento de la gobernabilidad en Colombia. La
Constitución intentó modernizar el mundo
político, y aunque su impacto se ha visto limitado a
ámbitos específicos (derechos de comunidades
étnicas, mundo escolar y laboral, entre otros),
logró transformar algunos de los sentidos atribuidos a la
relación Estado y sociedad y convertirse en una de las
referencias utilizadas por actores colectivos para reivindicar
sus derechos. Precisamente, la Constitución de 1991 opera
como el marco histórico, el texto de referencia desde el
cual se pregunta por la construcción de una gobernabilidad
en Colombia. Se vuelve entonces la base jurídica,
política y social para las instituciones que desarrollan
programas de ayuda al mejoramiento de la gobernabilidad en
Colombia.
Sobre esta base política varias instituciones,
sean agencias estatales u organizaciones no gubernamentales,
proponen estrategias, instrumentos y acciones para la
gobernabilidad. Dentro de ellos debemos distinguir, por un lado,
remedios técnicos que desean lograr un Estado eficiente,
transparente y participativo y, por otro lado, remedios socio
políticos que enfatizan sobre la estructuración de
una sociedad civil, vigilante y activa.
b) Un uso técnico del concepto de la
gobernabilidad por el gobierno colombiano
Página siguiente |