- La imagen de las mujeres
en la publicidad - Políticas de
Igualdad - ¿Y los malos
tratos en la prensa? - Uso no sexista del
lenguaje - Sexismo social y sexismo
lingüístico en los medios de comunicación
escritos - Feminización del
Currículo
ABSTRACT
Esta comunicación pretende ser una
reflexión entorno al papel de la mujer en la
sociedad
actual, y más concretamente en los medios de
comunicación. Tras la realización de un curso
en la Universidad Jaime
I de Castellón sobre el tratamiento no sexista de la
información, aparecen estas reflexiones, conclusiones y
aspectos más destacados del mismo.
Palabras clave:
- desigualdad/exclusión
- género
- identidad
- medios de comunicación
- política
La imagen de las
mujeres en la publicidad
Por todos es sabida la influencia de la publicidad entre
la sociedad, de ahí su razón de ser. ¿Pero
que pasa cuando la influencia no es lo deseable que
debiese?
Así pues se puede afirmar que la publicidad, y de
manera muy directa, conforma la identidad
social. Atendiendo a este razonamiento, ¿puede la
publicidad modificar la construcción de roles y estereotipos?
¿Puede ayudar a transformar prejuicios?
Si observamos muchos de los anuncios de la
televisión de los 70 y 80, comprobaremos la evolución y transformación social.
Algunos de los anuncios que allí se publicitan son el fiel
reflejo de la realidad, donde el producto era
el eje del argumento y sus propiedades su carta de
presentación.
En la actualidad, el argumento se ha transformado, ya
que el producto es la consecuencia de las armas de
seducción del spot publicitario. Interesa contar
algún argumento con relación directa o indirecta
con el producto, para así ser recordado y en consecuencia
consumir el producto. Podemos decir que se produce una metonimia
social, ya que a partir de la realidad, se reinterpreta en una
particular visión de la misma y del producto. Pero si
cuando en este proceso de
reconstrucción subjetiva, quedan en entredicho
determinados ámbitos culturales y sociales, tales como la
escuela, la familia,
el lenguaje,
el estatus económico… siempre de forma intencionada, es
cuando la influencia o trasferencia no resulta del todo
positiva.
Resulta evidente pensar que la valla publicitaria, o el
anuncio de un periódico
debe guardar una relación de contingencia con el marco
social, ideológico, histórico, del lugar donde se
emite. Así pues, no produce el mismo efecto un mismo
anuncio en un país que en otro, ni en una época del
año que en otra, ni en una década que en otra. No
es por tanto un elemento atemporal, ni estable, ni produce el
mismo efecto. Y atendiendo a este elemento también su
influencia es multivariable.
A pesar de los cambios sociales de las ultimas
décadas, podemos afirmar, que las mujeres son
cuantitativamente protagonistas en la mayor parte de los
anuncios. Según Miguel Ángel Arconada Melero, a la
hora de sistematizar un análisis de la publicidad es interesante
observar:
- los productos
que se ofrecen mayoritariamente a mujeres y hombres,
reflexionando sobre si se trata de productos que cubren
necesidades específicas de unas y otros o si el mercado se
encarga de asignar determinadas compras (
limpieza, belleza, informática, cultura,
grandes adquisiciones,…)en función
del rol social desempeñado. - las diferentes estrategias de
comunicación y seducción utilizadas en mensajes
destinados a hombres y a mujeres. - las diferentes apelaciones motivacionales utilizadas
para un mismo producto, dependiendo del target masculino o
femenino al que se dirija el mensaje publicitario. - las distintas formas de utilizar el cuerpo de la
mujer y el
cuerpo del hombre en la
publicidad, y las diferentes finalidades con las que se
realiza.
Los nuevos cambios del rol de los hombres han producido
un reajuste de los destinatarios de determinados productos.
Así, podemos observar múltiples anuncios de
cosméticos donde el protagonista es el hombre
así como el destinatario, ya que es también
más consumidor.
Paralelamente, la distribución de las tareas del hogar, ha
propiciado un nuevo grupo de
consumidores que junto con la educación de la
prole provoca un consumo unisex
para desempeñar estas nuevas tareas.
Una educación critica
para la valoración de los diferentes anuncios es la base
para auto corregir, por parte de todos, el sexismo publicitario y
los sesgados estereotipos para conseguir una imagen coherente de
la mujer en libertad e
igualdad.
En al IV Conferencia
Mundial de las Mujeres de Beijing en Septiembre de 1995, se crean
2 documentos
fundamentales para velar por la igualdad entre hombres y
mujeres:
1. La Declaración de Beijing.
Promueve el empoderamiento de las mujeres entre
los estados miembros en busca de la igualdad en todas las esferas
de la sociedad, incluida la económica con mejoras en los
créditos, la información, la
formación, las comunicaciones
y los mercados.
2. La Plataforma para la Acción.
(www.onu.org/temas/mujer.htm)
Esta Plataforma establece 12 áreas prioritarias
de actuación como son la pobreza, la
educación y capacitación, la salud, la violencia
contra las mujeres, los conflictos
armados, la economía, el
ejercicio del poder y la
adopción
de decisiones, los mecanismos institucionales para el desarrollo de
las mujeres, los derechos humanos,
los medios de
difusión, el medio ambiente
y las niñas con el fin de revisar y tomar medidas
positivas en pro de la igualdad.
Existen numerosas páginas en Internet referentes a los
derechos de las
mujeres, así como movimientos y asociaciones. Por citar
algunas de ellas,
- www.onu.org/temas/mujer/Beijing5
- www.womenaction.org/csw44/altrepspa.htm
- www.un.org/spanish/millenniumgoals
- www.itu.int/wsis
En el estado
español,
concretamente cada comunidad
autónoma, adopta las medidas pertinentes en esta materia. La
mayoría cuentan con un Plan de Igualdad
de Oportunidades entre Hombres y Mujeres que vela por el
cumplimiento en los diferentes ámbitos de la sociedad. Se
suelen renovar periódicamente por un periodo de entre 3 y
5 años. Cada uno de estos planes cuenta con una estrategia
llamada acción Positiva encaminada a contrarrestar la
discriminación histórica de los
grupos
sociales. En concreto
favorecer los derechos de las mujeres a los de los
hombres.
La segunda estrategia es el mainstreaming de
género.
Se centra en la implantación de la
transversalidad en todos los aspectos concernientes a la vida
cotidiana de las personas. En concreto, el Grupo de Especialistas
del Consejo de Europa,
Estrasburgo 1998 lo define como "la mejora, el desarrollo y la
evaluación de los procesos
políticos de modo que una perspectiva de igualdad de
género, se incorpore en todas las políticas
a todos los niveles, y en todas las etapas, por los actores
normalmente involucrados en la adopción de medidas
políticas".
Así adoptaron una serie de medidas
como:
– En la investigación: No disgregar los
datos por
sexos si no eran los resultados significativos.
– En el diseño
y la Planificación: Crear proyectos
específicos para mujeres. En todos los campos así
como en los de mayor responsabilidad. Cabe recordar que el actual
gobierno estatal
ha incorporado al 50% el número de Ministras en el equipo
de gobierno actual.
– En la Ejecución: Evitar la
transmisión de estereotipos.
– En la evaluación: Revisar
periódicamente las acciones
positivas y sus resultados.
Así se puede afirmar que la igualdad de
oportunidades requiere una doble estrategia, como es la puesta en
marcha de acciones positivas y la aplicación de una
perspectiva de género en todas las políticas y
actuaciones administrativas.
¿Y los malos tratos en
la prensa?
Según Eulàlia Lledó Cunill ,
podemos afirmar que existen una serie de sesgos habituales en la
redacción de las noticias de la
prensa que contribuyen a un análisis deformado de la
realidad. Ente ellos enumeran los siguientes:
1. Algunas noticias se dan como causa de las agresiones,
crímenes o asesinatos, algunos motivos inexactos; incluso
se incurre en contradicciones.
2. En algunas ocasiones, las contradicciones se hallan
en el titular de la noticia y su posterior
redacción.
3. A menudo se detectan contradicciones si se contrasta
una misma información sobre malos tratos en diversos
medios.
4. En algunos casos se dan noticias que son
difíciles que correspondan con la realidad.
5. Hay auténticos bailes de cifras de unos medios
a otros.
6. Hay noticias que son autenticas radiografiás
de la actitud que la
sociedad toma ante los malos tratos.
7. En algunas noticias se da carácter universal al comportamiento
masculino.
8. En algunas noticias se trata a las mujeres con una
familiaridad y cercanía impropias del lenguaje
periodístico.
9. En algunas ocasiones se utiliza el singular "la
mujer" para referirse a las mujeres en general.
10. En la prensa a menudo, hay noticias que se hacen eco
de opiniones ajenas e incluso citan textualmente otras voces, a
veces, son apologías del terrorismo
doméstico y de la violencia patriarcal.
11. En los artículos de opinión se suelen
encontrar tópicos.
Así pues, E.Lledó propone algunas
recomendaciones a la hora de formular noticias sobre la violencia
de género, como por ejemplo:
1. No presentar cada crimen, agresión, asesinato,
violación, etc. como un caso aislado, sino como un
continuum de casos y un estado de
cosas en general.
2. Remarcar que el terrorismo doméstico es un
crimen que vulnera los derechos humanos, y en que es la
víctima y no el criminal quien se ha de esconder e incluso
abandonar su hogar.
3. Remarcar que los malos tratos son un aspecto
más y no están fuera de la violencia
patriarcal.
4. Dejar de atribuir como causa primera o última
instancia, el crimen o delito como un
hecho aislado.
5. Evitar la presentación de los asesinatos o de
los malos tratos como resultado de un crimen "
pasional".
6. Una mujer por el hecho de denunciar malos tratos no
es una mujer cobarde, ni pusilánime.
7. Incidir en la desprotección legal de las
mujeres que denuncian los malos tratos o algún tipo de
violencia sexuada.
8. Hacer constar en las noticias los nombres de los
agresores.
9. Hacer constar en las noticias los nombre de las
juezas y los jueces, los y las fiscales, por ejemplo que se
encargan de los crímenes.
10. Hacer constar a las autoridades que han ido(
así como las que por el contrario, no han ido) a los
entierros de las víctimas del terrorismo
doméstico.
11. Publicar noticias sobre dinero
público utilizado en la prevención y en los medios
para la resolución de los crímenes debidos a la
violencia sexuada.
12. Incidir en la existencia de los malos tratos
psíquicos.
13. Realizar un seguimiento de las noticias y de los
datos que se dan sobre el terrorismo familiar y violencia
sexuada.
14. Publicar la opinión de personas expertas y el
testimonio de las implicadas.
15. Prestar atención a las imágenes
que acompañan a los artículos o
noticias.
Paulatinamente, vamos comprobando como los medios de
comunicación, van asimilando y aplicando las
recomendaciones anteriores, aunque no de forma permanente. Es
bastante frecuente encontrar una noticia sobre violencia de
genero centrada en el sensacionalismo y en cuya máxima
finalidad radique en captar la atención del ciudadano en
lugar de educarlo.
Así pues, seria conveniente un decálogo de
ética y
tratamiento periodístico, donde se recogieran sin
ningún tipo de fisuras, el enfoque continuo, veraz, y
crítico sobre la violencia de género y su
contenido. Con el fin de educar a la población y erradicar los maltratos como
forma autoritaria de negar la libertad femenina.
Actualmente es demostrable como un problema social es el
sexismo, donde por razones de sexo una
persona puede
considerarse inferior a otra. En nuestra sociedad
tradicionalmente siempre ha sido la mujer y una de las formas en
las que el sexismo se encuentra latente es con el lenguaje, o lo
que se denomina sexismo lingüístico, donde es
normal que el papel de la mujer quede relegado a un segundo plano
o directamente se le anule.
La sociedad actual está en un proceso de cambio donde
la mujer está escalando posiciones que antiguamente se le
tenían vetadas. Hoy en día el porcentaje de mujeres
en la universidad ya es sensiblemente mayor que el de los
hombres. Cada vez más, las mujeres salen al mercado
laboral y
ocupan más puestos directivos.
A pesar de todo esto el sexismo lingüístico
parece una asignatura pendiente en muchos escritos oficiales, en
artículos de periódico, en libros de
texto o en la
comunicación oral cotidiana. En este
contexto el lenguaje se convierte en un importante instrumento
para contribuir a una sociedad más igualitaria.
Según Lourdes Pascual Gargallo: La lengua cuenta
con un gran abanico de recursos para
hacer un uso no sexista del lenguaje, brevemente se pueden
resumir en lo siguiente:
1. Uso de colectivos y genéricos, tanto
referidos a personas como a organismos.
El masculino se suele utilizar en sentido
genérico, quedando así el femenino relegado
normalmente en un sentido específico y a su vez con un
sentido restrictivo, por lo el uso que estamos haciendo del
lenguaje oculta a la mujer.
Por ejemplo hemos de intentar utilizar genéricos,
así que en lugar de hablar de:
–Los estudios sobre el hombre; deberíamos
hablar de: Los estudios sobre el ser humano.
También debemos hacer uso de los genéricos
como por ejemplo, en lugar de: el alumno y la alumna,
hablar del: alumnado.
2. Uso de dobles formas, preferentemente de manera
coordinada.
Como normalmente el masculino precede al femenino, es
interesante de vez en cuando dentro del texto hacer algún
cambio y preceder el femenino al masculino.
En este caso, en el interior del texto, la
concordancia de los diferentes elementos se ha de hacer en
masculino plural.
La barra inclinada sólo debe
emplearse en el caso de palabras aisladas fuera del texto,
básicamente en formularios.
3. En todo caso, se recomienda evitar el uso del
masculino genérico y de la palabra hombre en sentido
genérico.
4. Además, tener en cuenta la posibilidad de
usar otros recursos: construcciones más neutras, como
por ejemplo, en lugar de los niños,
la infancia.
Aposiciones explicativas, omisión del determinante
por ejemplo, en lugar de: El estudio fue realizado por los
profesores de la universidad. Omitir el determinante y dejarlo
así: El estudio fue realizado por profesores de la
universidad. Determinantes sin marca de
género, pasiva refleja, oraciones impersonales y formas no
personales del verbo.
5. Se ha de procurar solucionar correctamente los
problemas de
concordancia de género.
6. Se han de emplear correctamente las
fórmulas de tratamiento.
7. Han de evitarse siempre que sea posible las
disimetrías en el discurso, los
duales aparentes y los vacíos
léxicos.
Como en el caso de señor y señora,
mientras señor es una forma de cortesía,
señora puede significar también esposa,
(señora de Agut), siendo preferible utilizar el nombre de
la persona, por ejemplo en lugar de señora de Agut,
utilizar Señora Dolores Santos.
8. Se ha de emplear correctamente el género en
relación con las profesiones, cargos, oficios,
títulos académicos y referencias
bibliográficas.
Actualmente mucha profesiones que tradicionalmente
habían sido exclusivamente masculinas, están siendo
también ejercidas por mujeres. Normalmente basta con
añadir una a para feminizar el término, como en
Arquitecto/ Arquitecta. Otras veces son términos
invariables y es el artículo el encargado de
diferenciar.
El lenguaje es nuestra más importante herramienta
de comunicación, y a pesar de tener un uso tan beneficioso
también se convierte en una de las principales armas como
mantenedoras de las desigualdades entre mujeres y hombres. Es lo
que se llama el sexismo lingüístico donde el
tratamiento de la mujer es discriminatorio bien por el
término bien por la forma de construir la frase. Por eso
es importante hacer uso de nuestro rico sistema
lingüístico para hacer frente a la discriminación sexual.
Hacer uso de un lenguaje no sexista no es un tema
solamente a lingüístico, cuando se ha intento de
cambiar una serie de normas que tienen
un trasfondo cultural y social donde el hombre mantiene una
supremacía de poder sobre la mujer, quedando esta relegada
a un segundo plano o completamente anulada, lo que se está
haciendo es intentar cambiar toda una sociedad y sus
esterotipos.
Sexismo social y sexismo
lingüistico en los medios de comunicación
escritos
La prensa hoy en día, así como cualquiera
de los mass media, es un importante medio de
información, y ésta es un derecho fundamental de
las personas y reconocida en nuestras leyes. Pero
todavía hoy en día ésta sigue criterios
ideológicos o pautas culturales arraigadas en la sociedad,
como ahora el sexismo. Hay que tener en cuenta el aspecto
educativo y socializador de la prensa y por ello es preciso
evitar el sexismo social y el sexismo lingüístico,
relacionado con el tratamiento y las imágenes de las
mujeres en los medios de comunicación escritos, estamos
ante lo que Blanca Muñoz denomina: La
institucionalización de la ideología, que "se organiza a través
de la creación planificada de técnicas
de persuasión psicológica que proponen modelos de rol
masculino-femenino."
Los medios de comunicación
social cumplen una serie de funciones, las
clásicas: informar, enseñar y divertir y otras
clasificaciones interesantes de añadir en este contexto,
como: psicológica, política, social,
informadora, interpretadota, de entretenimiento, de
transmisión cultural, de comunicación intelectual,
información, orientación, presión y
expresión de escala de
valores.
Además de esto es importante destacar la
función social, que es la manera de interpretar la
realidad, que mayoritariamente se centra en presentar unos
modelos femeninos que no se ajustan a la realidad. Por ello hay
que admitir que tristemente que no se cumplen las funciones que
reclama la sociedad. Presentando modelos femeninos irreales se
influye sobre los grupos sociales
consumidores de prensa y se crea una transmisión
cultural errónea al crear unos estereotipos de
género. Y aunque actualmente la mujer ha evolucionado
mucho, alcanzando puestos directivos en periódicos, o
jefaturas de redacción, etc. Siendo este tipo de mujeres
las que se deberían de reflejar en los medios impresos.
Pero este tipo de cambios no se han visto reflejados en los
medios de comunicación de masas, a pesar de que en el
Consejo de Europa, desde el Comité Director sobre los
medios de comunicación de masas, adoptó hace ya
veinte años una serie de recomendaciones sobre los medios
de comunicación y la igualdad a todos los estados
miembros, concretamente sobre tres puntos:
1) Informar a quienes ostentan la responsabilidad de
los medios sobre la necesidad de promover la
igualdad.
2) Favorecer la investigación sobre el impacto
y la influencia de los programas, bajo
el ángulo de los prejuicios ligados a los estereotipos
culturales y sexistas.
3) Promocionar programas de acción positiva
que permitan aumentar el número de mujeres en los puestos
de responsabilidad y toma de
decisiones en los medios de
comunicación.
Veinte años después estas recomendaciones
no parece que hayan tenido mucha repercusión, ya que el
estado de la mujer en muchos aspectos y concretamente en el mundo
de la
comunicación escrita no ha mejorado mucho. Como
demuestran diversas investigaciones
hechas en periódicos de tirado nacional muy pocas son las
mujeres que ocupan algún alto cargo.
Además en cuanto al tipo de información
que es tratada por mujeres denota también un alto grado de
sexismo cuando se puede comprobar como en algunas secciones que
pueden parecer de menor importancia y son: "Educación,
Cultura y Sociedad". Mientras que otras secciones como ahora:
"Política, economía y deportes" se adjudican a
hombres.
Esta diferenciación se suele hacer por la
creencia de que los dos grupos de información interesan
más a mujeres el primero y a hombres el segundo, aunque
esto no es una constante en todas la prensa escrita, pero esta
clara distinción que se observa en algunos
periódicos hace latente el fuerte sexismo al que
está atada la prensa.
También en el trato dado a la mujer cuando es
tratada en una noticia, denota que no se considera de igual forma
a una mujer que a un hombre, ya que cuando en la prensa la
mayoría de titulares de las noticias pertenecen a hombres
en casi un 70%, la aparición de mujeres se ver relegada
mayoritariamente a actos sociales, e incluso cuando se
está hablando de una mujer relacionado con algún
tema de política raramente no se hace una alusión a
su indumentaria o se destaca la presencia de ésta en un
mundo dominado por hombres.
El otro gran lugar en el que la mujer está
relegada es en el mundo deportivo. En el volumen de
noticias deportivas al día, incluso hoy en día solo
se hace alusión a las mujeres o competiciones femeninas
cuando se trata de competiciones de élite, aunque el trato
dado a estas noticias prácticamente nunca recibe el mismo
trato que la misma competición cuando es masculina, que
siempre viene acompañada de una mayor
profundización.
En el terreno de la iconografía publicitaria
también está dominado por el sistema de
estereotipos, según el estudio denominado, "Gènere
i informació": las mujeres representan el 8’8%
frente al 66’68% de hombres y un 16’6% de
imágenes mixtas. Donde mayoritariamente el trato dado
a la mujer continua la dinámica de buscar figuras jóvenes y
bonitas agradables a los ojos masculinos quedando
prácticamente solo el uso del estereotipo de chica pin-up
o mujer objeto. Incluso en los pies de foto la figura de la mujer
suele salir bastante menospreciada o anulada, como en el caso de
un pie de foto donde aparece un grupo de alumnos y alumnas, y
haciendo uso del genérico masculino: " los estudiantes
universitarios" quedando éstas anuladas
Finalmente el uso del lenguaje periodístico la
mujer en la mayoría de casos suele tener un trato
diferente o cuente con un uso más que simbólico.
Hay que luchar para que la mujer tenga un trato igualitario, y
aunque diversos lingüistas creen que primero ha de cambiar
la sociedad, y con este cambio se modificará el lenguaje,
mejor sería trabajar duro y no excluir a las mujeres en
las noticias, o derrumbar muchos estereotipos. Así que hay
que luchar para que la diferencia sexual que existe en nuestra
sociedad también esté patente en la
información del día a día.
Según los autores Debbie y Richard Jonson: la
institución escolar es un lugar donde se desarrollan
actividades cotidianas y por lo tanto, es un lugar donde se
practica y elabora de forma activa la identidad sexual. Como
también asegura Tomaz Tadeo da Silva: "dependiendo de
dónde estoy socialmente, conozco ciertas cosas y no
otras" denotando que la cuestión radica en que no es
un problema de acceso sino de perspectiva. Carlos Lomas y
Amparo
Tusón, definen el género como un conjunto de
fenómenos sociales, culturales y psicológicos
asociados al sexo de las personas, donde el género es un
proceso social que transforma una diferencia
biológicamente determinada(macho/ hembra) en una
distinción cultural (hombre/ mujer).
Con todo esto las teorías
feministas tienen un doble propósito, como guías
para la comprensión de la desigualdad de género y
como guías para la acción. En este ámbito
Acker habla de tres grandes grupos feministas occidentales
contemporáneos, que son:
1) El feminismo
liberal, donde se intenta equiparar a la mujer al
hombre.
2) El socialista, que se centra en demostrar
las diferencias entre las mujeres trabajadoras y las mujeres de
la clase
media.
3) El radical, que pretende "revaluar" lo
femenino, con la finalidad de eliminar el dominio
masculino.
4) El feminismo posmoderno, que pretende
recuperar el poder y la identidad de los grupos
subordinados.
Enlazando con este feminismo posmoderno se encuentra el
feminismo dialógico, que se posiciona desde la
teoría
crítica, luchando por la igualdad
incluyendo en estas a las mujeres que tradicionalmente se han
visto excluidas de los movimientos feministas, para que exista
voz de aquellas mujeres con poca formación
académica y poca relevancia social.
Como Ana González y Carlos Lomas afirman: hay
que compensar las asimetrías de género para evitar
que la desigualdad sociocultural que se construye a partir de las
diferencias sexuales ayude a la opresión y la
discriminación de las personas. Y señalan la
escuela como reflejo de la sociedad. Así pues la escuela
está planteada como un sistema de enseñanza mixta, esto hace que no se
enseñe desde la igualdad, ya que las mujeres parten de una
situación muy desventajosa.
En la actualidad el estatus social de las mujeres
está en pleno cambio, aunque continúan arrastrando
el lastre de épocas anteriores donde los trabajos
doméstico les pertenecían, como demuestra las
estadísticas del INE, las mujeres dedican
el triple del tiempo que los
hombres a las tareas domésticas, aunque en mi
valoración esto podría ser aún mayor. La
mujer de hoy trabaja fuera y además dentro de caso, pero
esto no es lo más grave, incluso en la gran mayoría
de casos cobra menos, hasta 400 euros menos que los hombres.
Junto a esta conquista de los espacios externos al hogar, y con
la posibilidad de no depender de nadie más que de ellas
mismas. La llamada "violencia de género" ha saltado a la
palestra, ahora más que nunca este tipo de violencia se
oye, las mujeres ya no tienen porque callarse malos tratos porque
ya no dependen de sus esposos.
Frente a esto una de las más rancias instituciones
religiosas y culturales: La Iglesia
católica ha dado la voz de alarma, según el
boletín de la Conferencia Episcopal del 2 de febrero de
2004 , la violencia de género es consecuencia de la
revolución
sexual de los sesenta. Aunque no han contado con el respaldo de
las instituciones políticas, esto denota que una gran
parte de la sociedad no ha asimilado la situación de la
mujer, que está luchando por crear un nuevo tipo de
cultura en la que hombre y mujer encajen igualmente sin que las
condiciones de género biológico limiten el
desarrollo de uno y otros y tampoco la procedencia social y la
etnicidad.
Aunque estos planteamientos están ligados a las
últimas corrientes pedagógicas, el caso del "velo"
prohibido en Francia nos
hace dar un retroceso donde nuevamente el golpe más duro
lo recibe la niña, que está inmersa en un mundo
cultural gobernado por mentes masculinas, y escolarizada en
escuelas donde se arrastra un pesado lastre de preponderancia de
normas y esquemas masculinos, frente a los que ha de luchar
continuamente, ahora su diferencia cultural la vuelve a poner en
el punto de mira de todos, porque aunque esa niña ahora
lleve velo o no, no dejará de ser musulmana y lo que no se
puede pretender es hacerla igual a las demás niñas
al no llevarlo lo que se debería hacer es enseñar a
sus compañeros de colegio cual es su cultura, y desde
el
conocimiento hacer ver a los demás niños que
esa niña es una más, pero aceptando sus diferencias
culturales.
Frente a todo esto se acuña el nombre de "Escuela
Coeducativo" frente a "Escuela Mixta". Donde el modelo falso
de igualdad que se ha querido dar con la escuela mixta no sirve y
hay que afrontar una escuela nueva donde ni el género
sexual, ni la procedencia social, ni la etnia tengan
que ser un lastre. Aquí se reclama al colectivo docente
que tiene que luchar mucho por conseguir mejorar todo esto,
aunque también habría que hacer entender a toda una
sociedad que la mujer actual no tiene porque acoplarse a la
cultura establecida como está en el caso de la mujer que
trabaja dentro y fuera de casa, sino que la propia cultura o
sociedad ha de evolucionar hacia un mundo donde hombres y mujeres
tengan igual cabida.
Estos contenidos son Copyleft bajo
una
licencia de Creative
Commons. Pueden ser
distribuidos o reproducidos, mencionando su autor, siempre que no
sea para un uso económico o comercial. No se pueden
alterar o transformar, para generar unos
nuevos.
Este artículo es obra original de
Francesc Agut Betoret y su publicación inicial
procede del II Congreso Online del Observatorio para la
CiberSociedad: http://www.cibersociedad.net/congres2004/index_es.html"
Francesc Agut Betoret