Evaluación de desempeño de estudiantes de salud, usando el modelo de calidad de cuidado percibido por la comunidad
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RESUMEN: Se diseñó y se
probó una metodología de evaluación
del desempeño de estudiantes de salud, realizada por la
comunidad,
tomando como indicador la satisfacción del usuario.
Participaron 50 estudiantes de medicina y 94
familias de dos áreas de Cali, Colombia.
Según criterios de las familias, la calidad de la
atención brindada por los estudiantes
está relacionada con las variables
servicios
mínimos, conocimientos sobre el tema, comunicación e información brindada a los usuarios y
liderazgo para
mejorar la prestación. La comunidad participó en el
diseño
de la metodología de evaluación. Se utilizaron entrevistas,
grupos
focales, conversaciones y un cuestionario
semiestructurado. Se analizó la validez del instrumento y
la consistencia interna mediante el estadístico Kappa y el
coeficiente Kuder Richardson. Se encontró que hay dos
lógicas en la evaluación de calidad: la de los
proveedores,
cuyo énfasis está en el cumplimiento de normas técnicas,
y la de los usuarios, que enfatiza en las relaciones
proveedor-usuarios. Los programas
académicos están fundamentados en la primera, pero
deberían considerar ambos enfoques.
Palabras claves: Calidad de atención.
Evaluación. Desempeño. Satisfacción del
usuario.
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La participación permanente de la comunidad en la
evaluación de los estudiantes es clave para ajustar los
programas de formación a las necesidades y expectativas
sociales, y es un instrumento útil para actualizar los
programas docente-asistenciales y de formación de docentes,
estudiantes y comunidad. Aunque la literatura informa
diferencias entre desempeño y competencia, en
muchos estudios no parece existir una clara distinción
entre los métodos
utilizados para evaluar uno u otro concepto.
Desempeño es comprendido como el resultado de la
combinación de muchos factores, que hacen que el
estudiante actúe en una forma específica; y
competencia es solamente uno de esos factores. Chandler y
Chapman1 enfatizan desempeño "como el efecto de
lo cual, competencia, es la causa parcial, o explica la
competencia a la luz de los
desempeños que los ejemplifican". Sin embargo, los
estudios que buscan esta relación causal han demostrado
que otras variables podrían tener una mayor influencia en
el desempeño y no se puede asegurar que una competencia
dada, produzca un desempeño deseable. Otros autores han
proporcionado importantes claves para aclarar la
definición y relación de los dos conceptos.
Usherwood et al.2 se refiere a competencia "como lo
que una persona puede
hacer" y desempeño "como lo que una persona hace en la
práctica".
Kisil & Chaves3 conciben la
evaluación como un proceso
permanente para aumentar la pertinencia, eficiencia y
eficacia de
los servicios y las actividades del personal de la
salud, creando una estrecha relación entre ellos, con una
participación genuina de las comunidades en la toma de
decisiones relacionadas con la salud y con la
implementación de estas decisiones. Igualmente, la
evaluación ha sido considerada como uno de los mecanismos
de participación de la comunidad en la actividad
académica.
Reckase4 señaló que la
evaluación del desempeño es uno de los temas de
moda en la
actividad educativa, especialmente ahora cuando han venido
ocurriendo grandes cambios en el plan de estudios
de diferentes profesiones. Broadfoot5 ha argumentado
que la evaluación está en la agenda porque el
cambio
está en la agenda; existe una presión
cada vez mayor en muchos países para que el sistema
educativo introduzca cambios y se considera que la
evaluación es la clave para lograr estos
cambios.
Métodos de medición. Existen diferentes métodos
para evaluar el desempeño de los estudiantes, los cuales
pueden categorizarse como cuantitativos y cualitativos. Los
métodos de evaluación
de desempeño incluyen ambas categorías, pero
los datos
cualitativos merecen mayor atención, por el tipo de
información que aportan y el análisis que suministran6. Sin
embargo, los dos enfoques deben ser complementarios.
Según Gonnella et al.7, la
evaluación de desempeño se adoptó como el
nuevo paradigma del
conocimiento y
por tanto, el Examen Clínico Estructurado Observado
(OSCE), el Paciente Estandarizado (SP) y el Encuentro
Clínico Simulado (SCE), se convirtieron en siglas
sobresalientes durante los años 80 y 90, reemplazando el
Problema del Manejo del Paciente (PMP), tan popular en 1960 y
1970.
Tanto OSCE como SCE tienen la ventaja de presentar un
examen con una serie de estímulos realistas y hacen
factible probar un gran número de candidatos en una forma
objetiva con respecto al material estandarizado. Sin embargo, al
igual que otros instrumentos, cada uno es limitado en los tipos
de tareas, problemas o
habilidades que pueden evaluarse en un formato
seleccionado.
La pregunta relevante para todas las pruebas es
¿cómo sacar conclusiones sobre la competencia de un
individuo,
tomando como base sus respuestas a una prueba particular de
desempeño?
Swanson et al.8 mencionaron que ni la prueba
tradicional, ni las evaluaciones basadas en el desempeño
son buenas por sí solas, sino que requieren una
combinación de métodos. La mejor opción para
la selección
y aplicación del método
debe depender de la habilidad que se va a evaluar y del contexto
donde se desarrolla la evaluación.
El cuestionario se considera herramienta importante para
reunir información para evaluar el desempeño de los
estudiantes, por parte de evaluadores externos, como es el caso
de la comunidad. Sullivan et al.9 encontró que
los pacientes casi analfabetas y con un bajo nivel de educación y bajos
ingresos, al
igual que aquellos que informan una función
visual deficiente, parecen ser los más necesitados del
método de recolección
de datos con ayuda de un entrevistador.
La técnica de sesiones de grupo permite
la recolección de información sobre todo
cualitativa. Carey et al.10 señaló la
necesidad de desarrollar métodos para analizar los datos
de las sesiones de grupo, en forma tal que se considere el
impacto del contexto del grupo en el análisis.
Un aspecto importante que pocas veces se considera en la
evaluación de los estudiantes es su capacidad para
afrontar situaciones estresantes. Wolf11
encontró que la socialización profesional de los
médicos ocurre en un ambiente que
se ha caracterizado como rígido y
deshumanizante.
Desde la perspectiva del estudiante y de los programas
de enseñanza basados en la comunidad, los
estudiantes por lo general se evalúan más en los
aspectos técnicos de su competencia o desempeño en
el hospital, que en el ambiente de la comunidad. Algunas
explicaciones podrían ser la importancia dada a la
atención curativa, la falta de métodos factibles y
efectivos para realizar la evaluación cualitativa y las
limitaciones de tiempo.
Este estudio tuvo como objetivo
diseñar y probar una metodología de
evaluación de desempeño de estudiantes, en
programas de capacitación en salud basados en la
comunidad, mediante un proceso participativo que involucró
la academia, los servicios de salud y la comunidad y tomando como
indicador la satisfacción de los usuarios.
Se buscó evaluar la correlación entre los
servicios brindados por estudiantes de salud en el ambiente
comunitario y las expectativas de los usuarios con respecto a la
calidad de la atención, así como la confiabilidad y
precisión de los instrumentos, desde el punto de vista de
la comunidad.
Se evaluó el desempeño de estudiantes de
medicina de la Facultad de Salud de la Universidad del Valle, en
Cali, Colombia, durante su participación en la
"Práctica comunitaria", en áreas de esta ciudad
donde se desarrolla el Proyecto Una
Nueva Iniciativa para la formación de profesionales de la
salud, en unión con la comunidad (UNI). La misión de
la práctica es brindar a los estudiantes oportunidades
para que apliquen sus conocimientos y experiencias en forma
interdisciplinaria, desarrollen sensibilización ante los
problemas comunitarios, se adapten a diversas situaciones y
contextos, involucrando los servicios de salud y las
comunidades.
Por su carácter, la evaluación propuesta
fue de corte cualitativo. Por tanto, se orientó más
a medir la actitud de los
estudiantes hacia los problemas de salud de la comunidad, que a
los casos clínicos individuales, y más al
desempeño del estudiante durante la práctica
interdisciplinaria, que a la atención
unidisciplinaria.
El interés
final es mejorar en forma permanente la calidad de la
atención, formando profesionales de salud competentes y
comprometidos con la salud de la población y habilitando a las comunidades
para que controlen el sistema de
prestación de servicios, y con esto, dar el paso inicial
para establecer un sistema comunitario de aseguramiento de la
calidad de los servicios de salud y de la formación
profesional.
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