Rendimiento deportivo. Conceptos – Monografias.com
Rendimiento deportivo. Conceptos
El concepto de rendimiento deportivo deriva de
la palabra paformer, adoptada del inglés y que
significa cumplir, ejecutar. A su vez, este
término viene de parformance, que en
francés antiguo significaba cumplimiento. De esta
manera, podemos definir el rendimiento deportivo como
una acción motriz, cuyas reglas fija la
institución deportiva, que permite a los sujetos expresar
sus potencialidades físicas y mentales. (Instituto
Europeo Campus Stellae, Apuntes de cátedra,
2012).
Por su parte Martin lo define como "el resultado de
una actividad deportiva que, especialmente dentro del deporte de
competición, cristaliza en una magnitud otorgada a dicha
actividad motriz según reglas previamente
establecidas" (Martin, 2001:26).
Existen varias teorías que intentan dar una
explicación del rendimiento deportivo:
Enfoque bioenergético del rendimiento
deportivo. Orientado a interpretar las
características energéticas (cantidad de
energía, modificaciones en función de la
duración, intensidad y forma de ejercicio)Teoría de la concentración
muscular. Orientada a comprender los mecanismos
íntimos de la contracción muscular en
relación con los metabolismos
energéticos.Teoría del sistema cardiovascular y del
entrenamiento deportivo. Tanto la función
circulatoria como la función ventilatoria influyen en
el rendimiento deportivo.Teoría de los efectos de la temperatura y
de la altitud. Los factores ambientales que pueden
modificar el aporte de oxígeno y/o alterar el
metabolismo energético. Valorar la aclimatación
al calor o a la altitud, etc.Teoría del entrenamiento. El
entrenamiento (deportivo) se define como: "La
preparación de un animal, de una persona o de un
equipo a cualquier rendimiento mediante ejercicios
apropiados" (Petit Robert, 1993) referenciado en
Instituto Europeo Campus Stellae, Apuntes de cátedra
(2012). Esta definición comprende los tres aspectos
esenciales del entrenamiento: la noción de
rendimiento en el sentido genérico del término,
la de especificidad de los ejercicios, y la noción de
planificación.
Las diferentes teorías se enfocan en el examen de
la acción motriz y habitualmente, sobre el análisis
del momento de la competición, sobre todo en la "alta
competencia". Pero, debemos advertir que existen otros
momentos o situaciones dentro de la actividad deportiva, en el
cual es posible delimitar variaciones en el rendimiento deportivo
que afecten o apoyen los resultados del practicante.
El estado de entrenamiento de un deportista se
expresa en el mejorado nivel de su rendimiento, el cual es
influido por el entrenamiento, la competencia y otras
ayudas.
Si tomamos el rendimiento de un deportista de elite,
veremos que sus logros dependerán de la obtención
del máximo posible de sus capacidades deportivas. La
incorporación de herramientas que maximicen esos
resultados dependerá, no solo de la performance en el
propio evento competitivo, sino del trabajo que realice durante
todo el proceso deportivo.
Desde la psicología del deporte se pretende
delimitar inicialmente un espacio conceptual específico
para la mejora del rendimiento deportivo. Para ello, La
Psicología del Rendimiento Deportivo propone un
ámbito que contenga lo que está relacionado
directamente con las posibles variaciones del rendimiento de la
tarea deportiva.
Si aceptamos que la Psicología estudia la
conducta humana, la Psicología del Rendimiento
Deportivo debe estudiar la conducta que desarrolla el
deportista.
El objeto de estudio de la Psicología del
Rendimiento Deportivo deber ser el deportista cuando hace
deporte, y no el deportista que hace deporte. (Instituto
Europeo Campus Stellae, Apuntes de cátedra,
2012).
Para comprender de qué manera la PRD
(Psicología del Rendimiento Deportivo), puede
favorecer el rendimiento deportivo en deportistas de elite, es
conveniente repasar algunos de los conceptos más
relevantes que definen los límites de su espacio de
trabajo. Así tenemos:
La conducta deportiva:
La PRD nos permite estudiar conductas y
además, los comportamientos de todos los integrantes del
universo del deporte en el momento de su actividad
deportiva.
Existen conductas fuera de la actividad deportiva que
pueden intervenir en el rendimiento deportivo, por ello, es
importante determinar cuáles son las conductas en las que
el profesional de la PRD deberá trabajar para
realizar una intervención efectiva en rendimiento
deportivo.
El rendimiento.
La función del profesional de la PRD en
este concepto, consiste en valorar la mejora del rendimiento en
relación con los objetivos marcados o según las
posibilidades del deportista en cada momento. Entendiendo que el
rendimiento será inherente a la capacidad de
ejecución de una acción y el resultado real de la
acción.
La competición.
Para delimitar el campo de aplicación de la
PRD, debemos diferenciar el concepto competición,
en términos de "ser capaz de competir" y no en
términos de confrontación.
A la hora de realizar una intervención en el
rendimiento deportivo, el profesional de la PRD debe
orientarse sobre la interpretación de "ser
competente", y no en el de "querer ganar". La
distinción entre ambos términos es importante
puesto que no será lo mismo si actuamos para ganar como
único objetivo o, si sólo queremos mejorar nuestra
capacidad de respuesta ante una situación
dificultosa.
La condición
salud/enfermedad.
El trabajo sobre esta condición determina
presentarlos como expresiones contrapuestas, dado que la
intervención del profesional de la PRD,
dependerá del punto de vista profesional que determine la
situación específica. Mejorar el rendimiento o
ayudar a pasar una enfermedad producto de realizar
deporte.
La multidisciplinariedad.
Para mejorar el rendimiento deportivo, sobre todo en el
deporte de alto rendimiento, resulta preciso integrar los
diferentes conocimientos derivados de cada una de las ciencias
del deporte para conseguir un objetivo común.
La Autonomía.
Desde la PRD, el concepto de deportista
autónomo, permite el desarrollo de la capacidad de
autoconocimiento y de toma de decisiones. Esta noción es
importante porque aplica sobre las capacidades necesarias para el
aprendizaje de las habilidades.
El concepto
Eficacia/eficiencia.
El trabajo del profesional de la PRD consiste
en programa estrategias o acciones de manera eficaz consiguiendo
alcanzar los objetivos con la mayor rapidez y de la mejor manera.
Esta característica, resulta esencial sobre el trabajo en
el plano del rendimiento deportivo.
Según Matvéiev, referenciado por Instituto
Europeo Campus Stellae, Apuntes de cátedra (2012), el
nivel más alto de rendimiento que un deportista puede
alcanzar de acuerdo a su nivel de entrenamiento, en cualquier
nuevo período de competición, se define como
forma deportiva.
La información objetiva sobre el avance del
desarrollo de los factores individuales que determinan el
rendimiento se obtiene mediante pruebas especiales llevadas a
cabo mediante test pedagógico-deportivos
específicos, tests psicológicos, pruebas de la
medicina deportiva y exámenes bioquímicos y
biomecánicos. Estos tests deben llevarse a cabo
periódicamente, en cortos intervalos y del modo más
amplio posible.
Se los debe evaluar de modo rápido y completo y
deben relacionarse los resultados de los datos sobre el
análisis del entrenamiento, e interpretárselos
junto con los datos obtenidos de las habituales observaciones
del/de la entrenador/a.
La comparación entre los resultados de estas
pruebas y los rendimientos logrados bajo condiciones
competitivas, permite sacar conclusiones sobre la forma en que
estos factores del rendimiento se relacionan durante la
competencia.
Sobre esto, Singer y Janelle (1999) referido en Lorenzo
y Calleja (2010), dicen que "en el deporte, la
competición sirve como mecanismo cuantitativo para
reconocer la excelencia".
En el caso de los deportistas de elite, para
poder proyectar un rendimiento competitivo altamente
especializado, es necesario orientar el entrenamiento hacia el
desarrollo de capacidades y destrezas individuales, a fin de
establecer nuevas exigencias de rendimiento tendientes a alcanzar
una mejor producción en la próxima
competición.
Debemos recordar, que el perfeccionamiento de los
factores individuales del rendimiento del deportista, no
necesariamente deben vincularse con el mejoramiento continuo de
los resultados de las competencias. Por ello es importante, en la
preparación para las competencias se deberán
restablecer los vínculos en un nivel superior para que
guarden relación con las bases mejoradas.
Este proceso de transformación conducirá a
mejores resultados en la competencia, organizado a través
de una forma constante de consolidación entre rendimiento
deportivo y los factores individuales de rendimiento podrá
cambiar en función de las decisiones que se adopten sobre
las medidas metodológicas del entrenamiento.
El rendimiento deportivo, se encuentra ligado
al éxito, por ello, todo deportista que se presenta a una
competición desea salir vencedor o, por lo menos, ocupar
un buen lugar en comparación con sus competidores. Esto
sólo es posible si los rendimientos de todos los
participantes en la competición se valoran por el mismo
nivel, de forma que pueda establecerse una clasificación
de acuerdo con los rendimientos.
Vemos que independientemente de la situación en
la competición o incluso durante el período de
entrenamiento, al deportista le interesa que se estimen sus
rendimientos. El deportista desea conocer qué mejoras ha
conseguido durante el entrenamiento, que nivel posee comparado
con otros deportistas de su nivel, y en qué aspectos
necesita mejorar.
Esta forma de análisis del rendimiento se
convierte en una parte importante del proceso de entrenamiento,
con repercusiones en los adelantos en el aprendizaje, la
situación motivadora, la disposición para el
esfuerzo, la satisfacción y la confianza en sí
mismo del atleta.
En la alta competencia, la valoración de
los rendimientos deportivos sobre la base de escalas de medidas,
desempeña un papel fundamental debido a que proporciona un
estado de las capacidades físicas del
deportista.
Como nos plantean Lorenzo y Calleja (2010), es evidente
que las capacidades físicas que han permitido a una
persona alcanzar un alto nivel deportivo permanecen durante
algunos años, sin embargo, no todos los deportistas ni
todas las deportistas consiguen mantener el rendimiento
deportivo.
En relación a lo anterior, vemos que en el mundo
del deporte son necesarias regular las emociones para poder
adquirir un nivel elevado de maestría.
Es evidente que el procesamiento de la
información, la atención, la toma de
decisión e incluso la ejecución, se ven afectadas
por los distintos niveles de ansiedad, motivación,
alegría y otras emociones a lo largo de la
competición. "Los deportistas toman decisiones
mientras se encuentran físicamente y emocionalmente
excitados… Cuando el stress aparece, los/as deportistas
modifican sus Modus Operandi" (Tenenbaum, 2003, p. 207,
referenciado por Lorenzo y Calleja, 2010).
En el área deportiva y muy
específicamente en los deportistas de elite, el papel del
Psicólogo del Rendimiento Deportivo, contribuye a la
obtención de un manejo, desarrollo y avance del proceso
que tiene por objetivo la mejora del deportista a través
de lograr una excelencia en su rendimiento
deportivo.
Bibliografía.
Dietrich Martin, D. (2001). Manual de metodología
del Entrenamiento Deportivo. Editorial Paidotribo.
Barcelona.
Instituto Europeo Campus Stellae. Apuntes de
cátedra. (2012). Evaluación de los procesos
psicológicos básicos. Módulo
V.
Lorenzo, A., y Calleja, J. (2010). Factores
condicionantes del desarrollo deportivo. Bilbao.
Diputación Foral de Vizcaya.
Autor:
Lic. Leonardo Alberto*
*Licenciado en Actividades físicas y deportes por
la Universidad de Flores. Argentina.