Monografias.com > Política
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

Constitución del municipio Banes y gobiernos locales (Cuba)




Enviado por Yurisay Pérez Nakao



    Constitución del municipio
    Banes y gobiernos locales

    La penetración imperialista y su expansión
    monopolista propiciaron un vínculo más directo de
    Banes con el mercado de Estados Unidos y dejaron en un segundo
    plano las relaciones comerciales con las diferentes regiones de
    Cuba, razón por la cual en la formación y
    evolución del municipio se evidencia una marcada
    influencia norteamericana.

    A raíz de esa colonización de la
    United Fruit Company, Banes fue dividido en diferentes
    barrios: de un lado la ciudad originalmente fundada, que
    constituía lo que es hoy el centro histórico,
    compuesto por cuatro calles y dos plazas; en las que se
    encontraba el comercio, algunas fábricas, las residencias
    de la "oligarquía terrateniente local", clases medias,
    intelectuales y al margen los barrios populares. Al este el
    "barrio americano"[1], este barrio y la
    población cubana original estaban separados por el puente
    sobre el río Banes. Al sureste el barrio de La
    Güira[2]y el barrio
    Amarillo[3]

    De esta manera se ponía en práctica la
    modernización "a la americana", que no se limitó a
    las transformaciones en los espacios públicos, el
    establecimiento de nuevos cánones constructivos y
    arquitectónicos, o a la introducción de nuevos
    hábitos, desprovistos de mensajes políticos. Por el
    contrario, constituyó una pieza central de la
    "ideología del progreso" con la cual los norteamericanos
    justificaron y legitimaron su presencia en la Isla y de manera
    particular en esta localidad.

    La presencia de dicha Compañía y el
    desarrollo económico que evidenciaba, propició que
    el barrio de Banes fuera igualando e incluso superando al
    Término municipal de Gibara, sin embargo para todos los
    trámites legales dependían de él e incluso
    desde allí eran nombrados el alcalde y juez de barrio, el
    administrador de aduana y todos los funcionarios
    públicos.

    Las relaciones que la United mantuvo con el
    Ayuntamiento de Gibara, primer organismo municipal con el cual
    tuvo que relacionarse, no fueron las mejores. Las fricciones
    comenzaron desde muy temprano, provocadas por diferencias de
    criterios en cuanto al monto de los impuestos que la
    UFCo debía pagar al municipio. El conflicto
    inicial solo pudo ser resuelto mediante un juicio sentencioso –
    administrativo, cuyos resultados agriaron profundamente las
    relaciones entre ambas entidades.

    En 1903, recién concluida la
    reconstrucción de Banes, los principales vecinos de la
    localidad, bajo la iniciativa de los grupos fundadores y
    poseedores originales, elevaron una moción firmada por
    más de mil vecinos "en su mayoría contribuyentes
    por diversos conceptos", en la cual solicitaban la
    segregación del distrito de Banes del municipio de Gibara,
    alegando en su favor que representaba la tercera parte de su
    territorio, y más de la mitad de su población,
    así como aportaba la mayor parte de las contribuciones al
    presupuesto de aquel municipio, sin recibir ninguno de sus
    beneficios.[4] Acciones que contaron con todo el
    apoyo de la United, que recurrió al gobierno
    central y movilizó todas sus influencias para presionar
    desde arriba, la aprobación de la constitución de
    la nueva municipalidad.

    Por su parte las autoridades banenses mostraban un gran
    interés por contar con un gobierno municipal propio,
    independiente de la cabecera gibareña. La
    oligarquía y burguesía local procuraban
    también constituir sus instituciones de gobierno y
    administración para beneficiarse con las operaciones
    económicas provenientes de la United que
    provocaban que la fuga de capitales fuera hacia Gibara y no se
    quedaran en Banes.

    En 1905, el Consejo Provincial, y en 1907, la Secretaria
    de Gobierno, aprobaron la petición y declararon con lugar
    la celebración de asambleas municipales de los partidos
    políticos en Banes, y la consiguiente convocatoria a
    elecciones para proveer los cargos correspondientes a la
    creación del municipio (alcaldes, concejales, funcionarios
    de la administración, etc.).

    A punto ya de consumarse la constitución del
    Ayuntamiento o municipio de Banes, esta se vio frustrada por
    disposición del gobernador norteamericano en Cuba, Charles
    E. Magoon. De inmediato, la población local se
    movilizó en repudio a la arbitraria medida. El 17 de abril
    de 1908, se celebró una combativa asamblea de vecinos, que
    constituyó el primer movimiento masivo de tipo popular
    efectuado en la región contra la injerencia imperialista.
    A su vez el Ayuntamiento de Gibara, que aunque resultaba
    perjudicado en la segregación de Banes – al perder los
    barrios de Arroyón de Flores, Banes, Yaguajay,
    Cañadón, Mulas, Río Seco y Samá
    Arriba; siete barrios que en el censo de 1907 sumaban un total de
    17 251 habitantes, lo que representaba el 43, 84 % de su
    población[5]-, veía como justa su
    reclamación, en reunión consistorial celebrada al
    efecto, unió su protesta a la formulada en Banes por la
    asamblea popular de vecinos.

    Terminada la segunda intervención norteamericana
    en Cuba, y con el inicio del período presidencial de
    José Miguel Gómez, en 1909, se retomó la
    iniciativa anterior por los grupos que la habían promovido
    y logró constituirse sin demora el municipio, pues el
    viejo "tiburón" estaba interesado en aumentar su base
    electoral. No obstante, en las primeras elecciones (1910),
    resultó electo Alcalde, por simple mayoría, el
    caudillo conservador teniente coronel Juan Vicente
    Cárdenas. Los conservadores alcanzaron también la
    simple mayoría consistorial[6]

    El triunfo conservador en estos primeros comicios puede
    atribuirse al hecho de que su grupo dirigente estaba formado por
    los antiguos plantadores y fundadores del Término (Dumois,
    Cárdenas, Pupo, Quiñones, etc.), quienes contaban
    con una gran ascendencia sobre la población. En este caso,
    la postulación del teniente coronel Juan Vicente
    Cárdenas, cuyo oponente electoral era el médico
    liberal Juan Ariza, fue decisiva, pues durante décadas los
    patriarcas de la independencia, devenidos caudillos
    políticos, empuñaron el cetro del poder en el
    país; Banes no fue la excepción de esta
    regla.

    A partir de ese momento el pueblo banense logró
    su propia personalidad y autonomía jurídica, pero
    se inició un vínculo indisoluble entre el
    Ayuntamiento y la United Fruit Company, que era la mayor
    contribuyente a las rentas del municipio. Esta empresa yanqui
    puso en práctica una estrategia, de modo que el
    Ayuntamiento se supeditara a ella. Recibía ciertas
    concesiones de carácter fiscal a cambio de la
    solución de algunos problemas de interés social.
    Desde el propio año 1910, lo convirtió en su deudor
    mediante el adelanto de la mitad de los $ 200 000.00 que por
    requerimientos de la propia Compañía, eran
    necesarios para varias obras públicas como: el
    alcantarillado para el área residencial de la ciudad, las
    calles, la carretera al Embarcadero, etc.

    El municipio Banes, que abarcaba toda la región
    del Este del antiguo municipio Gibara, llegaba a la vida con una
    profunda debilidad estructural, la única actividad de real
    importancia que poseía era la desarrollada por la
    United Fruit, compañía propietaria del 67
    % del área municipal y su aporte en materia de impuestos
    siempre sería decisivo para las finanzas
    municipales.[7]

    El 17 de enero de 1910, a las 11: 00 de la
    mañana, quedó oficialmente constituido el municipio
    Banes y se realizó la ceremonia de toma de posesión
    de su cargo el alcalde municipal.

    El alcalde comenzó, de inmediato, a poner en
    práctica el programa que se había planteado en su
    campaña, encaminado a: dejar constituidas las
    instituciones municipales, promover el fomento de varias obras
    públicas de importancia, favorecer el desenvolvimiento
    económico del término.[8]

    Entre las primeras acciones estuvo la fundación
    del primer cuerpo de bomberos, pues aunque en la Revista local
    Portada se plantea que se fundó en 1914,
    según el testimonio de familiares del inmigrante
    español José Pita, quien fue teniente coronel y
    Primer Jefe del Cuerpo de Bomberos, este fue fundado en los
    primeros meses de 1910 y el primer incendió que sofocaron
    fue en la Sociedad el Liceo, ubicada en la Calle General Marrero,
    el día 19 de marzo de ese mismo
    año.[9] Este primer cuerpo de
    bomberos[10]se fundó con el aporte de
    comerciantes y del municipio, recién
    constituido.

    El caudillo Juan Vicente Cárdenas sólo
    estuvo al frente del municipio durante un año y medio pues
    tuvo que cesar en sus funciones a consecuencia de su delicado
    estado de salud. Motivo por el cual el 9 de marzo de 1911
    tomó posesión por sustitución el presidente
    del Ayuntamiento, Antonio Menéndez, quien tampoco
    llevó a cabo una labor sostenida en aras del desarrollo
    urbanístico y cultural del municipio pues el 1º de
    diciembre de 1911 fue sustituido por el concejal conservador,
    capitán Liduvino Quiñones
    González.

    Este fue un período en el que sólo se
    constituyeron las instituciones municipales y se inició la
    construcción del parque "Domínguez", quizás
    por la propia inestabilidad de los alcaldes.

    El mes de noviembre de 1912 fue convulso para los
    partidos existentes (conservador y liberal), pues se
    desarrollaron las elecciones, en las cuales triunfaron los
    conservadores, representados por el capitán Manuel Varona
    Gelabert. En los cuatro años que duró el
    período de gobierno de Varona Gelabert, se realizaron
    varias obras públicas, entre las que se
    encontraban:

    La terminación del parque "Domínguez". Un
    puente sobre el río de Banes. Construcción de los
    cementerios de Mulas, Berros, Samá y Yagüajay. Un
    completo servicio contra incendios con su correspondiente tanque
    para agua y la instalación de 60 llaves públicas.
    El ensanche del cementerio de esta villa. Composición de
    las calles "G", Tercera Norte, Segunda, Ave. Cárdenas, "E"
    y Gral Marrero. Construcción de un caño de
    desagüe en la calle "C" y otro en la segunda esquina de "B".
    Instalación de varias llaves de agua al servicio de los
    pobres. Arreglo de los caminos del Retrete, Santa Justa, Berros,
    Yagüajay, Cañadón, Flores, samá, Loma
    Enriqueta, Mulas, Tasajeras, Aguas gordas y Rio Seco y el arreglo
    también de otros pasos de caminos por valor de $ 917.20,
    solamente en obras públicas se invirtieron $ 19
    644.58.[11]

    Para esos años ya Banes exhibía una
    economía azucarera floreciente que debía
    manifestarse también en el desarrollo urbanístico y
    cultural del municipio.

    El 1º de diciembre de 1916[12]en
    acto solemne, el capitán Manuel Varona Gelabert
    entregó la alcaldía al capitán Liduvino
    Quiñones, quien también pertenecía al
    partido conservador.[13] Quiñones deseoso
    de construir una administración honrada y digna,
    caracterizada por el buen proceder de sus subalternos, no
    tardó en reunirse con la policía y los empleados de
    la administración municipal para exigirles el más
    exacto cumplimiento de sus respectivos cargos.

    A sólo dos semanas de la toma de posesión
    del capitán Liduvino se desarrollaron, por segunda vez en
    Banes, las fiestas del trabajo. Esta vez fueron dedicadas a la
    construcción del parque Cárdenas. Para esta obra
    "el Ayuntamiento concedió $ 200.00, cantidad que fue
    tomada del capítulo "Imprevistos" del fondo
    económico de la
    alcaldía".[14]

    En el año 1918 la United Fruit Company
    firmó un acuerdo con el Alcalde Liduvino Quiñones,
    a través del cual esta empresa presupuestaba en $ 50
    000.00 la construcción de conductoras comunes para agua.
    Por su parte, el Ayuntamiento, tenía que reintegrar a la
    Compañía el dinero prestado, en partidas de $ 10
    000.00, con cargo al presupuesto anual del
    Ayuntamiento.[15] Este acuerdo es un ejemplo de
    como la U.F.Co., con el objetivo de obtener ventajas fiscales por
    parte del Ayuntamiento y ganar un estado de opinión
    favorable a sus intereses, llevó a efecto algunas
    demostraciones de paternalismo, aprovechando la necesidad y los
    deseos de progreso material de la comunidad. De esta forma la
    población banense tuvo alcantarillado entre los
    años 1921 y 1923.

    Acuerdos como este firmaron varios, que aunque
    favorecían el desarrollo social del municipio,
    convertían en deudora a la alcaldía. Deudas que el
    ayuntamiento nunca llegó a pagar totalmente, ni la U.F.Co.
    estaba muy interesada en cobrar, pues esta situación le
    favorecía para obtener determinadas prebendas.

    El 1º de diciembre de 1922 cesó en su cargo
    como alcalde municipal el Capitán Liduvino Quiñones
    Gonzáles y con él también cesaba la
    hegemonía mantenida por el partido conservador, desde los
    primeros comicios, por la segmentación y
    disminución del grupo original. La toma de posesión
    del liberal, Carlos de la Torre Llauradó, daba paso a un
    período dominado por este partido – integrado, para esa
    fecha, por varias figuras vinculadas estrechamente a la U.F.Co. –
    marcado por la supeditación a los intereses del monopolio
    extranjero.

    Finalizando el año 1926 resultó electo
    alcalde municipal, representando al partido Liberal,
    Delfín Camapañá Pupo. En su quehacer por el
    pueblo de Banes llevó a cabo varias obras: "el arreglo de
    los caminos de Mulas, Retrete y Samá; construcción
    de la puerta y cerca del cementerio; la pavimentación de
    la Calle Gral. Marrero, la ornamentación de los parques
    Cárdenas y Domínguez y la adquisición de
    útiles valiosísimos para la ejecución de las
    obras públicas del municipio".[16] Cuando
    faltaba sólo un mes para el cese del período de
    gobierno del alcalde Campañá, éste
    inauguró la obra cumbre de su administración, el
    parque infantil, nombrándolo Delfín
    Campañá, en honor a su pequeño hijo, que
    había fallecido.

    De igual manera, pocos días antes de entregar el
    ayuntamiento, en reunión del consistorio, efectuada en la
    noche del 12 de febrero de 1932, fue aprobada la rebaja de las
    contribuciones que de manera trimestral cobraba la
    Administración municipal por concepto de fincas
    rústicas y urbanas, industria y comercio, libre
    regulación, patentes de bebidas, profesión, artes y
    oficios, transporte, etc.

    Tanto en el período de gobierno de Delfín
    Campañá Pupo, como en el de su sucesor el Dr.
    Rafael Diaz Balart, que se prolongó durante toda la
    dictadura de Machado, fue más evidente la
    supeditación a los intereses de la compañía
    norteamericana. Desde la propia constitución del
    municipio, esta empresa siempre contó con concejales que
    eran a la vez empleados suyos y se encargaban de tramitar sus
    intereses; en estos años la situación era mucho
    más favorable porque Delfín Campañá
    era el más alto funcionario cubano de la División
    Banes de la U.F.Co. y Diaz Balart, el abogado de la
    Compañía.

    El gobierno de Diaz Balart fue bastante corto pues
    tomó posesión el 24 de febrero de 1932 y al
    año y medio fue depuesto, a raíz del
    establecimiento del gobierno revolucionario, después del
    derrocamiento de la dictadura de Machado. Ese movimiento
    revolucionario que condujo a la caída del tirano, se
    manifestó en Banes con el desarrollo de una fuerte ola de
    huelgas, que ni la guardia rural ni los agentes de seguridad de
    la U.F.Co. pudieron contener. Situación por la cual el
    ayuntamiento vivió días de incertidumbre durante la
    primera quincena de agosto de 1933. El periódico El
    Pueblo
    , del 15 de agosto, da a conocer una
    declaración del alcalde, en la que plantea su
    decisión de renunciar al cargo si con ello la
    situación mejora.[17]

    El período de la dictadura de Machado coincide
    con la etapa de más abierto control de la
    Compañía sobre la municipalidad banense. Tanto los
    alcaldes – empleados como los alcaldes –
    colonos[18]resultaban instrumentos dóciles
    de la Empresa.[19]

    La explosión revolucionaria que derrocó el
    machadato puso en crisis la dominación monopolista –
    imperialista en Banes, pero se produjo una situación sui
    generis. Al mismo tiempo que se establecía el control
    obrero, los grupos revolucionarios triunfante en la ciudad,
    colocaban en la Alcaldía municipal, a otro personaje
    vinculado a los intereses yanqui.

    Así el 19 de agosto, ante la presión
    popular fue designado como alcalde el Dr. Miguel Angel Tamayo,
    que era el director del colegio privado de la iglesia
    cuáquera norteamericana, fundado por la U.F.Co, de modo
    que el movimiento revolucionario que pretendía barrer con
    la intromisión imperialista, dejaba intacta, con la figura
    del alcalde, la representación proinjerencista en la
    máxima dirección política de
    Banes.

    Una vez apagado el movimiento revolucionario, la
    Compañía manifestó su interés por
    controlar no solo la política local, sino por fortalecer
    sus vínculos con el gobierno de la nación. Por
    tanto tuvo en Fulgencio Batista Zaldívar, natural de
    Banes, su más firme aliado. El dictador fue bautizado como
    el más progresista de los gobernantes, luego de haber
    ahogado en sangre las luchas revolucionarias y obreras de 1933 –
    1934, fue recibido en la ciudad bajo el apadrinamiento de la
    administración monopolista[20]

    En el año 1934 se manifestó inestabilidad
    en la dirección del ayuntamiento pues durante todo el mes
    de enero las notas de la alcaldía aparecen firmadas por
    José Puentes Calzadilla, alcalde provisional, en febrero
    fueron firmadas por Eusebio Quintana y luego en marzo por Rafael
    Fernández Quevedo. A inicios de mayo, por
    disposición de la jefatura militar de Holguín,
    asumió la alcaldía Juan R.
    Domínguez.

    A los 24 años de constituido el ayuntamiento,
    Ramón Sierra en un artículo titulado "Banes y su
    oportunidad", manifestaba el habitual agradecimiento con la
    compañía norteamericana, cuando
    planteaba:

    Si nuestro olvidado pueblo tiene alcantarillado,
    matadero municipal, acueducto, planta eléctrica y algunas
    otras obras que lo engrandecen, se debe a la valiosísima
    ayuda de la compañía United Fruit, a las
    iniciativas particulares de algunos vecinos y a la buena voluntad
    del pueblo y su gobierno municipal; pero nunca al gobierno
    central.[21]

    El 17 de agosto de 1934 se anunció el
    nombramiento de Isaac Herrero Tabares[22]como
    alcalde provisional de Banes, representando al sector
    nacionalista. En esa fecha El Pueblo comentaba que "al
    parecer había habido un interés de efectuar el acto
    dentro del mayor silencio, pues había sido una
    sorpresa".[23]

    Después de la frustración revolucionaria
    de 1933 – 1935 el Partido liberal mantuvo su predominio bajo la
    figura de Octavio Silva Quiñones.

    Durante toda la década del 30" y el 40" se
    mantuvo la existencia de gobiernos locales que respondían
    a los intereses de la empresa imperialista, mantuvieron
    excelentes relaciones con Fulgencio Batista y llevaron a cabo una
    obra social moderada, que les permitió incrementar sus
    capitales personales.

    El 15 de febrero de 1938, fue inaugurado el hospital
    civil La Flor de La Caridad, dicho acto contó con la
    presencia de Batista, a quien la UFCo y el Ayuntamiento le
    dedicaron un programa de festejos que incluía una parada
    escolar en la que participarían los niños de las
    escuelas públicas de esta ciudad y 200 alumnos del
    Instituto Militar de Ceiba del Agua, que formaban la escolta de
    honor del Coronel Batista en la excursión que
    desarrollaría.[24]Quizás esta visita
    formó parte de su campaña electoral.

    Una vez que Batista alcanzó la presidencia del
    país y a raíz de la aprobación de la
    Constitución del 40, se produjo una
    reestructuración en el Ayuntamiento, adoptando la
    siguiente estructura: alcalde, presidente, vicepresidente,
    secretario, vicesecretario y concejales (en número de
    17).

    En 1940 las filas del liberalismo se enfrascaron en
    pugnas internas, pero Octavio Silva fue reelecto por el Partido
    Popular y Democrático republicano. En 1944 por problemas
    de salud este tiene que abandonar la alcaldía y fue
    sustituido por quines le seguían en cargo dentro del
    Ayuntamiento. En 1946 Jaime Esteban Pozo ocupó la
    alcaldía como candidato de una curiosa conjugación
    de partidos (el auténtico, republicano, comunistas y
    abecedarios); en 1950 fue reelecto, pero en 1952 fue reemplazado
    en la alcaldía por Decreto Oficial de la recién
    instaurada dictadura de Batista.

    La alcaldía fue asumida de manera provisional por
    Florencio Linares Saiz, hasta que el 6 de febrero de 1953 fue
    colocado el alcalde batistiano, Pedro Almaguer, quien
    respondió a los intereses de los que lo llevaron al
    gobierno y asumió el cargo para poner en práctica
    una política idéntica a sus antecesores.
    Próximo a entregar la alcaldía, escribió al
    manager de la compañía U.F.Co:

    Yo he demostrado ser un amigo de la
    compañía que usted dignamente administra,
    sirviéndole en todo cuanto de mi se ha solicitado, sin
    dejar desde luego de cumplir con mis obligaciones (…) el
    servicio que hoy solicito de esa administración, ni es
    ilegal, cosa que jamás pediría, ni le perjudica en
    nada a esa administración, es solamente adelantar un pago
    tres o cuatro días.

    Un hijo mio casi seguro será el presidente del
    Ayuntamiento, también tengo un cuñado y un primo
    hermano que han sido electos concejales y además por la
    posición que ocupo dentro de mi partido, ejerzo alguna
    influencia con los demás concejales electos por el
    partido, y yo quisiera que todos ellos a través mio fueran
    buenos amigos de la
    compañía.[25]

    Lo que solicitaba Almaguer, a punto de abandonar el
    cargo de alcalde, era que la United adelantase un pago
    que normalmente debería ser hecho en el período en
    que estarían actuando las nuevas autoridades municipales
    recien electas. Su objetivo era redondear la tajada del
    presupuesto municipal con el cual pensaba retirarse de sus altas
    responsabilidades políticas. Esta solicitud llevaba
    implícito un recordatorio de los "favores" que en el
    pasado le había hecho a la UFCo. Y la propuesta de las
    posibilidades de continuar este tipo de relación en el
    futuro.

    No se han encontrado evidencias de que Almaguer lograra
    sus objetivos, pues el mismo día que escribió dicha
    carta, tomó posesión como alcalde Francisco
    Pérez San Juan, quien había sido electo por una
    coalición de los partidos: liberal, demócrata,
    radical y progresista.

    Este hombre en su período de gobierno
    arregló el Parque Cárdenas y la alcantarilla de
    Rondón, bacheó algunas calles de la ciudad y
    mejoró las del Rpto. Obrero. Teniendo en cuanta que para
    el año 1955 – 1956 le fue aprobado un presupuesto de $ 119
    575.39, con el cual también se concluyó la
    construcción del Palacio de justicia, que costó $
    68 706 y fue inagurado el 12 de enero de
    1956[26]Fue quien entregó la
    administración municipal al gobierno revolucionario, el 2
    de enero de 1959.

    El ambiente que se desarrolló en el Ayuntamiento
    de Banes, desde 1910 hasta 1958 tipifica, como ninguna otra, el
    papel desempeñado por los factores de dependencia
    estructural en la subordinación de las instituciones
    políticas locales a los intereses de una empresa. Se trata
    de una manifestación particular, en el ámbito
    político, de un fenómeno más amplio puesto
    de manifiesto en los medios de control que la United
    poseía en los diversos aspectos de la vida regional. "Si
    en el plano nacional la influencia política de la UFCo no
    resultó decisiva, en el marco de su enclave regional – y
    particularmente en Banes – los medios de que dispuso le
    permitieron mantener durante sesenta años, una
    situación que prácticamente suponía la
    existencia de un Estado aparte dentro de los límites del
    territorio nacional."[27]

     

     

    Autor:

    M.Sc. Yurisay Pérez Nakao.

    Historiadora del municipio Banes.

    [1] Al estilo de una villa norteamericana de
    grandes bungalow, calles bien pavimentadas, áreas
    verdes, jardines, campo de golf. En la parte alta –
    calles: Los Ángeles, Polo y Campana – residían
    los norteamericanos y altos empleados criollos; en la parte
    baja – calles: Mulas, Palma, Puerto Rico y Tráfico
    – se ubicaban los obreros cubanos.

    [2] Ubicado en las inmediaciones de la
    ciudad, separado del barrio Americano por el patio del sistema
    ferroviario de la plantación, fue fundado en la segunda
    década del siglo XX, considerado el principal
    asentamiento jamaicano del municipio Banes.

    [3] Separado del "barrio americanos" por el
    "patio", del sistema ferroviario, fue fundado iniciando la
    década del 20, en él residían los
    trabajadores cubanos, vinculados a las labores del taller de
    locomotoras y ferrocarriles y algunos inmigrantes
    fundamentalmente asiáticos y españoles.

    [4] AHPSC. Fondo Gobierno Provincial. Legajo
    121. Expediente 27.

    [5] Armando Cuba de la Cruz: Política
    demográfica en Holguín 1898 – 1920,
    Ediciones Holguín, 2012, p.44.

    [6] El Ayuntamiento quedó constituido
    por los 15 concejales electos, que representaban a cada
    partido. Por los conservadores: Néstor del Prado,
    Antonio Menéndez, Augusto Blanca, Juan A.
    Campaná, Ernesto Dumois, Liduvino Quñones,
    Francisco Reyes y Manuel Cárdenas. Por los Liberales:
    Salvador Campañá, Manuel Tuero, Estanislao
    Osorio, Delfín Campañá, Miguel Gutierrez,
    Francisco de Paula Jaen y José Zaldivar Feria. Fue
    designado como Presidente del Ayuntamiento, Antonio
    Menéndez y como Secretario, Juan
    Campañá.

    [7] Archivo United Fruit Company. Museo
    Municipal. Fondo Finanzas del año 1913.

    [8] Ariel James Figarola: Banes: Imperialismo
    y nación en una plantación azucarera, p. 222.

    [9] Este es un hecho recordado por la familia
    porque ese día estaba dando a luz la esposa de
    José Pita y él tuvo que dejarla en el momento del
    alumbramiento porque el deber lo llamaba, ante el aviso de un
    siniestro.

    [10] Estuvo integrado por Jesús
    Hernández, Juan Piedra, Jesús Guidi Varona,
    Serapio Rondón, Julio Guzmán Varona, Rafael Mir
    Serrano, Fernando Rodríguez Rojas, Miguel Iglesias,
    Marino Nilo, Francisco Calzado, Pedro Rodríguez, Emilio
    García, Rufino Hidalgo, José Silvestre, Manuel
    Barreiro, Angel Blanca, Francisco Dunand, Andrés
    González, Benigno Torres, Enrique Cardenas. El
    capitán Jefe de Sección era Enrique Guidi y el
    capitán ayudante Pedro Cabrera Triana. El Teniente
    Coronel Jefe del cuerpo de bomberos era, como ya dijimos,
    José Pita y el Teniente ayudante Juan Osorio.

    [11] “Una ligera ojeada a la labor del
    Alcalde saliente”, en: El Pueblo, Banes, 1º de
    diciembres de 1916, p. 1.

    [12] Ese día juraron sus cargos los
    concejales entrantes: Ernesto Dumois Duthil, Ramón
    Sierra García, Manuel de la Paz Fiffe, Benigno Llanos
    Ramoneda, Juan Roca Sánchez, Dimas Felipe Figueiras,
    Enrique Alemany Torno y Fernando Silvestre Rosa. Como
    presidente del Ayuntamiento fue electo Ernesto Dumois
    Duthil

    [13] “El acto de hoy en el
    Ayuntamiento”, en: El Pueblo, Banes, 1º de diciembre
    de 1916, p. 1.

    [14] “El Ayuntamiento concede
    doscientos pesos para la fiesta”, en: El Pueblo. Banes,
    12 de diciembre de 1916. p. 1.

    [15] Archivo. U.F.Co. Banes.
    Construcción del alcantarillado de Banes.

    [16] “Por la Casa Municipal”, en:
    El Pueblo, 30 de enero de 1932, p.1.

    [17] Rafael Díaz Balart: “De la
    alcaldía ”, en: El Pueblo, Banes, 18 de agosto de
    1933. p.1.

    [18] Todos los alcaldes que tuvo Banes de una
    forma u otra estuvieron vinculados a la United Fruit Company,
    unos porque eran empleados, o sea, trabajaban en alguna de las
    dependencias de la Empresa, y otros porque al ser propietarios
    de tierras eran colonos y sus producciones cañeras las
    contrataban con la Compañía.

    [19] Oscar Zanetti et al: UFCo. : Un caso de
    dominio imperialista en Cuba, Editorial Ciencias Sociales, La
    Habana, 1976, p. 341

    [20] Batista había sido alumno del
    colegio Los Amigos, perteneciente a la Iglesia Cuáquera,
    fue telegrafista y se había ido de Banes acusado de
    haber robado un reloj. A partir de 1934 y hasta el propio
    año 1958, en todas las visitas que realizó fue
    recibido y atendido por los más altos dirigentes de la
    Empresa norteamericana, la principal figura del Ayuntamiento y
    la burguesía banense, llegando incluso a ofrecer
    banquetes en su honor.

    [21] Ramón Sierra: “Banes y su
    oportunidad”, en: El Pueblo, 11 de junio de 1935, p 1

    [22] Durante el período de gobierno de
    Issac Herrero, el secretario de la administración
    municipal fue Pedro Cabrera Triana; la oficial de
    contaduría fue Anabel Pérez y la escribiente de
    tesorería fue Dora Luz Reyna.

    [23] El Pueblo, 15 de agosto de 1934,
    p.1.

    [24] El Pueblo, 15 de febrero de 1938, p.
    1.

    [25] A.H.M.B. Correspondencia del
    Ayuntamiento a administrador de la División Banes UFCo.
    Carta de Pedro Almaguer, 3 de enero de 1955.

    [26] “Invitación al pueblo de
    Banes”, en: El Pueblo, 12 de enero de 1956, p.1.

    [27] Oscar Zanetti: Ob Cit, p. 344.

    Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

    Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

    Categorias
    Newsletter