"Es triste lo que estamos viviendo ahora mismo en Puerto
Rico con nuestros mejores campeones mundiales de la historia:
Wilfredo Gómez, con varios problemas con la justicia por
cuestión de drogas… Wilfredo Benítez, sin un
centavo, en un estado de salud deplorable por los propios golpes
en el ring. Es que el mundo del boxeo profesional es primero que
todo una maquinaria de hacer dinero a costa de cualquier cosa": –
declaró a Miguel Hernández, Granma, (29 – 4 – 98),
José Luis Vellón, antiguo pugilista boricua,
estudiante nuestro en su día, que no pasó al
profesionalismo y directivo del Boxeo de Puerto Rico.
La maquinaria de hacer dinero, se manifiesta en
múltiples formas. Su cabeza de medusa aparece por
numerosos campos de la actividad física en el mundo
actual.
En algunos deportes, no menos que en el Boxeo, el
peligro de la pérdida de la vida del atleta se halla
presente.
La enajenación y alineación del espectador
ha alcanzado su cenit en los campeonatos de fútbol. Nadie
puede olvidar la masacre de Bruselas, Inglaterra, Europa
Continental y en otros lugares.
El estadio Heysel de Bruselas dejó 38 muertos y
centenares de heridos. La batalla en las gradas se
trasmitió a 80 países – algo similar a la guerra
norteamericana contra Irak, Yugoslavia y
Afganistán.
La prensa Italiana se mostró consternada:
"tiemblan las manos cuando uno trata de describir siquiera un
trozo de ese cuadro macabro en la final de la copa de campeones
de Europa… Una montaña de cadáveres, cuchilladas,
carnicería", exclamaba la Gazzetta dello Sport.
Desde 1975, 1980, 81, 82, 83, 85 los fanáticos
provocan toda clase de disturbios.
En estos tiempos – declaró Joao Havelange –
influidos por el cine, la literatura, la televisión, y las
revistas, entre las que hay por desgracia, publicaciones
deportivas, muchos jóvenes no ven al deporte como una
actividad física y moral del hombre que exige disciplina y
determinadas normas de conducta, sino como ocasión para
armar disturbios y peleas, como motivo de falsa auto –
afirmación. El problema desborda el marco del
fútbol y del deporte en general.
A juicio de Ronald Reagan, el "deporte es una suerte de
odio puro", "el deporte es la actividad humana más
próxima a la guerra, sin llegar a ser mortal".
Podría haber añadido… para
algunos.
Pero tal definición general de la actividad
deportiva carece de seriedad científica.
Donde seta actividad alcanza ribetes de verdadera
guerra, es indudablemente en aquellos deportes que tienen, junto
a la rivalidad deportiva interna, la importante motivación
económica.
Las copas mundiales de fútbol, los campeonatos de
baseball, de básquet, tenis, hockey, entre otros, nos
muestran ejemplarmente como se lleva a cabo la venta, la
realización final de las mercancías –
deportistas a través de los espectáculos deportivo
– recreativos que se desarrollan por las empresas transnacionales
privadas o con la empresa transnacional pública (COI,
FIFA, etc.)
La trasnacional ADIDAS – fundada en 1958 por Adolf – Adi
– Dassier – Das, de Franconia, Alemania, sus ventas anuales
rebasan la cifra de 2.5 miles de millones.
Monopoliza, en muchos eventos que se publiquen sus
marcas en botines, de los jugadores, la ropa de los
árbitros, los botiquines de enfermería, el
balón oficial.
En 1976, logró que el 80% de los participantes
calzara sus zapatos y comercializó las mascotas de los
mundiales de fútbol de Argentina y
España.
Comercializó los cinco anillos y el emblema
olímpico de los Juegos de Verano e Invierno de 1988, por
la suma de 300 millones.
Controla a los astros de casi todos los
deportes.
Rivaliza con la firma PUMA, otro monopolio de la
confección deportiva, propiedad de Amín. que
"misteriosamente" es primo del propietario de Adidas Horta
Dassler.
ADIDAS es el mayor fabricante de artículos y
medios deportivos, que se comercializan junto con los deportistas
y a través de ellos, lo que le sirve de publicidad a lo
que dedica el 6% de sus ganancias.
En 1990, se invirtieron más de 2000 millones de
dólares en publicidad en los programas deportivos. Lo que
se convierte en un gran negocio para los empresarios que venden
su mercancía – atletas después de haberlos
"fabricado" en sus centros de producción (entrenamiento)
utilizando las más sofisticadas técnicas y avances
científico – técnicos y de las ciencias
humanas.
En 1988, el semanario económico Sports Inc and
Wharton Econometrics Associates, una empresa de análisis
de Filadelfia, calcularon que los ingresos brutos del sector
deportivo fueron de 47 200 millones de dólares,
equivalente al 1% del producto nacional bruto de Estados
Unidos.
El mercado del espectáculo deportivo
seguirá siendo un gran negocio que se extiende cada vez
más no sólo en EUA dadas las tendencias
comercializadoras y neoliberales que se han apoderado del mundo
actual.
Un directivo latinoamericano, Mario Vázquez
Raña, llegó a decir, "el día en que el que
pague, ordene y organice, se acabó el olimpismo".
(Granma, (1995).
La decisión del COI, de otorgar la sede de los
Juegos Olímpicos de 1996 a Atlanta en lugar de Atenas,
demostró que el COI votó guiado por el Dios Oro y
despreció el mandato de los DIOSES DEL OLIMPO como
insinuaba un cable de REUTER publicado en Granma (tan
temprano como 18 – 9 – 90.)Atlanta – 96 aportó 850. 7
millones por derechos de televisión, Sídney
proyecta 1272.1 millones y Atenas (para el año 2004)
1426.3 millones.
Los siete patrocinadores y siete empresas
que apoyaron al comité de organización londinense
(Locog) esperaban una suma parecida a la que pagan los TOP.
Desde los años 80, el Comité Olímpico
estadounidense recibe el 12,75 por ciento de los derechos de TV
generados en ese país y, sobre todo, 20 por ciento de
ingresos globales por marketing. Los comité
olímpicos nacionales no reciben directamente ningún
peso del COC, que solo le entrega un número de entradas
para que las comercialice.
"Los tiquetes se convierten en paquetes
turísticos, que manejó la empresa Cartan Tour, que
cuenta con el aval del COC. Una vez venden esos paquetes, nos
entregan la utilidad", le dijo a EL TIEMPO Baltasar Medina,
presidente del COC inglés.
Conclusiones
De todo ese complejo y aparentemente enrevesado mundo de
las finanzas y el deporte, brotan las fabulosas sumas que se
pagan a determinadas estrellas dentro del deporte y que permiten
disimular la explotación masiva de la fuerza de trabajo o
capacidad de trabajo deportiva asalariada y estimular
rendimientos extraordinarios en pos de alcanzar la cima de la
élite de los deportes más gustados en el mercado
del espectáculo (Show).
Los beneficiarios de la escalada millonaria del
espectáculo son, natural y lógicamente, en primer
lugar, los empresarios y propietarios de las transnacionales
privadas que hegemonizan la producción de atletas o de
implementos o medios necesarios para éstos y para la
realización de las actividades de cualquier tipo que
sean.
Bibliografía
3. López, José, 1990,
Granma, 24 – 1 – 90.4. Martí, José. Obras, tomo 9,
10, 11.5. Marx, Carlos, 1946. El Capital, Tomo
I. México. Ed. Fondo de Cultura
Económica,6. Marx, Carlos, 1946. El Capital, Tomo
I. p. 48. México. Ed. Fondo de Cultura
Económica,7. _______________, Op. Cit. PP. 63,
89.
8. Periódico Granma 1990. 24-
1.La Habana.9. Vázquez, Raña, Mario, 1995
Periódico Granma .La Habana.10. Periódico Granma 1998. 29-
4.La Habana.11. Bohemia, 1997.Abril. La
Habana.12. Martí, José, OC, Tomo
8.13. www.el tiempo.com 15 de agosto
2012.
Autor:
Prof. Aux. MSc. Felipe Estrada
Gómez.
Prof. Aux. MSc. William Batista
Martínez.
UCCFD
"MANUEL FAJARDO"
Santa Catalina No.12453, La
Habana.
Felipe Estrada Gómez,
profesor con vasta experiencia en la docencia de pre y posgrado,
con más de 37 años en la educación superior
,y en la investigación, en temas relacionados con la
economía política y otras ramas de las ciencias
sociales que se imparten en la universidad: filosofía,
teoría sociopolítica, problemas sociales de la
ciencia y la tecnología.
William Batista Martínez,
profesor con elevados avales docentes e investigativos en las
ramas de la economía política y en los problemas de
la comercialización del deporte y la cultura física
en el mundo actual.
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