El panorama estelar a través del
Tiempo puede ser una imágen ilusoria de las realidades
actuales o instantáneas, simplemente nuestro intelecto
analiza lo que capta visualmente de los lejanos fenómenos.
A la altura de nuestros tiempos, lo que el Hombre puede ver y
analizar se encuentra segmentado, nuestro intelecto racional y
analítico se dimensiona como una suma de puntos unidos en
un segmento sin un principio y sin un fin. Nuestro intelecto y
conocimientos progresan evolutivamente y el sentido y el valor
existencial del Hombre se oculta en los enigmas y cerrados
designios de todas las realidades espacio-temporales captadas que
nos circundan. El Hombre vive y crea su sentido existencial y en
los tiempos coetáneos llegó crear sus propios mitos
de eficiencia, hedonismo, comodidad y placeres tenoexistenciales
reales y virtuales lo que lo ciega de ver y analizar las
auténticas realidades en la que la raza humana se
desenvuelve y coexiste. Cuanto mayor es el nivel intelectual de
un individuo exponente promedio de su género, tanto
más busca encontrar el mayor placer de la vida y utilizar
de todo lo ya se a perfeccionado instrumental y
técnicamente lo que permite autodesviarse de todas las
preguntas y respuestas del sentido y el valorde su propia
existencia. El Hombre en nuestros tiempos se encamina sin
advertirlo hacia el primitivismo filogenético de sus
antepasados. K. Jung, S. Freud y J. Lacan descubrieron y
demostraron tales primitivismos filogenéticos en los
niveles del subconsciente. La Psicología en su conjunto
unida a niveles conceptuales del intelecto humano; el Yo, el ello
y el Superyo de la mente humana se extralimita e hiperboliza de
sus marcos espirituales genéricos formados en el
transcurso de milenios.
El Yo y el Superyo freudianos de los
individuos, ahora pueden operar con aparatos cibernéticos,
modelos informáticos, redes sociales interactivas y
señales de autonconvencimiento de su ilimitada
efectividad, logro de placer, comodidad, hedonismo y poder dar
cuerda suelta a su ego y autoinducir sus instintos sexuales. El
hombre de Neatherland buscó calor, abrigo y alimentos. El
hombre contemporáneo por encima de lo básico busca
todas las formas de comodidades y placeres que la sociedad
ofrece. Si un individuo logra materialmente en parte los
paradigmas que el mundo moderno ofrece, aquellos ya logran
transformarse proyectos de pancartas y escenarios de su propio
intelecto que distraen de preguntarse del lugar y el sentido que
ocupa en el mundo donde el mismo individuo se dimensiona vital y
socialmente. Los símbolos y paradigmas de la
contemporaneidad contradicen por sus contenidos, formas y
significados a los símbolos históricos de toda
nuestra Era. En sentido paralelo, los conocimientos del Hombre y
los cuadros psicológicos de las masas sociales podemos
contraponerlas con los significados y las valoraciones de los
íconos cristianos. El verbo señalar ya es
reemplazado por el verbo digitar y en las grandes urbes las
computadoras indican a los choferes de automóviles el
camino a seguir. Científicos argentinos descubrieron que
los mejores algoritmos de tránsito lo realizan las
hormigas, las cuales en su trayecto no doblan e intercambian
permanentemente información en el camino de ida y
vuelta.
Los símbolos arquetípicos,las
pancartas y los personajes y escenarios que nos circundan en la
actualidad son contradictorios a la par de los símbolos de
principios de la Era cristiana y medioevales. Si las
imágenes televisivas e internéticas podemos
llamarlas como ventanas hacia el Mundo globalmente interconectado
visual e informativamente y al contrario, los íconos
fueron y son ventanas hacia un Mundo invisible en los cuales la
vida venció a la muerte y enlos cuales el estilo realista
no coincide con las imágenes que representan. Las
imágenes simbólicas de los íconos se ajustan
a espacios condicionales. Los fieles veneraron imágenes al
margen de los límites espaciales y temporales y por fuera
de la lógica humana expresada en los ilogismos espaciales
y en sus perspectivas sin horizontes, donde los objetos no se
reducen sino que al contrario aumentan en la medida que nuestra
vista se aleja del ícono. El único punto de cruce
de las líneas geométricas de los íconos es
el centro de los ojos de los espectadores que miran un
ícono. Las figuras y las escenas de los íconos
puden ser vistas de tres o incluso cuatro lados o perspectivas.
La relación entre quines miran o veneran un ícono
es ajena a toda ilusión óptica y los esquemas
ilógicos del inconsciente humano no pueden sery ni por
aproximación parecerse a lo que los íconos
representan y visualmente expresan. Desde el S. VI D.C. los
fieles cristianos comenzaron a venerar a los íconos y los
mismos tuvieron un mayor valor que las incomprensibles escrituras
bíblicas y las misas en idioma latín,idioma docto,
lengua comprensible para individuos instruidos e incluso gran
parte de los nobles de Europa occidental no lo
dominaban.
Los fieles ortodoxos deben mirar a los
íconos y no imaginarlos en su mente ya que para aquellos
los íconos emanan fueza celestial y de acuerdo a reales
registros, miles de fieles se curan de enfermedades orando ante
ciertos íconos milagrosos. Los íconos religiosos no
portan un sentido existencial filosófico o cultural ya que
son microsegmentos de lo eterno, sin un principio y un fin. Las
escenas y escenarios de la vida contemporánea y sus
imágenes digitalizadas internéticas son
contraposiciones lógicas de la biblias para analfabetos,
las imágenes representativas de los íconos. Para
interpretar lógica y racionalmente a personajes ficticios
como H. Potter, Superman o el hombre araña y un
sinnúmero de personajes cinematográficos y las
caras y caretas de famosos mostrados por televisión, no
requiere de ninguna instrucción ni tampoco que los
espectadores sean alfabetos. El sólo conocimiento de un
idioma verbal y vulgar permite la comprensión racional,
analítica y emocional de los personajes , arquetipos ,
logotipos y las pancartas televisivas y cinematográficas.
Los fieles cristianos veneraron desde los primeros siglos de
nuestra Era retratos y escenas explanadas hacia la eternidad,
hacia la infinitud espacial y temporal en formas de alogismos y
perspectivas regresivas. Toda una total contradicción
entre los esquemas del intelecto humano en el transcurso de dos
milenios. El intelecto humano buscó en su
imaginación detener o acelerar empíricamente al
Tiempo y al Espacio y solamente pudo lograrlo a través de
su propio inconsciente, cuando un individuo duerme y su
lógica racional y analítica desaparecen de sus
cuadros cognoscitivos ajustados a las realidades en las que se
dimensiona cada individuo en particular. Todas estas
circunstancias en nuestros tiempos se reflejan directa o
indirectamente en el valor y el sentido existencial de cada
individuo en particular y de las masas sociales informativamente
globalizadas en general.
Cuando un individuo duerme, su cerebro no
opera con cronologías temporales lógicas, el Tiempo
como una categoría filosófica racional en el
inconsciente humano se deforma. Las horas, los días y los
años no tienen el mismo preciso sentido valorativo que
cuando la esfera de la consciencia de cada individuo despierta.
Cuando un niño nace su intelecto es una página en
blanco libre de toda información sociocultural. Su memoria
es filogenética como formas instintivas de supervivencia.
Las relaciones entre los conocimientos de la humanidad y la
psicología de las masas sociales puede ser ejemplarmente
mostrada. En el transcurso de un milenio y doce años los
conocimientos científicos progresaron en sentido
matemático y en el S. XX en sentido geométrico. La
psicología de las masas sociales coetáneas
inercialmente pueden todavía operar con los mismos
esquemas medioevales del S.XI. En el año 1000 los
gentíos europeos ilustrados e ignorantes esperaron el fin
del Mundo apocalíptico bíblico por el simple hecho
del fin de un milenio y el inicio del segundo milenio. El
pánico social llevó al sucidio a muchos individuos.
En el año 1500 según la investigación de G.
Duby (1967), los gentíos europeos diferidamente sufrieron
estados de sufrimientos existenciales apocalípticos
repetitivos, cinco centurias después del temor colectivo
de los fieles católicos europeos sobre el fin del Mundo en
el año 1000. Quinientos doce años después,
las masas sociales global e informativamente interconectadas,
instruídas y científicamente desarrolladas
esperaron el supuesto fin del Mundo en el año 2012, en
base a ocho hipótesis científicas y el fin de las
predigitaciones futurológicas de Nostradamus, como el
año del inicio de una nueva civilización y el fin
del calendario maya en el mismo año. De estos
fenómenos socioculturales y psicológicos de los
grupos y masas sociales históricas y coetáneas
develamos una relación dialéctica directa entre los
esquemas del intelecto humano, la memoria colectiva de las
civilizaciones y el transcurso cronológico y progresivo
del Tiempo.
El intelecto humano marca algunos esquemas
existenciales a través del Tiempo. Tales esquemas orientan
el sentido existencial y pueden tanbién originarse de
tiempos futuros hacia el presente. Lo que podríamos
denominar la apocalipsis astronómica desde el futuro
resulta ahora la estrella "Gran anaranjada" a tres mil
años de distancia o un año luz alejada de la
Tierra, la cual se dirige hacia nuestro sistema solar. La
astronomía, sin dudas, desde un punto del Tiempo futuro
nos encamina intelectual y existencialmente hacia las realidades
de la nada, hacia nuestro fin cósmico en nuestro planeta.
El intelecto humano no conoce el principio del principio de la
materia y de la vida, ni puede imaginar con aproximación
la infinitud espacio temporal del Universo, pero el intelecto
humano hipotéticamente ya coincide racionalmente que la
estrella que se nos aproxima puede ser la causa de nuestro punto
final vital y existencial. J. P. Sartre en su obra "El ser y la
nada", enfocó a la existencia humana en el sentido y el
valor vital de cada individuo. El intelecto humano global y en el
plano científico descubre y genera hipéboles
ilusorias referidas al fin natural regular y necesario desde que
un individuo nace. Todo el sentido de la vida humana desaparece
para los filósofos existencialistas con la muerte de cada
individuo.
Las causas materiales y objetivas fuera de
nuestro ser pueden corresponderse con los esquemas ideales o
abstractos del intelecto humano y con la cronología del
Tiempo. Nuestra finitud vital nos programa con esquemas
solipsistas autoilusorios. El hombre contemporáneo crea en
su mente pancartas apocalípticas transportadas de tiempos
pretéritos y futuros y desde su hábitat individual
borra psicológicamente la necesaria regularidad de su
propio fin vital y existencial. En tiempos pretéritos los
esquemas psicológicos de faraones, emperadores, reyes y
zares, frenaron y anularon a los precisos conocimientos del
intelecto. En el año 1395 el jefe militar Tamerlan con un
poderoso ejército antes de atacar Moscú vió
en un sueño a una mujer resplandeciente en el pico de una
montaña por lo cual dió la orden de suspender la
invasión de los poblados rusos. Existen un
sinnúmero de historias sobre el zar Iván ""El
Terrible", el más cruel de todos los zares rusos, sobre
sus temores y estados de pánico que sufría por
algunos de los individuos muertos por su orden. Uno de sus jefes
militares más capaces, el príncipe Borotinskyi fue
arrestado sin causa por la sola razón de tener una gran
capacidad intelectual en las estrategias militares. El
príncipe murió por ser torturado y el zar
Iván cada año visitaba la iglesia que Barotinskyi
con sus propios recursos hizo construir, para rezar por el alma
del príncipe asesinado. Cada individuo en promedio piensa
y crea de acuerdo a las ideas de su época. Leonardo da
Vinci no finalizó sus geniales estudios anatómicos
tridimensionales por respetar la tésis de Galeno (130-200
d.C.) sobre los humores y las relaciones entre la anatomía
humana y la psique. Los conocimientos adelantados quince siglos
de da Vinci no le permitieron transigir las creencias del S.
XV.
Napoleón Bonaparte rechazó la
idea de instalar turbinas de vapor en su armada naviera. Stalin
rechazó la idea de utilizar las innovaciones de la
genética y la cibernética y censuró a su vez
a la psicología por considerarlas ciencias de la
"burguesía". Hitler rechazó la idea de desarrollar
los armamentos atómicos, por la sola razón de no
poder creer en las ocultas potencialidades del átomo. Los
esquemas psicológicos de cada individuo en particular
pueden generar dudas y rechazo a los precisos conocimientos
científicos que descubre y son aplicados por el intelecto
humano. Las fuentes primarias entre los conocimientos y la
psicología de los faraones egipcios y las culturas previas
a la civilizacíón de Grecia Antigua, podemos
ejemplarizarla desde los contextos de los salmos del Libro de
David (1040-970) época enque el intelecto humano se
encontraba a la altura de su primeriza niñez, David en sus
salmos denominó a la vista humana (el ojo, la retina) como
a la inteligencia, en calidad del intelecto humano, por la
razón de que la inteligencia, el intelecto de cada
individuo es la vista del alma del ser humano. Para David
sólo Dios existe sin un principio y sin un fin y, por lo
contrario, la vida humana es muy corta y el Hombre se ocupa de
lograr inconsistentes bienes y acumula riquezas para sus
herederos. La vida física, nuestra vida propia y
particular y la vida que nos circunda es solamente una
agitación vana. Cosecuentemente, para David el total
conocimiento de la pobreza libera a los individuos fieles de los
sufrimientos del Día del Juicio. El ideal de David en sus
salmos es granjear la vida sacrificada y dificultosa.
El intelecto humano, habitáculo
ideoabstracto de los conocimientos y la psicología de cada
individuo y colectiva se proyectó por centurias hacia la
mentalidad de los fieles católicos y contrariamente hacia
el intelecto y la psicología de los fieles protestantes.
No vamos a comentar los orígenes teológicos de
tales diferencias; las dicotomías entre el catolicismo y
el protestantismo, las cuales no principiaron simplemente desde
la declaración de Lutero ni de los fundamentos
teológicos fundados por J. Calvino. La noción del
Tiempo para los protestantes porte un significado de utilidad del
mismo, perder el tiempo inútilmente es una forma de
derroche de nuestra vida propia y el tiempo que nos es concedido
para nuestraa salvación de nuestra alma. Cuanto más
dinero acumula en el transcurso de su vida un individuo tanto
más próxima se encuentra de su salvación.
Tiempo es dinero, frase reconocida mundialmente. Para los
protestantes la unión del intelecto y el tiempo es uno de
los objetivos transferidos de su propia religión. La
razón, el intelecto, el trabajo,la riqueza, la vida
ascetica y el Tiempo para los protestantes fueron los paradigmas
del Mundo protestante y la fe, el trabajo de la cultura de la
tierra y el derroche para los católicos furon
dicotomías de la consciencia y estilos de vidas de los
fieles de las dos confesiones.Los protestantes no lloran
públicamente a sus seres queridos fallecidos, los
católicos los lloran y los musulmanes árabes pagan
a lloronas profesionales cuando un familiar muere. Desde
principios del S. XX desde los epicentros sociales protestantes
se comenzó a anular por completo uno de los postulados del
protestantismo ortodoxo, el de la vida ascética, siendo
socialmente reemplazado por el depoder recibir los más
prolongados períodos de placer, comodidad resultantes de
un menor esfuerzo laboral y hedonismo, pragmatismo y
utilitarismo.
Los esquemas de los conocimientos
científicos desarrollados y acumulados por los hugonotes,
bautistas y metodistas desde el siglo XVIII en los Estados
Unidos, ya se tranfirieron en estereotipos de estilos de vida,
ahora en calidad de esquemas intelectuales y psicológicos
de las masas sociales norteamericanas y mundiales.Entre el
contenido teológicos de los salmos del Libro de David (S.X
a. C.) y los fundamentos teológicos de J. Calvino (s.
XVIII d. C.) y los estereotipos magistrales globalizados de
principios del S.XXI, ya no existen simples dicotomías
teológicoreligiosas, sino que ya lograron transformarse en
verdaderas contradicciones entre el intelecto y la
psicología del promedio estadístico de las masas
sociales mundiales. Un individuo protestante o de
confesión catolica actualmente consideran cualquier forma
de vida ascética como una forma de demencia o como
mínimo una forma de exentricidad o frivolidad de los
individuos que la practican. En realidad,la imensa mayoría
de los fieles de todas las religiones se desenvuelven mental y
activamente en sus polos y circunstancias sociales en
función a los mismos estereotipos de actividades vitales
modelos existenciales informativamente extendidos globalmente y
ya concidentes con los esquemas intelectuales y
psicológicos de las masas sociales contemporáneas .
Las escuelas de la Psicología del S. XX, tanto freudianas
como lacanianas exponen a la búsqueda de placer del Hombre
como una de las formas filogenéticas de su propio ser. El
intelecto, la consciencia de las masas sociales globalizadas
reciben corrientes informativas en forma de pancartas, ideogramas
visualizados y digitalizadas encaminadas hacia modelos temporales
y transitivos correspondientemente extendidas hacia las formas
del ser y la vida de cada individuo en particular y las masas
sociales en general.
Intelecto, Tiempo y Existencia humana son
dos conceptos y una categoría filosófica
independientes entre sí, los conocimientos
científicos ya acumulados y la psicología
individual y social son dos planos particulares de la mente
humana. Las llaves precisas de algunas obras filosóficas
no pueden develar por completo y definitoriamente la obra de M.
Heidegger "El Ser y el Tiempo". Los especialistas que se dedican
a desmenuzar y discernir la obra de I. Kant, "Crítica de
la Razón pura" hasta el momento muchos coinciden que es
una obra indescifrable. Los logros intelectuales varían
con el progreso del Tiempo y regular y consecuentemente
varían los valores y el sentido existencial del ser
humano. Desde finales del obscurantismo medieval hasta la
interactiva conexión internética global
transcurrieron seis centurias y el Hombre reacomodó sus
esquemas psicológicos hacia el intelecto colectivo.
Consecuentemente, sus valores existenciales se descolgaron de sus
métodos mentales hacia sí mismo desde todas las
circunstancias de su entorno social y viseversa, su entorno
social ya puede formar los esquemas mentales y
psicológicos en el intelecto de los individuos,
fenómeno desconocido original y niveladamente para todas
las civilizaciones humanas pretéritas.
Las masas sociales de principios del S. XXI
en su inmensa mayoría ya se autoconvencieron de su poder y
solvencia intelectual y empírica y sus marcos colectivos
psicológicos ya son previamente explanados y dimensionados
informativamente. Sophos y Psyche en nuestros tiempos modernos
fueron transformados simbólicamente en un tornillo sin fin
de Arquímedes, el cono de base del tornillo espoleado
representa a los conocimientos colectivos y el punto extremo del
cono se ajusta a la psicología de las masas sociales. Los
esquemas del inconsciente humano son ilógicos, sin
precisiones cronológicas temporales y los conocimientos
humanos descubiertos y sistemáticamente aplicados ya no
solamente sirven para crear y producir bienes y servicios para la
Humanidad. Los conocimientos científicos desarrollados y
aplicados masiva y globalmente ya sirven para perfilar y
programar los esquemas psicológicos de las masas sociales
interactiva e informativa, pragmática y utilitariamente
conectadas y niveladas. El sentido y el valor existencial de cada
individuo en particular ya se encuentra marcado y perfilado por
sus propios esquemas psicológicos ya formados en su
entorno y circunstancias sociales y culturales. Como regla
general, cuanto más amplios y profundos son los
conocimientos de un individuo, tanto más complejos y
tortuosos pueden ser sus caminos en la búsqueda del
significado de su propia existencia.
El pentagrama invertido descubierto a
través de Google Maps en las estepas de Kazajistán
de 366 metros de diámetro fue ya empleado
históricamente por los mesopotámicos, los
pitagorianos, los cristianos, los masones, los satanistas y los
paganos. En la época mesopotámica fue un
símbolo de poder imperial; en Egipto antiguo
representó una matríz subterránea; en la
Grecia Antigua fue una figura geométrica con cinco ases;
para los cristianos representó los cinco estigmas de
Cristo y en la época medieval sombolizó a la cabeza
del Chivo, si bien para los fieles cristianos continúa
siendo un punto cardinal hacia el reino de Satanás. La
mente y la psicología humana en común acuerdo con
los conocimientos develados funciona en algunos casos con la
espontánea mistificación de los mismos.
Inmediatamente, este pentagrama fue agregado en las
páginas internéticas como una de las "diez
conspiraciones mundiales". Hasta el momento no he leído si
el diámetro del pentagrama coincide con las relaciones
armónicas o los números de Pitágoras, tal
relación se corresponde con 1,61803. Evidentemente que no
tienen correspondencias matemáticas, por lo que podemos
pensar que el pentagrama fue diseñado y construído
con otros fines desconocidos. El pentagrama invertido descubierto
o símbolo del Diablo como fue hace ya por los cristianos
denominado, da lugar a las más absurdas y descabelladas
hipotéticas suposiciones relacionadas con las previsiones
apocalípticas bíblicas. La psicología humana
funciona hiperbolizando los enigmas incluso en los marcos de las
ciencias exactas. Al menos, los dos grandes diamantes rodeados
por un par de círculos entrelazados hallados por medio de
Google Maps en Nuevo México a principios del año
2013, pueden llegar a ser analizados matemática,
lógicocognoscitiva y filosóficamente.
Entre un individuo que habita una zona
semidesértica y practica una vida solitaria y otro
individuo que habita en una jungla urbana, existen
confrontaciones de sus autovaloraciones existenciales. El
individuo solitario puede ser un académico o profesor
diplomado y el individuo que habita en la gran ciudad puede no
leer ni un periódico y sentarse diariamente delante de su
televisor dos o tres horas para ver el mundo visualizado que no
alcanza a comprender del todo. Los conocimientos y esquemas
psicológicos de ambos individuos son dispares por
completo. El individuo que practica la vida solitaria ni piensa
ni desea regresar a las comodidades de la vida civilizada y el
individuo que habita en una gran urbe puede llegar a pensar que
el primero sufre de un estado demencial o místico
incomprensible. El individuo ermitaño puede en el desierto
recrear en su intelecto una parte detallada del mundo urbano o
crear cuadros generales del mundo. El individuo sin
calificaciones intelectuales, habitante de un distrito urbano
opera mentalmente con lo que puede ver y oir y con la
condición de lo que ve se le es mostrado en la calle o en
su televisor o computadora. El profesor solitario sin
conexión telefónica ni internética ni
televisiva, si lo desea puede en su intelecto rememorar detalles,
errores, defectos o vicios de su vida en la cómoda gran
urbe que habitaba. El profesor puede a veces sufrir de llanto
interno por conocer que ya no puede reconstruir las situaciones
en el Tiempo para evitar los grandes errores cometidos en su vida
familiar y laboral. Su intelecto y memoria le permiten revalorar
los innumerables cuadros de su vida a través del tiempo.
Por no tener una profunda fe religiosa no puede perdonar a varios
individuos conque alguna vez mantuvo contactos laborales y
sociales. Tales tipos de personalidades no frecuentemente pueden
llegar a acumular odio ni envidia.
El acedémico se alejó de la
vida civilizada ni por temor ni por odio a su entorno social, ni
para rezarle a Dios solitariamente como los practicantes de
ermita en el desierto de Egipto.Su propio intelecto le
indicó vivir ensimismadamente en un hábitat natural
y agreste sin espejeos sociales e informativos. En sentido
paralelo, cuando un monje cristiano sale de su celda para
dirigirse a la iglesia parte con unos cuadros psicológicos
diferentes a sus cuadros mentales cuando regresa nuevamente. Si
después de la misa dialogó con algunos visitantes
de su monasterio, su intelecto y cuadros psicológicos ya
variaron de su ensimismamiento espiritual de silencio y
oración en el que se encontraba antes de salir de su
celda. Lo mismo ocurre en la mente del académico en su
estepa semidesértica y por el contrario con el gris y
semiignorante habitante en la gran jungla urbana. El hombre de la
urbe diariamente necesita de una dosis de noticias espectaculares
y de poder repetirlas en el bar de la esquina de su casa o en el
club zonal. Lo que habitualmente repite son los títulos y
los factos de los hechos que vió o escuchó sin
poder llegar a comprender las causalidades de la mayoría
de los fenómenos culturales y sociales. Las diferencias
radican en las valoraciones psicológicas de cada uno de
los individuos hacia las circunstancias que lo rodean y la
autovaloración existencial de su mente hacia el mundo real
y virtual que en mayor o menor medida, voluntaria o
involuntariamente, lo rodean y modelan su mente. El espejo de
tales valoraciones funcionan con extremadamente diferentes
dioptrías derivadas del nivel de intrucción de cada
individuo y de la profundidad de autoanálisis de sus
experiencias de vida.
El habitante de la jungla urbana puede ser
un muy buen padre de familia y miembro de la sociedad y como
regla el ángulo de sus espejos sociales pueden ser sus
familiares y los individuos de su entorno social y laboral. El
académico en la estepa no busca ni piensa en placeres
corporales.El ignorante urbano busca habitualmente placeres
fisiológicos ,una ducha caliente, , el sabor de su simple
pero muy grasa comida y el contacto de sus desgastadas relaciones
matrimoniales con el cuerpo de su esposa fantaseando con otras
anatomías corporales y géneros humanos. El valor y
el sentido vital y existencial del ignorante urbano se ajusta al
perímetro de recibir el más intenso y prolongado
placer quasifisiológico. Para los folósofos
existencialistas franceses del S. XX,recibir placer en cualquiera
de sus variantes son formas de la existencia del Ser. Comer
caviar y beber champaña, o comer hamburguesas son formas
de existencia y al mismo tiempo, defecar es una de las variantes
existenciales francesas. Al existencialismo francés de
finales del S. XX podemos equipararlo con los miles de ancianos
fallecidos en sus departamentos parisinos por las altas
temperaturas a mediados de los años 2000. El
existencialismo francés se midió en percatar a los
fallecidos por sus olores cadavéricos.
La ridiculéz del existencialismo
francés tiene sus fuentes históricas, cuando en la
Academia francesa se reían de J. L. Pasteur a la par de
los microbios por él descubiertos. En el año 2013
los científicos franceses descubrieron que el uso de
computadoras desarrolla la imaginación de los
usuarios…En Moscú los embotellamientos
automovislísticos de lunes a viernes retrasan los viajes
entre dos a cuatro horas promedio. Una empresa
automovilística francesa se ingenuó publicitar la
estupidez vital de los moscovitas atrapados en los cuellos de
botellas al publicitar que en los automóviles de tal marca
el tiempo en que los individuos permanecen dentro de los mismos
sólo le pertenece a los dueños de tales
atomóviles. Publicidad para ingenuos en la ciudad con los
mayores embotellamientos automovilísticos del mundo.
Aquí primitivamente funcionan las tres categorías
que en este estudio reciben tratamiento, intelecto, tiempo y
significado existencial. El académico solitario se
desconectó de los medios publicitarios masivos, de los
estereotipos virtuales y reales de la vida moderna, de los
algoritmos y fórmulas vitales y existenciales ahora
globalmente difundidas. El gris habitante de la gran urbe debe
recibir diariamente una dósis informativa y publicitaria o
de alguna novedad escandalosa para poder reacomodar su mente en
su monótona vida. Su mente debe ser inyectada de noticias
atípicas e inusuales para su entrenamiento mental,
analítico y emocional. El significado existencial de la
mediana de las masas mundiales se conjuga entre los trajines
laborales repetitivos y tareas absurdas, la vida con su entorno
familiar y social y todo lo relacionado con las recetas, consejos
y pancartas modélicas que reciben desde los medios de
comunicación masivos.
El
tecnoexistencialismo y autodevaluación
intelectual
A) Desde finales del S. XX, las masas
sociales completaron un nuevo e inusual segmento innovativo del
ya geométricamente acelerado progreso técnico en la
completa espiral histórica de la humanidad. El vocablo
"tecnoexistencialismo" fue acuñado y detalladamente
conceptualizado por quien escribe este estudio en su obra "Los
algoritmos del tecnoexistencialismo" (2007) y "El
tecnoexistencialismo" (2010). Desde los remotos orígenes
de la filosofia, las nociones y sus coincidentes
categorías filosóficas de técnica y
existencia humana fueron conceptualmente incompatibles una con el
otra. Los adelantos técnico-instrumentales, de las
comunicaciones, la cibernética, la informática
computarística e Internet permiten ya conciliar en el
intelecto humano, modelos, esquemas, hábitos rutinarios y
procedimientos socialmente conciliados y masificados. Estos ya
ocupan espacios de pensamiento operativos e instrumentales en
forma de innumerables instrumentos técnicos,
escenarios,pancartas y recetas, los cuales ya alcanzaron ser
evaluados en calidad de objetos complementarios empleados y
aplicados para el maquillaje de la vida y la existencia ya de
miles de millones de individuos. Vivimos en un mundo iluminado
por proyectores lumínicos y en las zonas iluminadas se
encuentran las masas sociales globales. Quienes orientan los
proyectores pueden recibir información inversa de las
actividades y hábitos de los conglomerados sociales
ubicados en las zonas iluminadas. Las masas sociales pueden verse
entre sí mismas pero la visión total de las
superficies y de los diferentes conglomerados sociales iluminados
pueden desde sus perspectivas solamente ser analizadas por los
que orientan y enfocan las fuentes de luz. De tal simple ejemplo,
en el mundo informativo, cultural y económicamente
globalizado en el que coexistimos mental y utilitariamente,
permite que los individuos necesariamente sean
copartícipes voluntarios de la modelación
preprogramada de sus esquemas de pensamiento, hábitos y
estilos de vida.
En el momento que escribo este estudio
(2013),en la revista Science fue publicado un artículo
científico de autores del Reino Unido, Canadá y
EEUU, que establece las relaciones entre la pobreza y los
recursos mentales de los individuos. Fue mostrado que la pobreza
reduce los recursos cognitivos orientados a guiar acciones y
decisiones, por lo que existe una correlación directa
entre la pobreza y los recursos mentales. Si el veinte porciento
de la población mundial vive en extrema pobreza, ya
podemos considerar que por la merma de las capacidades mentales
esta fracción de la población mundial puede ser
premodelada mental y psicológicamente por medio de
recursos informativos y propagandísticos. La
autodevaluación intelectual de esta fracción
estadística de la población mundial no puede
recibir tratamiento, por la simple razón que los pobres y
marginados no tienen estímulos para prestar
atención y orientarse hacia los modelos visualizados por
los canales masivos telecomunicativos globales. La
autodevaluación intelectual de las masas sociales que
aquí analizamos, rige para las todos los grupos que tienen
un sustento mínimo y cumplen algún rol social.
G.F.Hegel y posteriomente C. Marx escribieron que para estudiar
filosofía es necesario como mínimo tener
condiciones materiales aseguradas y el tiempo libre suficiente
para leer. Sabemos que Galeno tuvo cuarenta escribas
transcriptores que grabaron en forma escrita todas sus
investigaciones. Desde los tiempos de la filosofía antigua
griega los ilustrados fueron los únicos que tuvieron
oportunidad de educarse y libertad para poder pensar.
Las cronologías vitales y
existenciales de los conglomerados sociales prebíblicos se
midieron por las consecuciones diurnas y nocturnas y por las
temporadas climáticas de cada año. En la
época medieval las cronologías vitales comenzaron a
medirse por el sonido de las campanas de las iglesias y
posteriormente por las horas medidas por los rudimentarios
relojes mecánicos en las torres de los campanarios de las
catedrales y basílicas. Desde principios del S. XXI las
masas comunicadas interactivamente por las redes globales
internéticas pueden acceder a las bases de datos del
intelecto cibercomputarístico nucleado y acumulado por un
reducido número de epicentros de datos mundiales. Para un
contigente de usuarios Internet es una herramienta de trabajo, y
para el mayoritario resto de los cientos de millones de usuarios
tal recurso ya se transformó en una innovativa forma de
"opio del plueblo". Se formó un hormiguero informativo que
sin dudas permite acceder a bloques informativos simplificados
para las masas sociales globales comprensibles incluso para los
grupos de individuos analfabetos. A principios del S. XX las
estrechas élites de profesionales científicos,
desde silenciosos laboratorios y oficinas universitarias
publicaban en revistas científicas los resultados de sus
investigaciones. En los tiempos coetáneos, cualquier
ignorante o enfermo mental puede publicar lo que se le ocurra
tener en su mente. No encuentro ejemplos precisos para tal
fenómeno sociocultural, aunque podemos recordar que los
conductores de tranvías berlineses frecuentemente lo
criticaban sarcásticamente a A. Einstein porque no
sabía contar monedas.
La "Rebelión de la masas" de Ortega
y Gasset se transformó casi un siglo después, en
una verdadera subordinación mental de las masas sociales
global e interactivamente conectadas por Internet. Después
de la Revolución francesa los marginados sociales junto
con los intelectuales dirigentes revolucionarios forjaron el
terror en la sociedad. La Revolución bolchevique en Rusia
hizo desaparecer a generaciones de profesionales instruidos y las
masas dueñas del poder crearon la plataforma
política al máximo dictador del S. XX, I. Stalin.
Actualmente,vomo afirma el escritor Qiu Xiaolong, "en China sin
Confucio y sin Mao no quedó nada más que el
dinero". En nuestros tiempos las masas sociales conectadas a las
redes sociales internéticas ya generan incoherentes
embrollos informativos neutros e inválidos que solamente
generan ruidos y sombras en el intelecto racional,
analítico y emocional del pensamiento colectivo. Esta
libre posibilidad de expresar ecos y opiniones espejeadas ya
pueden llegar formalmente a encajar con todas las concepciones
utópicas. Toda información, todas las noticias
tienen un valor antes de ser conocidas y otro valor
después de ser conocidas. Los comentarios de las masas
usuarios internéticos desvalorizan y tergiversan las
noticias después de ser conocidas. Paralelamente recuerdo
una cita por mi publicada, cada individuo analiza y puede valorar
las realidades que lo circundan de acuerdo a su propio
centímetro cultural. Es evidente que cada individuo puede
medir intelectual y culturalmente en forma particular cualquier
acontecimiento difundido en forma de bloques informativos. El
valor de la Información fundado en la confrontacion
verdad-mentira y la utilidad e inutilidad de determinada
información, en los niveles del intelecto analítico
de las masas de usuarios internéticos pierden su original
sentido y ya logra transformarse en un absurdo. La
revolución internética permite ya en sentido
paralelo recrear inversamente las demenciales ideas de los
personajes de la novela de Roberto Arlt "Los siete
locos"(1931).
La autodevaluación intelectual de
las masas sociales conectadas a los megavolúmenes
informativos televisivos e internéticos pueden ser
modélicamente ejemplificados como el funcionamiento de la
caja negra ya apuntada en este estudio. Por una abertura de
entrada de una caja negra entran todos los colores del espectro
de la frecuencia de la luz (7), o los mismos del arco iris y por
la abertura de salida se observa una tenue luz blanca. Este
fenómeno físico podemos correlacionarlo con los
procesos intelectuales de las masas sociales. Los televidentes y
los usuarios de Internet reciben corrientes informativas con
altas frecuencias de renovación diaria. De estos
volúmenes informativos, visuales, textuales y auditivos,
en el intelecto de los receptores prácticamente no quedan
restos de información útil (la tenue luz blanca
filtrada). Este fenómeno lo conocemos todos. Al finalizar
la proyección de una obra cinematográfica los
espectadores pueden comentar lo que vieron con un par de frases
cortas. La mente de los millones de individuos interconectados
informativamente borra de su memoria al promedio de la
generalidad de todos los módulos de información por
las vías racionales y analíticas. En la mente de
los receptores son retenidas solamente las imágenes y
noticias advertidas por el intelecto emocional de cada individuo
en particular. En la época medieval los fieles
católicos europeos pudieron memorizar en el idioma
latín una o dos simples oraciones. Los vocablos del texto
de la misa completa fueron incomprensibles para la mayoría
de los fieles por desconocimiento del idioma docto. Esta
particularidad de la mente humana, borrar de la esfera de la
consciencia la información diariamente renovable que
recibe cada individuo en particular es una de las claves de la
autodevaluación intelectual de las masas sociales en los
tiempos coetáneos.
Cada individuo conectado a Internet tiene
derecho de escribir deliberadamente en Wikipedia sobre
algún tema que estudió, leyó ó
simplemente para satisfacer su ego. Si a principios del S.XX
algunos intelectuales se quejaron de que los profesionales
debieron transformarse en especialistas, a principios del S. XXI
el vox populi de las muchedumbres internéticas son las que
escriben deliberadamente las página multitemáticas
de Wikipedia. Tal posibilidad la relaciono con la letra de un
tango argentino que dice que ""es lo mismo una Biblia que un
calefón". Démosle derecho de expresión y
opinión a las masas y los resultados serán que la
teoría matemática del cáos pronto podremos
utilizarla en nuestros ordenadores. Los neófitos y los
egocéntricos tienen tribuna de expresión
interactiva y mundial. El nuevo opio cibernético del
pueblo ahora reemplaza a los libros con resúmenes para
adolescentes. Las disiciplinas científicas en nuestros
días comenzaron a transformarse en apuntes
quasicientíficos difundidos globalmente. Alguien puede
cuestionarme que antes no existió tal libre acceso a la
información y es cierto, pero es donde comienza el defecto
de la era de las comunicaciones interactivas globales. Ninguna
clase de información se encuentra clasificada y
sistematizada. Si armamos un rompecabezas sin una figura visual
de unión sistemática previamente impresa que una
todas las piezas, quien intente armarlo deberá encontrar
las coicidencias de cada una de las piezas que lo conforman,
tarea que multiplica el absurdo trabajo hacia ningún
objetivo formal preimpreso. Exactamente es lo que
intelectualmente analizan las multitudes conectadas a los
buscadores internéticos cuando encuentran millones de
registros sobre cualquier tema.
Para poder llegar a abordar el tema de la
autodevaluación existencial de las masas sociales debemos
desmenuzar la progresiva autodevaluación intelectual,
puente metódico y sistemático que permite
formalmente perfilar e incluir esquemas premodelados en las
íntimas cuerdas del significado y valor de la existencia
individual y colectiva. Las altas frecuencias de reposicion de
los bloques informativos televisivos e internéticos es el
primer escalón hacia el borroneo de casuales visiones y
vocablos por el intelecto racional y analítico humano.
Actualmente ya no existen los gramófonos y tocadiscos
donde los fonogramas grabados en discos podían ser
escuchados en tres velocidades 33, 45 y 78 revoluciones por
minuto. Si escuchamos un disco grabado a 33 revoluciones por
minuto a la velocidad de 78 revoluciones o viseversa, de 78 en
33, escucharemos armonías cacofónicas. Los tactos
musicales acelerados o retardados no podrán coincidir con
nuestro análisis mental o armónico de las notas y
palabras que fueron registradas en el disco. Este simple ejemplo
podemos derivarlo hacia el empobrecimiento del análisis
intelectual de las masas sociales contemporáneas causado
por las contínuas renovaciones de los bloques y segmentos
informativos auditivos y textuales. Las frecuencias de
renovación visuales, las más importantes en la
actualidad, podemos eequipararlas con la visión de un
pasajero de un tren de alta velocidad en movimiento. Cuando el
tren alcanza trecientos quilómetros de velocidad, el
pasajero ya no puede distinguir detalladamente ni memorizar los
objetos y las circunstancias en los espacios laterales del tren a
lo largo de la vía. En sentido analógico, la falta
de concentración analítica de las masas de
espectadores televisivos y usuarios de Internet ya no prestan
atención a los inmensos volúmenes de
información visual, textual y auditiva que permanentemente
se suceden y renuevan por minutos, horas y días. A un
filósofo materialista de la antigua Grecia sentado al
borde de un río le preguntaron porqué lloraba. El
filósofo respondió que lloraba por la razón
de no poder ver las mismas aguas del río.
B) A principios del S XXI los nuevos
generadores de innovaciones coinciden que en el siglo pasado
tuvieron valor las palabras, las oraciones y las ideas contenidas
en las mismas. En el siglo en el que vivimos actualmente las
palabras fueron reemplazadas por cifras. Las simplificaciones
lingüísticas y textuales son reales y sin dudas la
informática computarística nos encamina hacia el
empobrecimiento intelectual de las masas sociales globales. Las
simplificaciones verbales no comenzaron en nuestros tiempos. Los
fieles critianos ya no pueden comprender la semántica ni
la sintaxis de las primeras traducciones bíblicas del S.
XVI del latín a los idiomas vulgares europeos. Las
simplificaciones fueron varias en los últimos cuatro
siglos y ya alcanzaron a ser recortadas con la Biblia
latinoamericana en el idioma español . Las totales
abreviaciones y recortes lingüísticos por su
inutilidad práctica por loque las expresiones verbales ya
son reemplazadas por imágenes gráficas
tridimensionales sin textos. La Infográfíca es el
nuevo idioma internético sin verbos y giros de vocablos y
el cual es un verdadero recorte intelectual de la mente de las
masas sociales coexistentes y futuras. Tales simplificaciones son
un camino hacia la estupidización de las 9/10 partes de
todas las clases y grupos ubicados por debajo del vértice
de la pirámide social global. La informática y las
redes sociales internéticas nos encaminan hacia la
ignorancia y el analfabetismo colectivo y como detallaremos hacia
la formación de todo un contingente de profanos sujetos
iletrados que operan con modelos y esquemas visuales
preprogramados. El uso de teclados ya invalidó la calidad
caligráfica de las masas sociales, si bien la
coordinación de los movimientos de las manos es un proceso
esencial de autoconocimiento. Los subidiomas simplificados del
chateo telefónico e internético ya barren los
conocimientos ortográficos básicos y los giros
gramaticales lingüísticos de los adolescentes en todo
el mundo. El reemplazo de las estructuras de los textos verbales
por gráficos visuales de exposiciones de ofertas
numéricas, estadísticas y probabilísticas,
es una innovativa espira regresiva hacia la devaluación
intelectual de la mediana estadística de la
población mundial informativamente
intercomunicada.
Podemos analizar ejemplarmente la
devalución intelectual de las masas contemporáneas
a partir de una simple definición de I. Kant el cual
escribió "que no es lo mismo tener 100 táleros
(monedas) imaginarias en la mente que 100 táleros reales".
En el mismo estudio especuló que a los táleros se
los podía reducir la cantidad de veces necesarias, o sea,
reducir la cantidad, el peso, de plata de los mismos, pero
siempre serán táleros. El gran filósofo se
olvidó del porqué continuaban siendo
táleros, y lo ideal, lo imaginario, la especialidad del
autor, no fue mencionada. Precisamente los signos y
símbolos fundidos en el metal de las monedas es lo que
permite la idealización o abstracción de lo que se
concebia como tales unidades monetarias. Este histórico
lapsus mentis de I.Kant podemos proyectarlo a las realidades
virtuales con las cuales nos interconectamos. Cien táleros
reales metálicos y cien monedas abstraídas
imaginariamente por mi mente. Los contenidos internéticos
son idealizaciones descodificadas visuales de una infinidad de
tangentes realidades objetivas. Los cien táleros
imaginarios podemos percibirlos y analizarlos mentalmente. Yo
imagino un millón de dólares depositados en mi
cuenta bancaria y puedo extraerlos con mi tarjeta de
crédito o débito electromagnética. Si me
conecto a Internet puedo acceder a los táleros imaginarios
y no salir de tales marcos de idealización. Los objetos
imaginarios pueden corresponderse con los objetos reales, pero
nuestra imaginación siempre desborda a nuestra
razón. Supongamos que un obrero o gris empleado navega por
Internet o mira televisión por cable varias horas diarias.
Las páginas de sexo son las más visitadas
mundialmente. Es normal que cualquier persona pueda desear o
imaginar lo que en realidad no tiene y no puede acceder a
tenerlo. Lo imaginable puede transformarse en la mente de
cualquier individuo en fetichismos imaginarios y pensar en dos
dimensiones, una de acuerdo a la gris realidad en la que vive y
la otra las realidades visuales que le muestran e
imagina.
Pitágoras (570-495 a. C.) no fue un
visionario del mundo de las cifras en el que nos dimensionamos.
Para Pitágoras el mundo estaba configurado por un orden
numérico. Para Pitágoras los números son
cosas en sí. Los ciframientos numéricos
coetáneos ya lograron transformarse en cosas en sí
con relación a las estadísticas inversas de las
masas. Los números de oro o relaciones armónicas
pitagóricas, desde los intervalos musicales o las
relaciones aritméticas de la escala musical, los
números de Fibonachi, la relación matemática
de la distancia de los planetas de nuestro sistema solar de
Kepler, las relaciones de proporciones de L. daVinci, las
relaciones de los tactos musicales de Bach y Mozart derivan de
los números de oro pitagóricos. La
información visual digitalizada nos aleja de las
relaciones armónicas o de los números de oro
pitagóricos, al margen de lo que porta tal
información, verdad-mentira, útil-inútil,
real o ficticia. Los vocablos, el verbo, desde los
orígenes de las primeras civilizaciones forjaron el
intelecto racional y analítico de la humanidad. El
análisis masivo de infografías e imágenes
fotográficas sin textos explicativos genera ahuecamientos
intelectuales que nos regresan hacia la infancia de la raza
humana. Los algoritmos de los programas computarísticos
fueron codificados y las masas de usuarios de computadoras
reciben información visual, textual y auditiva
descodificada. La vista humana tiene una resolucion visual de 576
megapixeles y las fotografías y fotogramas de alta
resolución alcanzan actualmente 20 megapixeles. Las
asimetrías de las armonías pitagóricas se
originan entre las desigualdades de los volúmenes
difundidos de información visual y los insignificantes
volúmenes de información verbal y
lógicocognoscitiva. Las consecución infinita de
imágenes visuales como vínculos ideoperceptivos del
intelecto humano pueden llegar a transformarse en resultados de
cálculos matemáticos preprogramados que
puntualizarán cronográficamente la vida de las
masas sociales comunicativamente interconectadas.
La Biblia para analfabetos, las
representaciones iconográficas religiosas del
cristianismo, fueron durante toda la época medieval (S.s
X-XV), las únicas fuentes ideoperceptivas y
lógico-cognoscitivas de veneración de casi todos
los conglomerados sociales europeos. La comunicaciones globales y
sus contenidos visuales ya nos regresan gnosológica y
teleológicamente en el tiempo y nos encaminan hacia un
nuevo segmento de la espiral dialéctica de
devaluación del pensamiento racional y analítico de
las masas sociales, comunicativa e interactivamente aunadas.
Miles de millones de individuos alfabetos, social y laboralmente
vinculados, comienzan a borrar de su intelecto los
cuestionamientos sobre el lugar, valor y destino que ocupan sus
vidas en la sociedad y en el mundo. Las masas estudian y trabajan
y los individuos en particular se transforman en pequeños
tornillos de la sociedad. Los borroneos mentales son paralelos
gnoseológicamente a las pancartas y escenarios visuales
difundidos sin explicaciones lógicocognoscitivas y
analíticas. Las figuras rupestres de los
cavernícolas fueron la primera forma de expresión
creativa de la raza humana y tales íntimas cualidades
filogenéticas imaginativas se mantienen y renuevan en
nuestros tiempos hacia una neutralidad mental y
psicológica por medio de bocetos y mudas expresiones
visuales digitalizadas y premodeladas. El mítico
Sísifo subía rocas hacia el pico de una
montaña y las arrojaba hacia el abismo una y otra vez.
Sísifo tuvo un programa en su mente con algoritmos muy
simples, esforzarse en subir las rocas y luego disfrutar visual y
espiritualmente el arrolador vuelo de las mismas hacia abajo. Las
grises masas, sin leyendas, realizan menos claros y precisos
automatismos operacionales que Sísifo en su mito. El
propio héroe mitológico organizaba su demente
éxtasis a partir de sus propios esquemas mentales y con su
propio esfuerzo físico. Las masas sociales
contemporáneas operan activamente con automóviles,
aparatos, instrumentos técnicos, computadoras y programas
ideados y fabricados por otros individuos. Los sociólogos
utilizan el neolismo de "cajanegrizar", para explicar que las
masas de usuarios ignoran por completo el funcionamiento interno
de los aparatos e instrumentos altamente tenológicos que
diariamente usan.
Existe una lógica interna y externa
entre el Intelecto, el Tiempo y la devaluación intelectual
de las masas sociales de principios del S. XXI. En el siglo XVII
en la Universidad de Harvard fueron reformados los programas
universitarios al eliminar todas las disciplinas
científicas "medievales", o del catolicismo,
todavía dictadas en las universidades europeas. El nuevo
programa creado por los protestantes, hugonotes y baptistas se
basaba sobre discilinas "tecnológicas", matemáticas
y ciencias naturales aplicadas, simplificando todas las
inútiles disciplinas humanitarias europeas. En el S. XX
Norbert Wiener (1894-1964), creó y fundamentó la
Cibernética, núcleo teórico básico de
la creación de las computadoras. En su libro
"Cibernética y sociedad",(1950) anticipó
matemática y lógicamente el mundo de las
comunicaciones automatizadas e interactivas en el que actualmente
nos dimensionamos. El conocimiento para Wiener se encuentra
coligado e infaliblemente relacionado con la comunicación,
y el poder con el control y la evaluación de los
propósitos humanos. Directamente los servicios
analíticos estadístico-probabilísticos de
las actuales redes sociales internéticas!!!. A principios
del S. XXI, el principio de "la negación de la
negación" en la espiral de la historia humana de G. F.
Hegel funciona con una similar precisión que la de un rayo
laser. Las reformas de los programas universitarios en Harvard en
el S. XVII, actualmente se retroproyectan hacia la realidad al
reducirse drásticamente el interés de los
estudiantes estadounidenses por estudiar ciencias humanitarias y
en especial literatura, historia, filosofía y
religión.
La devaluación intelectual de las
masas sociales coetáneas tiene sus fundamentaciones
científicas históricas. G. W. Leibniz (1646-1716)
en su obra "El arte de las combinaciones" (1666), catalogó
a las combinaciones matemáticas como un "gran arte" sobre
las cuales los descubrimientos se basan en las "primeras
verdades" y los que permiten con los métodos de la
lógica inferir y deducir a todo el sistema de
conocimientos denominados por el autor como principios de la
Ciencia Universal. Leibniz, quien descubriera el sistema binario
de unos y ceros utilizados en los programas
computarísticos actuales, fue el primero en suponer sobre
la posibilidad de la modelación de las funciones del
cerebro humano por medio de máquinas utilizando "modelos
matemáticos". En el S. XX, J. von Neumann (1903-1957),
fundador de los programas computarísticos en base al
sistema binario de Leibniz, escribió que las altas
matemáticas tendrán enormes repercuciones sobre el
pensamiento moderno. Neumann creó las relaciones entre la
cibernética y los ordenadores, compilando los principios
de la programación en base a su teoría de los
juegos y poder demostrar la capacidad que tienen las
máquinas de reproducirse. Las ideas de Leibniz y von
Neumann ya se objetivizaron en los sistemas
computarísticos y las deducciones de todos los sistemas de
conocimientos ya se sintetizaron pragmáticamente en el
análisis de los comportamientos de las masas sociales
usuarias de las redes sociales internéticas.
Una de las más serias limitaciones
causadas por la recepción de las actuales constelaciones
informativas audiovisuales, es que en sí mismas portan
esquemas simplificatorios lógico-cognoscitivos que al ser
idealizados se traducen en un erróneo entendimiento
analítico entre las formas y los contenidos de los bloques
difundidos. Gran parte de los objetos y sujetos difundidos sobre
supuestos o imaginarios contextos no pueden llegar a coincidir
con la más básicas conclusiones
lógico-matemáticas, factor que acelera el
debilitamiento intelectual de las masas de receptores de
información. Si mancomunamos las relaciones lógicas
entre las formas y los contenidos de las constelaciones visuales
televisivas, internéticas y artísticas a
través de las esencias matemáticas descubieras por
K. Gödel (1906-1978), podemos hallar desfasajes entre la
idealización y el análisis de aquellas formas y
contenidos. Una de las esencias matemáticas descubiertas
por Gödel es la demostración de que los
números portan simultáneamente contenidos
lógicos y objeto-materiales. Por ejemplo la
consecución de los números naturales: 1, 2, 3,
4,….n puede ser resuelta lógicamente pero su
tranferencia hacia una infinidad perfecta requiere del traspaso
del nivel de pensamiento lógico hacia los objetos reales o
materiales (una mesa, dos mesas etc.). La unión de dos
infinitudes potenciales y actuales se revela en los
cálculos de números irracionales y al emparejarlos
con las consecuciones de los números racionales. Los
espectadores de las corrientes informativas y en especial los
niños, no siempre pueden llegar a diferenciar si los
personajes y objetos visuales programados
computarísticamente son auténticamente reales o
imaginarios. Internet es una hidra con muchas cabezas y las
probabilidades para confundir lo real con lo inexistente ya es un
paso grave del desfasaje lógico más básico
de la mente de las masas sociales globales.
Actualmente Google, Yahoo, Facebook,
Twitter y Apple utilizan el sistema de análisis de
información inversa de los usuarios recibida a
través de las cookies, o el ya reconocido guarismo
estadístico-probabilístico "Bigdata". Este programa
funciona por intermedio del análisis de los patrones
comunicativos de los modelos de imitación y por medio de
algoritmos permite modelar por las preferencias en Internet los
comportamientos y los deseos de cada usuario en particular y
agrupar a los diferentes grupos de usuarios en general. Por
cifras y transformaciones algorítmicas se puede develar
con alta probabilidad el nivel intelectual, los rasgos
psicológicos individuales y las acciones actuales y
futuras de un usuario en particular conectado a la red
internética. Cada usuario puede ser estudiado
estadística y probablísticamente por sus
preferencias en los buscadores y redes sociales
internéticas. Todos las actividades sociales de un usuario
puede ser vista en Bakers Social Visits que interactúa con
Google Analytics. Todos los movimientos espacio-tiempo de un
individuo portador de su ordenador o teléfono celular
pueden ser vistos por el servicio de geolocación de Map
Box y los datos de Twitter. Los modelos de Leibniz ya no son
simples inferencias y deducciones abstractas, son ya los
cuadrantes intelectuales y psicolgógicos de entrada y
salida de información cifrada antes y después de
ser recibida por las masas sociales global e interactivamente
conectadas. La fórmula de la informacion emitida y
recibida, las redes sociales las transforman en niveles
entrópicos del intelecto social global. Los
cálculos probabilísticos de salida o de
información inversa recogidos por las redes sociales
internéticas pueden ser una fuente de los sistemas de
conocimientos informáticos de premodelación
racional, analítica y emocional de cientos de millones de
individuos. El homo viator ya se transforma en el homo
interneticus, el hombre en las búsquedas virtuales
premodeladas de sus copiados modelos intelectuales, vitales y
existenciales. En la obra de S. Brandt "La nave de los locos"
(1494), según la opinión de M. Foucault, las naves
de los locos eran navíos simbólicos que
conducían a dementes en busca de razón. Ahora
millones de individuos navegan en Internet en función a
esquemas y modelos y plantillas visuales connotadas que
previamente recibieron informativamente.
El valor de la información en
general, se mide por su guarismo antes de ser recibida y
después de ser recibida y por la simple resta de dos
logaritmos cuadrados. Esta fórmula tiene su valor vigente
en nuestros tiempos, pero debemos señalar ciertas
características innovativas de la publicidad y sus efectos
y resultados en nuestra era internética, la cual ya
refleja la autodevaluación intelectual de las masas
sociales, comunicativa e informativamente interconectadas. El
intelecto colectivo ahora puede ser modelado sin encuestas
estadísticas y probabilísticas realizadas por
sociólogos. Desde principios del siglo XXI ya no se les
pregunta a las masas de consumidores qué ellos desean y
porqué ellos realizan lo que realizan. Las encuestas ya no
tienen ningún sentido realizarlas. Los especialistas en
publicidad ya lanzan campañas publicitarias
conceptualmente diferentes que las de a finales del siglo veinte.
Los algoritmos visuales, verbales y las urdimbres
escénicas ya son orientadas por sus formas y contenidos de
idealización hacia la esfera subconsciente de los
espectadores y potenciales consumidores. Encaminar las
campañas publicitarias hacia los actos irracionales de las
masas de consumidores de mercancías y servicios, ya
evidencia la clara endeblez racional y analítica del
intelecto de las masas sociales coetáneas. La
autodevaluación intelectual colectiva ya monigotea
mentalmente a las masas potenciales y reales de consumidores a
nivel mundial.
La esfera subconsciente humana no opera con
patrones cronológicos temporales ni con medidas de
unidades espaciales. El tiempo y el espacio cuando un individuo
duerme no tienen ninguna configuración precisa con las
métricas del intelecto racional, analítico y
emocional de la esfera consciente de cada individuo. Ligar las
precisas necesidades causales del intelecto humano con los
bocetos irracionales e ilógicos del subconsciente
individual y colectivo, sólo fue posible por la
simultaneidad e interactividad de las comunicaciones globales.
Los puentes que pueden unir los ocultos deseos irracionales con
el intelecto racional de diferentes categorías de
potenciales consumidores de mercancías y servicios son ya
aplicados en las campañas de publicidad. Las claves de
tales herramientas psicológicas son descentrar los
conocimientos (intelecto racional y analítico) hacia los
deseos y representaciones mentales derivadas de la esfera
subconsciente de cada individuo. En los bloque publicitarios
actuales se satisface la razón crítica; se crean
sensaciones de confort; se cambian por completo las plantillas de
las formas culturales vulgares o tradicionales; se descentran las
asociaciones cognoscitivas y se modifican visualmente las
sensaciones. Los principios de la publicidad actuales nos
demuestran las claves dela progresiva e irreversible
devaluación intelectual de las masas sociales
contemporáneas. Todos los principios enumerados se
relacionan con mecanismos conexionistas y el modularismo de la
mente humana. El procesamiento de la información liga
imágenes visuales simbólicas en calidad de
activación racional y la utilización de un lenguaje
y conceptos próximos a los que utiliza el intelecto humano
en el procesamiento de información. El intelecto promedio
de las masas sociales coligados por plantillas publicitarias
premodeladas ya podemos analizarlo por medio de las
teorías naíf de la mente humana de
Fodor.
Las companías publicitarias
encontraron una nueva fórmula que efectiviza las
campañas propagandísticas sin el uso de urdimbres
técnicas, me refiero al uso ya prohibido de ultrasonidos,
o el efecto del cuadro 25. Los principios métodicos arriba
enunciados, ya aplicados en la difusión publicitaria
mundial, se basan en la síntesis de los conocimientos con
los deseos de cada individuo y la mediana estadística de
las masas de receptores de los mensajes publicitarios. Si estas
reglas ya funcionan en la práctica, ya superaron y son
inversas a la teoría del lenguaje del pensamiento humano
de J. Fodor (1935). Fodor explicó el paradigma del
procesamiento mental de la información. En su estudio "La
modularidad de la Mente" (1983), dividió a la mente humana
en dos esferas de procesamiento de la información; los
sistemas de "entrada" o analizadores, y los sistemas "centrales".
Los sistemas de entrada son modulares por ser bloques en forma de
cápsulas inabordables e inaccesibles al sistema central el
que hipotéticamente es un sistema de "fijación de
creencias". Fodor postula que lo único que es posible
demostrar empíricamente son los sistemas de entrada, por
ser modulares. El sistema central de la mente humana
empíricamente no puede ser mostrado. De este postulado se
confrontan dos esferas sin conexión evidente, los
conocimientos y los deseos de cada individuo y los estados
mentales intencionales (actitudes proposicionales y
representaciones mentales).
Si calibramos diferencialmente las claves
empleadas en las campañas publicitarias actuales,
descubrimos que los actos irracionales de las masas de
consumidores de mercancías y servicios reales y
potenciales son estimuladas publicitariamente hacia el sistema
central de Fodor (intencionalidad, representaciones mentales), y
del mismo deriva analógica, asociativa e irracionalmente
hacia el sistema modular de entrada de información. Lo que
sorprende, es que tal inversión del tránsito de la
información entre las dos esferas mentales, coincide con
los postulados de la Teoría económica de la segunda
mitad del S. XX. "La mayor parte de los actos económicos
son irracionales", y si no lo fueran, cada individuo
calcularía o mediría detalladamente todos sus
gastos de compras y por tanto no sería posible el
crecimiento de los multiplicadores económicos. Es
más que evidente la deducción de la
devaluación del intelecto de las masas sociales por efecto
de las comunicaciones sistematizadas e interactivas globales. Los
ilógicos símbolos de la esfera subconciente humana
se retroproyectan asociativamente en la esfera consciente
racional, analítica y emocional en la mente de cada
individuo en cuadrantes intencionales con las plantillas y
contextos de las tramas escénicas publicitarias percibidas
visual y auditivamente. Las espontaneidades irracionales
compaginadas por pancartas analógicas a los ocultos deseos
de la esfera subconsciente se reactivan en la irracionalidad de
los actos de homo oeconomicus. Las masas sociales mundiales,
evidentemente ya comenzaron a perder las abscisas y ordenadas
analíticas de su intelecto al realizar actos derivados de
huecos modelos visuales sin precisos puntos cardinales de
razonamiento. Las redes sociales internéticas ya emplean
métodos de formaciones de rebaños de los grupos
sociales, denominado clúster o cúmulos, la
acumulación de datos portadores de información,
para luego ordenarlos en grupos con parámetros parecidos.
Estos grupos estadísticos ya expresan las
intencionalidades de los individuos en cualquier centro urbano de
cualquier país del mundo. La posibilidad de transparentar
las intencionalidades e imágenes mentales de la esfera
subconsciente hacia el intelecto racional por medio de
estímulos audiovisuales, ya es una espira de la
involución mental colectiva sin precedentes
históricos al menos desde finales del medioevo.
Si las campañas publicitarias
modelan audiovisual y textualmente imágenes
análogas a los espejismos del subconsciente humano, ya
podemos confirmar que unas visualizaciones son imágenes
holográficas recíprocas y coincidentes con las
intencionalidades y representaciones mentales de las masas
sociales globales. El significado de las imágenes externas
se desdoblan con los deseos, intencionalidades y fantasías
de las imágenes de los sueños que alcanza a
recordar cada individuo. La irracionalidad de los actos en los
planos económicos del sujeto, pueden estar unidos a sus
esquemas egocéntricos, sus ocultos deseos sexuales y a
toda la infinidad de sujetos y objetos que recuerda de sus
sueños. Este es un mecanismo profundamente estudiado por
la Psicología del cual aquí no nos ocupamos. El
intelecto racional humano se borronea bajo los destellos
irracionales de la esfera subconsciente al no poder encontrar
puntos cardinales que orienten a los individuos en el mare magnum
informativo internético y televisivo en el que deben por
necesidad dimensionarse socioculturalmente. Las oraciones y los
textos lingüísticos se proyectan en el intelecto
racional y analítico de cada individuo que los lee; las
imágenes visuales con cortos textos no necesitan ser
desmenuzadas mentalmente. Sabemos que cuando un individuo mira
una obra cinematográfica su semiesfera cerebral racional
descansa. Todo cierra hacia lo que en este estudio abordamos, las
nuevas técnicas comunicativas ya canalizan y forjan el
ahuecamiento intelectual de las más amplias masas sociales
globales, sin diferencias de nacionalidades, edades y sexos. El
empobrecimiento de la amplitud racional y analítica del
Hombre es el primer jalón que lo encamina hacia la
autodevaluación del sentido, el significado y el valor de
su propia e individual existencia.
Los ejes sociales de pensamiento
históricos fueron modelados y manipulados por los
emperadores en la antigua China; por los faraones en el antiguo
Egipto; por los emperadores romanos; por La Iglesia
católica en el Medievo y por el Partido comunista en la
época de la Unión Soviética. Las
arbitraridades y el voluntarismo de una persona o un reducido
grupo de individuos pudieron orientar el pensamiento de millones.
El gran experimento histórico mundial fue el
soviético, el cual cerró, censuró e
interfirió todos los canales de información
externos. La devaluación intelectual del pueblo
soviético tuvo su fuente en la manipulación de la
información periodística, literaria,
radiofónica y televisiva. Si bien fue el pueblo más
lector de literatura clásica del mundo, después de
la desaparición del régimen comunista y la apertura
deliberada de todos los canales comunicativos mundiales,
transcurridos veinte años, Rusia tiene el mayor
coeficiente progresivo de analfabetismo de Europa. La apertura de
las corrientes informativas occidentales arrasaron con la
práctica de la lectura de los rusos y la
infográfica, la música, las ahuecadas formas
culturales globalizadas e Internet devaluaron la calidad y las
precisiones gnoseológicas básicas de los
conglomerados sociales en la época liberal
democrática rusa. En la mente de los conglomerados
sociales rusos coetáneos se proyectó un "mundo de
arlequines" (N. Nabokov),vestidos con ropas extranjeras, con
costumbres socioculturales sin tradiciones históricas, que
viajan en automóviles de lujo y que parcialmente reconocen
límites morales y éticos. El modelo de los efectos
de los ilimitados volúmenes informativo-culturales y
comerciales y sus denotantes, las mercancías occidentales,
puede ser un prototipo a nivel mundial de los efectos de las
corrientes internéticas sobre la mente de las masas
sociales coetáneas global e interactivamente
comunicadas.
Las masas sociales mundiales
intercomunicadas interactivamente sobre dimensiones
geográficas globales, tienen la posibilidad de acceso
ilimitado y con insignificantes diferencias temporales entre la
emisión y la recepción de la información. El
análisis de una estrecha fracción de los
volúmenes de información difundida, es para cada
individuo por su propia cuenta una labor imposible de realizar.
Delante del individuo aparecen millones de segmentos de una
figura de rompecabezas sin coincidencias formales mutuas. Es por
eso que los guarismos de los "grandes datos" (Bigdata), son
auténticamente válidos por ser cifras
estadísticas sin detalles lingüísticos. Las
cifras estadísticas (de salida), transformadas en
guarismos probabilísticos, son una nueva forma de
modelación intelectual y emocional de las masas sociales
interconectadas por Internet. Entre las formas y los contenidos
visuales y las noticias de "entrada", (las formas y los
volúmenes de información previamente difundidos), y
sus efectos resultantes de "salida", (las frecuencias de
conexiones a determinados bloques y páginas por los
usuarios de las redes internéticas), funcionan casi sin
explicaciones verbales, ahora sin el histórico
argumentado, razonado y reflexionado Logos. Los resultados de las
sumas estadísticas de conexiones hacia determinadas
páginas internéticas se representan en forma de
coeficientes y gráficos escalares sin letras, palabras y
oraciones lingüísticas, las mismas por su inutilidad
práctica y utilitaria quedan al margen de los
infográficos. La mente y los actos de las masas sociales
ya se corresponden con megacifras reducidas por cálculos
probabilísticos sin que sea necesario explicarlas por
medio de anotaciones verbales.
Uno de los más graves problemas
globales que se inició con el empleo de Internet y que
demuestra los nuevos condicionamientos para la devaluación
intelectual son los nuevos valores entrópicos de los
idiomas. De acuerdo a la Teoría de la información
desarrolada por Claude Shannon (1916-2001) la utilidad de
cualquier bloque informativo puede medirse por medio de la
fórmula de la entropía y es posible muy
sencillamente de comprobar si analizamos la cantidad de bloques
informativos en Internet en idioma inglés y los comparamos
con la cantidad de bloques sobre el mismo tema en otros idiomas.
Los idiomas de pequeñas naciones reciben corrientes
informativas limitadas y ello implica a la información
útil y todas las simplificaciones de errores, ruidos y
redundancias. El idioma inglés es el más empleado
en el mundo y sin considerar al idioma chino, que no tiene
ninguna relación directa con los idiomas occidentales y
además en China pocos dominan idiomas extranjeros, por lo
que el idioma inglés actualmente tiene el menor valor
entrópico informativo internético. Cuanto mayor es
la cantidad de bloques informativos útiles tanto menor es
la entropía informativa de cada idioma. De tal principio
deducimos que en la blogosfera la entropía de los idiomas
aumenta con el siguiente orden: id. inglés, ruso,
alemán, español, chino, francés,
japonés, árabe, portugués, y todos los
otros- (11%), (Global Internet usage, 2013). Para determinar la
entropía de cada idioma usamos la relación de los
contenidos lingüísticos para sitios en la web (no
usamos la relación de usuarios por idioma!!). Los cuadros
internéticos proyectan aproximativamente las realidades de
los conocimientos globales solamente en idioma inglés y en
menor medida en idioma español. No solamente las
diferencias son cuantitativas, si analizamos la calidad
informativa de Wikipedia en diferentes idiomas, nos
sorprenderemos de las abimales diferencias cualitativas de la
información publicada que existen entre un idioma a otro.
Quines dominan un solo idioma de un pequeño país
deben conformarse con las limitaciones informativas de su propio
idioma en las páginas y bloques internéticos. En
los idiomas húngaro, finlandés, búlgaro,
eslovenio, checo, rumano y el resto de los idiomas limitados por
el pequeño número de poblaciones, podemos
estadística y probabilísticamente perfilar una
futura devaluación intelectual de los pueblos de aquellas
naciones. El intelecto humano ya puede ser representado como una
pirámide en la cual en el vértice superior se
encuentran las reducidas élites intelectuales portadoras
de los conocimientos globales.
Nos dimensionamos mental y activamente en
un nuevo mundo medido, calculado y orientado por cifras. En un
mundo que borronea al milenario Logos- ideas, pensamiento,
sentido, (concepto, principio, causa, fundamento) de las cosas y
los acontecimientos. El Logos en calidad de recurso verbal y
discursivo de las esferas socioculturales fue un representante de
la específica de los paradigmas mentales y comunicativos
desde las épocas bíblicas. Las cifras y
gráficos estadístico-probabilísticos de los
"grandes datos" no contienen ni expresan al Logos, expresan
numéricamente los deseos y los actos individuales o
grupales, muchos de los cuales fueron previamente
informativamente programados en forma de inductores de
preferencias y deseos. Por medio de los cálculos de los
grandes datos es posible pronosticar la cantidad de espectadores
de una obra cinematográfica en el primer fin de semana
después de su estreno, con una aproximación del 94
porciento. Por medio de los androides de las computadoras es
posible saber si un automóvil es conducido por su
dueño u otra persona. Todas cifras con resultantes
despojadas del Logos formador y estructurador de la mente humana.
Como antes apuntamos, el Hombre ya pierde sus capacidades
caligráficas por el uso de los teclados de las
computadoras. La caligrafía fue una práctica de
reconocimiento en calidad de expresión racional y
emocional de cada individuo como lazo neuronal del cerebro con
los movimientos de la mano. Si la humanidad desecha al Logos por
su práctica inutilidad, las masas sociales ya
estarán preparadas a transformarse en funciones de
"entrada y salida" de premodelados y decodificados paradigmas
televisivos, informáticos e internéticos. La mente
humana es probable que llegue a funcionar como los sistemas de
autoregulación cibernética al igual que los
sistemas homeostáticos de los programas
computarísticos boceteados por Leibnitz, formulados por
von Neumann y desarrolados por W. Gates.
Los psicólogos nos indican que las
ratas al no poder salir de un laberinto experimental
especialmente diseñado y construido, finalizan la
búsqueda de una salida golpeando con su cabeza un espacio
del carton lateral hasta suicidarse. Las masas sociales
embrolladas en las redes internéticas no es posible que
lleguen a actuar de igual manera. El intelecto humano se
dimensiona ideal y activamente de acuerdo a las leyes de la
entropía de la información. Para explicar tal
concepto diremos que si los lectores de este estudio encuentran
en el mismo pasajes útiles la entropía es baja
(organización de ideas aplicables), o si a este estudio
los lectores lo consideran inútil la entropía es
alta (desorganización de ideas y pensamientos). Toda
información tiene un determinado nivel entrópico;
ejemplarmente los pronósticos meteorológicos o los
informes de embotellamientos de tránsito
automovilísticos generan orden y organización, son
útiles diariamente y por tal razón portan una baja
entropía informativa o son noentrópicos. Las
constelaciones informativas y publicitarias televisivas e
internéticas difundidas mundialmente, por encima de que no
pueden ser captadas en su totalidad, generan ruidos neutrales por
su inutilidad y en conjunto portan una alta entropía por
no generar estructuras lógico-cognoscitivas de pensamiento
analítico en la mente de las masas de receptores. La mente
de los espectadores de cuadros visuales sin contenidos de
análisis funciona como la caja negra antes apuntada, los
individuos pueden recibir megavolúmenes de imágenes
visuales sin contextos de pensamiento y espontáneamente se
borronean de su memoria. La entropía informativa de tales
constelaciones de ruidos informativos es alta, por la causa de
que no pueden crear segmentos de idealización
lógico-cognoscitivos de pensamiento. El alto nivel
entrópico de las constelaciones informativas "basura" se
proyectan sobre la calidad racional y analítica
intelectual de las masas de receptores. La mente humana no puede
armar una figura lógica de un rompecabezas con millones de
segmentos sin concomitancias formales correlativas.
El homo interneticus de los tiempos
modernos ya tiene dificultades para continuar siendo "el hombre
volante" argumentado en la obra de Avicena (980-1037), que nos
indica la capacidad humana de poder percibirnos a nosotros mismos
de manera inmediata como una función autoreflexiva del
hombre. Si un individuo navega varias horas diarias en Internet
sin objetivos prefijados utilitarios, el mismo pierde su propia
capacidad de autoconciencia con relación a las realidades
visualizadas y los cortos mensajes que puede ver y leer. El
sinnúmero de bloques informativos que un individuo puede
llegar a ver, se borronean y desaparecen de su memoria en el
transcurso de minutos. Tal individuo no podrá idealizar
opiniones de valor por la propia segmentación y
reducción temática y contextual de los bloque
difundidos. Es lo mismo que leer dos párrafos de las
trecientas páginas de un libro. Para los asiduos
navegantes internéticos, las constelaciones informativas
son percibidas y superficialmente analizadas y podemos en sentido
cognoscitivo compararlas con el análisis de las visiones
percibidas de un registro de video acelerado. El cerebro humano
es un sistema de registro que se autoengaña. La mayor
parte de las representaciones del Hombre se fundamenta en lo que
puede recordar y no en lo que él padeció y
sobrellevó en realidad. El cerebro humano cuando intenta
concentrar su atención en un sinnúmero de
problemas, filogenétivamente no se encuentra preparado
para prestar atención a sus reales problemas y a su vez
poder llegar a concentrarse en las constelaciones informativas.
Esto fue fundamentado en la obra de J. Haidt, "The Happines
Hypothesis", "Nuestra parte emocional es un elefante y nuestra
parte racional es un jinete. Aparentemente es el jinete quien
maneja y administra al elefante, pero su control es muy
débil. En cualquier momento el elefante de seis toneladas
puede ir hacia donde se le le ocurra".
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